Capítulo 12

255 20 2
                                    

Hyejoo observaba a su esposa de manera extraña.

Chaewon siguió los pasos de la embajadora de Zerzura, hasta que se perdió entre los demás invitados, dejó ver una sonrisa de satisfacción y después viró hacia el objeto de sus afectos.

-¿Pasa algo Hyejoo? – Le preguntaba por la manera poco común en la que le observaba, alzó su ceja izquierda esperando por alguna respuesta.

-Sí que sabes cómo manejar a esa araña – Respondió al fin con una sensual sonrisa que hacía que quien la divisara sintiera que se derretía.

-Bueno, no podía soportar que te estuviese incomodando – Se acercaba y con sus dedos, delicadamente le delineaba las cejas que hace un momento estaban fruncidas.

-¿Cómo sabes que me estaba fastidiando?– Le retaba Hyejoo.

-Mmm ~ al parecer interrumpí tu momento con Yerim, estamos recién casadas ¿y ya buscas otras opciones? – Le contestaba con una sonrisa que escondía un poco de malicia, un lacayo con bandeja en mano pasaba oportunamente y Chaewon alcanzó una de las copas para tomar un pequeño sorbo de esta, nunca quitando la vista de su esposa, mientras tomaba observaba de manera libidinosa su cuerpo.

Hyejoo de pronto alzó las cejas y las volvió a fruncir, observó a otro lado y se abrazó como si tuviese frio.

-En serio, deberías dejar de hacer eso – Comentaba observando a los comerciantes charlar.

-¿Hacer qué? – Preguntaba Chaewon de verdad confundida, tanto por los ademanes que su esposa hizo como por lo que dijo después de estos. Hyejoo entonces le miró directo a los ojos logrando enviarle un escalofrió.

-Ser irresistiblemente hermosa... y deseable– Añadió después de unos segundos para volver a mirar otro lado.

-¿Irresistible... mente? – Le preguntó entretenida y agradablemente descolocada por la confesión, tomó un paso adelante dejando escasos centímetros de separación entre las dos.

–Chaewon~ - Le llamó, aún observando a los comerciantes y con reproche en la voz.

-¿Sí? – Con la mano que no sostenía la copa, alcanzó una de las hebras de su fino cabello oscuro, observándolo a conciencia.

Hyejoo entonces la miró con su ceño fruncido; Chaewon estaba enajenada con su cabello, extranjera a su expresión.

-¿Sabes?... – Decía con voz baja y cargada de sentimiento, logrando atraer las pupilas rubí a su rostro.

-... A veces siento miedo, porque es algo muy extraño lo que me pasa cada mañana al despertar a tu lado – Tomó un respiro al reconocer una mano en su mejilla, tocándola suavemente– No sé por qué en ciertas ocasiones me creo a punto de llorar, cuando veo lo hermosa que eres, lo linda, tierna y delicada – Chaewon frunció el ceño cuando vio que los ojos verdes se pintaban un poco de rojo en la periferia y se aguaban– Y me pregunto ¿Cómo puede ser? – Se llevó la mano a la boca y tosió para poder contener un poco sus emociones– Me pregunto ¿Cómo es posible que estés enamorada de mí? – Antes de que pudiese decir otra cosa Chaewon se acercó para plantarle un beso rápido.

-¿Cómo puedes pensar eso, Hyejoo? – Sin poder creer lo que la chica le decía preguntaba – Sí alguien debe de...-

-¡Hey! ¡Qué buena fiesta! – Decía Heejin de manera emocionada, el matrimonio se separó de inmediato; mientras que Chaewon le lanzó la mirada más venenosa de su repertorio, Hyejoo llamó a un mozo para tomar unos canapés. Heejin tragó fuerte ¿Había interrumpido algo?

-Eemmm, creo que cramalon... eeem... clamaron mi nombre – Y acto seguido desapareció entre las masas, tenía la costumbre de hablar de manera incorrecta cuando estaba muy nerviosa o demasiado emocionada.

La Bestia Y La Domadora (Adaptación al Hyewon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora