Tentación inocente [Kookv]

7

Incitación candente

Parecía un completo acosador, pero en mi defensa, ¿a quién se le ocurre cambiarse en un momento como este y en un lugar como lo era una oficina de una Escuela Preparatoria?

Pero sin duda, aunque suene muy mal de mi parte jamás olvidaría lo que mis ojos presenciaron, aquel bóxer negro jamás saldría de mi cabeza. Todo mi cuerpo palpita al recordar aquella parte remarcada que dejaba su bóxer.

Al ser un hombre de, ¿qué? ¿25 años? Era obvio que estaría muy bien dotado.

Pero joder.

Que hombre.

Sus piernas eran anchas, muy bien formadas y.....un poco duras. Las venas se le remarcaban demasiado haciéndolas lucir muy repelentes, ¿unas piernas pueden llegar a ser atractivas?

Sus pies no eran ni tan grandes ni tan pequeños, estos ya eran atrapados por sus zapatos.

Pero cuando mi mirada subió para admirar su nuca noté que se había dado cuenta de mi presencia. Me estaba observando de forma confundida.

Oh, ouh.

No me dio ni tiempo para escapar o huir de aquel incómodo momento porque al segundo escuché su voz - Llega temprano - alza ligeramente sus cejas - Muy bien, adelante - me toma varios segundos captar lo que me dice - ¿Por qué sigue aún ahí, Kim?

- Pe-pero - abro la puerta aún sin dar un paso hacia adelante - ¿No-no le molestó?

- ¿Qué? ¿Qué me viera así? - se señala a sí mismo, yo solo asiento con mi cabeza - Ay, por favor - sonríe bobamente - Somos hombres, Kim. ¿Por qué debería molestarme? - no respondo y no es porque no quiera, si no porque realmente no sé que decirle - ¿Cuánto tiempo lleva ahí parado?

- Uh - sacudo mi cabeza ignorando por completo aquella sensación que me provocó verlo, me adentro en la oficina y después cierro la puerta - No mucho, ¿unos segundos? - miento.

- Bien, no hay tanto problema - observo como toma su camisa y después comienza a ponérsela - ¿Cómo sigue de su espalda?

Que mierda le importa.

- Bien, ya no me duele tanto - cruzo mis brazos - Sin duda los tratamientos de la Doctora nunca fallan.

- Ya veo - sonríe sin mirarme. Termina de abotonar su camisa y después me pide que lo siga - Su siguiente tarea será en otro lugar.

Decido no responder, siempre termino con una tarea estúpida encima que me vuela la cabeza de una forma irritante.

Le ayudo a cerrar la puerta de su oficina para después seguirlo. Se suponía que era la hora de salida, algunos alumnos apenas se iban, uno que otro nos echaba un vistazo, pero no pasaba de eso.

Detuve mi caminar al ver finalmente al lugar al que íbamos.

La biblioteca.

Aquel lugar que nadie visitaba por flojera, pero que era un poco oscuro con rastros de suciedad, ya que estaba realmente descuidado. Los maestros no se molestaban en mejorar esta instalación.

La bibliotecaria siempre se iba después del almuerzo, eso solo significaba una cosa.

El Director Jeon y yo estaríamos a solas.

Dentro de un lugar oscuro sin nadie al alrededor.

Que.......suerte.

- ¿Por qué se detiene, Kim? ¿acaso tiene miedo? - su mirada retadora me asquea.

Aquí vamos otra vez.

- ¿De usted? - suelto una carcajada falsa - Por favor, no se crea tan..... - le doy un recorrido con mi mirada de pies a cabeza - Intimidante.