Un Almuerzo en Angie's

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American Dandy
Historia de una Dandy Americana

Episodio Tercero

Un Almuerzo en Angie's

La mañana es bastante activa para Willow Park, desenfadada y exitosa empresaria de la ciudad, desde pequeña había iniciado un régimen de ejercicios para controlar, en un principio, un exceso de peso que al inicio la acomplejada de modo un tanto notorio, aunque a más tarde fue para mantener la apariencia feroz y andrógina de un efebo olímpico que había ganado.

Comenzaba nada más al abrir los ojos, la acomodada hija de la ciudad, pese a su impresionante fortuna y gusto por las excéntricas piezas coleccionables, solía dormir en un futón esponjoso exportado de Japón directamente, tras abrir los ojos solía levantarse, doblar el futón, guardarlo y comenzar su rutina de belleza matutina.

Sacaba de la nevera una bolsa con hielos que procedía a aplicarse en el rostro para disminuir la hinchazón del sueño de la noche anterior y las ojeras probables.

Luego, aún con la bolsa de hielo en el rostro, caminaba hasta el lavabo del baño, su caja de primeros auxilios detrás de su espejo Onika de plata de ley era una farmacia de analgésicos, antidepresivos y otros más pintorescos tipos de Valium tanto recetados como ilegales, se cepillaba los dientes con fruicion y tras aplicar con especial fuerza aquella mañana el hilo dental, brinda ante su imagen con la copita de enjuague bucal.

Toda una ganadora.

Su boca estalló en llamas al saborear el enjuague, al parecer se había limpiado con el hilo tan fuerte que se lastimó sin querer haciendo brotar sangre.

Tras abrir la bolsa de hielos la vacía en el lavabo que está lleno de agua cristalina a través de la cuál se ve la base de mármol del lavabo de baño de Park, espera diez segundos y ahora sumerje el rostro en aquella helada y cristalina pureza buscando purificarse.

Por alguna razón se siente muy sucia.

Cuando saca la cabeza del agua helada se siente renacida, plena, poderosa, capaz de dominar al mundo de así quererlo.

Se siente al fin como la Willow Park que sus padres habían adoptado, querido, criado y enseñado a destrozar a los demás como un tiburón asesino.

Sigue un baño completo donde primero enjuaga su cuerpo, claro,  esto tras mojar toda su porcelánica perfección con cuidado, con jabón de pastilla para luego tallarse, aún con el jabón en la piel, con una toalla de baño bien impregnada con jabón líquido de hombre, a decir verdad, Willow prefería las marcas de hombre a las de mujer, no es que se sintiera en la necesidad feroz de ser un cliché de lesbiana citadina, en absoluto. Era porque simplemente le gustaban aquellas robustas esencias y le acomodaban a sus necesidades inmediatas, en eso coincidía con Luz Noceda aunque eran extremos totalmente opuestos con lo que respecta a gustos.

Por ejemplo, Willow prefería las escencias atrevidas y juveniles del Ace Vice en su kit de baño como jabón, jabón líquido, shampoo, acondicionador y gel para cabello aunque aquel día prefería dejar a la bestia libre. Iría con el cabello suelto.

Luz prefería el equipo de baño de Old Spice y para el cabello, sonrió al recordarlo, Triatop con Monoxidil, al parecer, la sonriente y triunfadora Noceda tenía caspa y alopecia. Aquello la hizo sonreír aún más marcadamente.

En cuestión de esencias corporales, Willow prefería más el Steffano como antitranspirante y la escencia del Drakkar Noir para rematar todos sus trajes empresariales.

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