𝐓𝐨𝐨 𝐌𝐚𝐧𝐲 𝐅𝐚𝐜𝐞 •𝙲𝚑𝚊𝚗𝚐𝚕𝚒𝚡•

CAPÍTULO DIECIOCHO

El viaje fue silencioso y la tensión se podia cortar como una hoja, la buena noticia era que Felix estaba durmiendo y su madre bebió en el camino por lo que el ya sabia, era el unico despierto ademas del conductor. El ojinegro veia las facciones relajadas del menor y seria una tortura despertarlo cuando lleguen, para el serian dias callados, para Felix nl sabia como serian y tampoco le costaba imaginarlos.

Al llegar a la casa de los Seo, la mujef fue la primera en bajar y ella queria ayudar al rubio en llevarlo a su habitacion, pero Changvin le frenó cargando a Felix en brazos.

--Te acuerdo de una vez por todas...--susurró en el oido de su madre para que Felix no escuchara--El no es Hanbin y no te vengas a comportar como buena madre con alguien que no es tu hijo.

Sin esperar titubeo de la mujer, siguió de largo tomando escaleraa arriba y chocando con la mirada confusa de su padre, entró a su habitacion y recostó a Felix en su cama, el dormiria esos dias en su sofá que estava al lado de su cama. Estaba demasiado cansado y aoebas era el inicio de sus migrañas, quedo en dilecio sentado frente a Felix, lamentando haber venido con el rubio, sus padres ahora se pondrian quisquillosos y eso seria una pesadilla.

La mano de su padre se poso en su hombro acariciandoen circulos y como vuelan las habladurías; este miraba con los obos cristalizados al rubio aue dormia como bebé en la cama.

--Debemos hablar--dijo su padre en tono de demanda.

--Yo tambien necesito hablar con ustedes--se levanto para salie con su padre fuera de la habitacion, caminarln ak despacho de su padre y ahí ya se encontraba su madre--Antes de todo quiero dejarles algo en claro--pegó a puño cerrado el esceitorio--No se acerquen a Felix como si fuera Hanbin, el no sabe de su existencia y menos de su parecido.

--De eso te queriamos hablar--su padre bebio un shot arrugando su cara--¿Estas seguro aue no es el?

--Oh por Dios--Changbin froto su cien con rabia expandiente, en verdad sus padres estaban creyendo semejantes locuras--No, no es el y por favor les repito, alejense de Felix.

--Pero...--la voz de su madre se escucho quebrantada--no solo queriamos hablar de eso--la mujer se sentó junto a su esposo--Changbin nos llamaron del psiquiátrico.

--¿Y eso que?--se cruzo de brazos frente a los mayores.

Felix desperto con calma mirando a todos lados he inspeccionando en donde carahos podia estar, se levanto de la cama viendo ek estenso lasillo de por medio, cerro la puerta cln sugilo y fue escaleras abajo, tenia hambre y no encontraba a Changbin en ningun lado, al llegar a lo que se supone que era la cocina un chico de cabello azul se quedó quieto como hielo al verlo.

--Discukpa, me puedes dar algo de comer--susurro apenado Felix. El peliazul apenas se movio por la mesa tomando unos panes y colgandolos frente al rubio, habia pasado todo tipo de cosas para que este preparara su comida--Gracias.

El peliazul seguia expectante frente al rubio, pensaba que veia un fantasma.

--Soy Felix--corto el intenso momento con el azulado, quien carraspeo para acercarse y tomar su delicada mano.

--Yo soy JunHwan--sus ojos picaban y ahora tenia unas inmensas ganas de llorar.

Felix se alimentl, hablo un rato con el chico a pesar de estar claro de lo incomodo que era, no queria parecer descortes, pero esas miradas no las dejo desapercibidas.

Aunque haia algo aue llamaba su atencion, la mitad de todos los cuadros biológicos estaban cubiertos de una manta blanca y polvoriento.

Recorrió con sumo cuidado cada rincón de la casa, hasta que llego a una gigantesca puerta de un color abedul, no entro al igual que con las demas pero si pudo oir al pelinegro hablar con su padre y al escuchar algo que no debia, un nudo se alojo en su garganta, su estomago dolia y ahora no sabia si era porque la comida tal vez haya estado envenenada o por lo que acababa de oir.

Camino rwcto a la habitacion de Changbin sin perderse ya que esta de un color diferente al igual que la que estava en frente. Su intriga y descaro aparecio de la nada acercandose a la puerta frebte a el, dl pomo estaba lleno de polvo y cuabdo la estaba girando...

--¿Felix?--Chanhbin enrollo sus brazos alrededor de Felix, plantando un beso en su cuello--no lo hagas, mis padres tematarian si la abres.

--¿Que hay adentro?--miro fijamente la puerta ignorando la posicion en la que estabab el y Lee.

--Es la habitacion de mi hermano, por eso te digo que no entres--beso nuevamente su cuello--deberias seguir durmiendo.

--No tengo sueño--seguia mirando la puerta, algo le pedia entrar mas no podia y debia respetar mientras nadie lo estuviese mirando por ahora.

Con la mirada de Changbin supervisando que entrara a su habitacion, el ojiengro cerro la puerta cuando Felix entro.

--Tu casa es muy grande--comento de la nada el rubio.

--¿Ya la exploraste?-- tragó duro esperando que dijera que no.

Felix asintió.

-¿Que viste?- indagó con una mirada indiferente.

- Nada interesante, solo fui a la cocina y conocí a un peliazul. - - se metió bajo la sabanas con la mirada sorpresiva del ojinegro.

--Conociste a JunHwan... --susurró, el mundo le estaba pagando todo lo que había hecho, estaba claro.-- ¿Te dijo algo?--Felix negó.

Felix estaba en la nada, no tanto por las cosas que escuchó sino que a el nadie le había dicho la situación de Changbin, su cielo estaba en llamas y ahora sentía culpa.

--Changbin... --llamó Felix al ojinegro que están solo a centímetros de el.

-- Dime, Lixie-- el mayor abrazo al rubio contra su pecho.

--¿Porque no estas en la cárcel si has matado a muchas personas?-- su voz sonó extremadamente baja, pensó que Changbin no lo había oído, pero si lo había hecho.

-- No lo se.--se alejo un poco para mirar las orbes marrones del rubio, algo no estaba bien ellas, y eso le colmó la paciencia.--¿Porque la pregunta?

-- Nada. -- se alejo del rubio enrollándose en las almohadas, apretando fuertemente las sabanas.

«Esto no es fácil... » su mente divagaba y pensaba que el no debía estar ahí.

No es mi culpa, el se lo buscó.

Ya Felix se había acostumbrado a esa aterciopelada voz, tanto que no le presto la atención he hizo todo por dormir.

Se levantó a mediado de las cuatro de la madrugada, después de tanto pudo ver a Changbin durmiendo en el sofá que estaba a su costado, se acerco a el con una mirada fría.

-- ¿Porque no me dices la verdad?-- susurró al dejar un beso en su frente y volver a la cama fría y solitaria.