10

4.2K 360 132
                                    

"Deseo acumulado"

















Mi pulso está acelerado, aún me siento agitado, tan agitado que podría desnudarme aquí mismo.

Nuestras miradas siguen unidas, pero sé que no podré hacer algo al respecto. Él está molesto por mi impulsividad y yo no le pediré perdón. Me retó y a mí nadie me retaba.

- Tarde o temprano esto no seguirá quedándose así - mi voz es la prueba misma de mi excitación - Acaba de llegar a mi límite y yo jamás me quedo sin algo que quiero - sus cejas se fruncieron - Podrá jugar con mi cabeza, pero, ¿qué cree? Usted no es el único que sabe jugar y si caigo - doy un paso hacia delante - Usted caerá conmigo.

- Ya veremos quien caerá primero - inclino mi rostro - Yo sé lo que quiere - relamo mis labios mientras le miro con sumo interés - Pero usted jamás será lo que yo quiero.

- No me diga - fingí desilusión - Todos los débiles caen - respondo con seguridad.

- ¿Y usted ya cayó?

Mi mandíbula se crispó.

Manténgase en un lenguaje corporal firme, nunca busque tener la razón, ese es el error más grande que puede cometer. Si quiere responder ante algo hágalo con sabiduría y respeto.

Antes de responder tuve que tomar aire, debía ser inteligente, traté de controlar mi cuerpo relajándome pensando en que debía ser más listo que él, no debía caer en su provocación, así que decidí ser sincero por primera vez - Sí - confesé - Desde el primer día en el que lo vi.

La satisfacción que embargó a mi cuerpo cuando miré a su rostro palidecer no se puede medir con nada en el mundo, sonreí con superioridad regalándole una mirada mía recorriendo su cuerpo de pies a cabeza en un intento de intimidación. Después de eso no dije nada más y me fui.

Comenzaba a comprender algunas cosas, la verdad podría llegar a ser una muy buena arma letal que podría usar en su contra.

Era el momento de crear un nuevo, mejorado, ingenioso, tentador e inocente plan.

-/-/-/-

Cuando llegué al departamento Jimin me recibió con la comida del día, me platicó de algunos chismes que corrían en la Preparatoria sobre que una chica trató de insinuársele al Director Jeon, pero este ni la miró, no le hizo ni el más mínimo caso, hasta podría decir que pasó de ella.

Eso me hizo pensar demasiado, ¿acaso sólo jugaba conmigo?

Y la pregunta que más rondaba en mi cabeza era, ¿por qué yo?

Y la respuesta llegó por si sola después de unos rápidos segundos.

Yo no era como los demás, él lo sabía. Yo era diferente, prepotente y nada estúpido.

Después de la comida cada quien se fue a su habitación, yo aproveché para buscar en mi armario algún conjunto que pudiera ponerme para mañana. Quería usar algo distinto a mi gusto personal.

Algo más....provocativo.

Desde que lo vi por primera vez siempre noté el buen gusto que tenía el Director Jeon en el ámbito de su estilo propio, sus conjuntos siempre gritaban masculinidad.

Ahora yo tenía que encontrar un buen armamento.

Estuve toda la tarde buscando, realmente no tenía nada atractivo guardado, pero luego recordé una vez un regalo que me había hecho Tania hace unos meses. Me había comprado una prenda de ropa un poco peculiar.

TAMBIÉN TE GUSTARÁN









































Tentación inocente [Kookv]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora