⌗ Roses | Jenlisa

🌸02🌸

— Jisoo Unnie!

— ¡Aish! — se quejó — es que con tan solo verla me pareció una imbécil

— Pero no la conoces del todo Jisoo

— Y a mi me cae mal

— No tienes remedio — Lisa había escuchado todas las maldiciones de su amiga por la forma en como le habló Rosé— uhm...unnie

— ¿Qué pasó? — una vez ya calmadas se dirigieron al patio trasero donde casi la mitad de la Universidad también habitaba.

— Esa chica llamada Jennie...creo, creo que es mi Alfa — habló avergonzada.

— ¿¡Qué!? — gracias al grito algunas personas lo vieron — par de chismosos — se quejó — bueno, dime como es eso de que crees que es tu Alfa

Una vez sentadas en el césped se acomodaron.

— Es que, mayormente en todos los alfas y omegas percibo dos olores, pero en ella percibí tres olores, aparte que...mi Omega se puso alterada y ya quería lanzarse encima de Jennie — así es, ya sabía el nombre de su Alfa gracias a Rosé.

— Tienes razón pero...¿No piensas en ir y ya ser su novia, verdad?

— ¡N-no! — gritó avergonzada — sé que es mi Alfa pero no la conozco tanto y no se nada de ella, mi mamá me enseñó que por más que encuentre a mi Alfa primero debo conocerla correctamente

— Y eso debe ser, así que esperemos que ella aparezca — dicho eso se echó en el tronco del árbol.

— Pero también podría hacerlo yo, no siempre los Alfas deben dar el primer paso — dijo Lisa tímida.

— ¿Y si piensa mal de ti? — se sentó nuevamente — pensará que ya estás necesitada por obtenerla y nunca debes dar esa imagen tuya

— Pero no lo haré con esas malas intenciones, simplemente seré su amiga hasta conocerla correctamente, anda Jisoo, ayúdame — jaloneo a la mayor poniendo ojos de cachorro.

— ¡Te aprovechas de mi porque no me resisto a tus caras! — gritó con el corazón acelerado.

— ¿Sii?

— Esta bien, ahora déjame descansar un rato

— Y así es como ganamos en esta vida — dijo su lobo interior.

Lisa sonrió triunfadora y también quiso descansar un poco, así que se echó en las piernas de su amiga.

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— ¿¡Cómo así!? — gritó Jennie — ¿Si sabes que recibirás una paliza por esa chica verdad?

— Nah, no lo creo, soy irresistible — Rosé acarició su cabello.

— Como no te rompe los ovarios por atrevida.

— ¡Llegó por quién lloraban! — Irene hizo aparición.

— ¿Mi perro? — preguntó Rosé ganándose un golpe fuerte en su espalda — ¡Ahhh!

— ¿De qué me perdí? — preguntó.

— De mucho — contesto Jennie.

— Nuestra Jennie ya encontró a su omega

— ¿¡Qué!? ¿¡Cómo es que me perdí de esto!? — se tocó el pecho dramática — ¡Ya es toda una señorita!