Capítulo 1

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Canción: the one that got away- Katy Perry

Canción: the one that got away- Katy Perry

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Oporto , Portugal.

Hace 5 años...

Giselle

«El amor tiene la capacidad de unir personas distintas, mundos distintos. El amor es el acto donde dos personas se conocen, se aceptan y se aman. El amor suele ser para siempre, a veces solo es un instante y otras veces, solo es un punto donde individuos desconocidos se cruzan, te hacen extremadamente feliz y de la nada... desaparecen. ¿A caso es el amor algo pautado por el destino o simplemente es una casualidad, algo con que tropiezas si tienes suerte?»

Encontrar al chico perfecto suele ser difícil, y más en esta era moderna, pero cuando eres la paseadora de perros de los vecinos del lado, eso puede cambiar.

Naveen de Simone, es ese tipo de chicos que a plena vista parece narcotraficante, engreído, arrogante y todo lo malo que pueda existir, pero cuando lo conoces, te das cuenta que bajo toda esa capa externa de dureza existe un chico dulce, amable y amoroso, pero también, ese chico alocado y divertido. Es alto, tanto que parece un avestruz por lo delgado que es, su piel es morena y digamos que eso lo hace atractivo para las chicas de por aquí, su cabello negro y alborotado, sus ojos marrones oscuros, su cara perfilada y ¡Dios, es tan perfecto! Ok, la cosa no iba por ahí... pues como decía, es un chico demasiado atractivo para fijarse en mí, una chica con apenas quince años, de cabello corto y algo desarreglado, de estatura pequeña pero no como un minion y piel pálida .

Pero supongo que el destino me tenía otra cosa preparada...

Naveen llegó a la ciudad una semana antes de navidad, sus abuelos son mis vecinos y cada veintitrés de diciembre hacen una festa de churrasco (fiesta de parilla). Como vecindad nos reunimos en el patio de su casa, los adultos ayudaban a hacer las carnes y aperitivos, mientras los niños jugaban con pistolas de agua o brincaban sobre el trampolín y los jóvenes amargados solo se sentaban en una silla a chismorrear en sus redes sociales a través del celular (no me incluyo porque mientras yo estaba en el baño jugando temple run, mi padre llamó a la puerta y por el susto lo tiré por el escusado, jamás servirá). Entonces pasó, ese chico que de por sí ya llamó mi atención, se acercó a mí y me dijo...

— ¿Tu vida es tan aburrida que para poder entretenerte debes de verme fijamente?- me dijo el muy estúpido mientras elevaba una de sus cejas y una sonrisa ladina se formaba en sus labios. Ok, no voy a negar que lo estuviera viendo, pero en mi defensa ¡No era fijamente!

—¿Qué dices? Solo estaba viendo la gran mancha que estaba al lado tuyo porque parece un cocodrilo comiéndose a un camello.- Mentí, descaradamente y fue una mentira muy mala.

—Sí, claro. Y yo soy un mono.- dice, sarcásticamente

—No es mucha la diferencia- le dije mientras lo miraba divertido.

Lo que ayer no pudimos serDonde viven las historias. Descúbrelo ahora