Mi Director (Ereri) [Terminada]

Extra 01

Atención: Los personajes mencionados a continuación no me pertenecen, lo que verán es pura ficción y cosas sacadas de mi cabeza.
No permito la adaptación y mucho menos la copia de este fanfic.

[...]

Cinco años habían pasado de aquellos sucesos, sucesos que nadie quería mencionar ni aunque sea por casualidad, a pesar de ser un año importante pues había nacido el hermoso niño a causa del amor de ambos padres también había sido el año en dónde el castaño casi perdía la vida.

Levi nunca contestó el mensaje de Farlan y aunque quiso denunciarlo Eren se negó completamente a esa idea, ya que no quería más problemas y sólo se quería concentrar en el futuro de su hijo, o mejor dicho su familia, logró convencer a Ackerman proponiendo luego que para ambos era una buena idea ir a terapia. Esto les ayudó mucho a seguir con sus vidas logrando que Jaeger tome el valor de salir nuevamente a la calle.

Hubieron muchos cambios en la vida de ambos, Eren continuó con sus estudios y estaba a punto de graduarse con el título de arquitecto, teniendo ya un trabajo en una empresa en crecimiento, en cambio Levi había dejado su trabajo como director para concentrarse en criar a su hijo y también en parte por la petición del castaño, al principio no estaba de acuerdo con esa decisión pero terminó aceptando a cambio de que Eren le dejará volver a trabajar si se encontraban en una difícil situación económica, lo cuál dudaba mucho que sucediera.

Su hijo, Falco, cada vez parecía crecer más y más, había sacado la personalidad extrovertida de su padre, era un niño inquieto y muy creativo, haciendo notar su inteligencia, eso hizo que el azabache se quedará más tranquilo al saber que al menos había heredado algo bueno de él.

— ¡Papá! — Exclamó un niño agitado golpeando la puerta del baño en donde se encontraba Levi. — Iré a jugar con el vecino, su mamá dice que no te preocupes porque nos va a cuidar.

La voz del niño se notaba ansiosa, quería una respuesta rápida de su padre pero al no recibir ninguna sólo logró que comenzará a impacientarse.

— ¡Papá!

Volvió a llamar pero esta vez haciendo notar su disgusto al ser ignorado por su progenitor.

Pero Levi aunque quisiera responder no podía, sentía que su voz se había ido y sus manos temblaban sosteniendo la prueba de embarazo indicándole que era positivo, ganas de llorar y un nudo en la garganta era lo que sentía en ese momento.

— ¿Papá? — Preguntó preocupado Falco, estaba a punto de abrir la puerta cuando finalmente escuchó una respuesta.

— Esta bien, ve.

El niño por más inteligente que fuera a su corta edad aún había cosas que no entendía por eso mismo se fue a jugar con su amigo sin notar la voz quebrada del azabache, quién tuvo que tomar varias bocanadas de aire para soltar esas tres palabras.

En cuanto la puerta se cerró se dejor llevar por todos los sentimientos que chocaron contra él, haciéndose ovillo en el cuarto del baño y llorando desconsoladamente.

No recordaba cuál era el momento en que se había descuidado que terminó embarazado nuevamente, y no era como si no quisiera al futuro hijo o hija si no que le hacía recordar todo lo que tuvo que soportar hace cinco años atrás, todo el dolor y la tristeza que pasó por incidentes inevitables. Tampoco sabía cómo reaccionaría Eren si se enteraba, ya que ninguno de los dos había planeado tener otro bebé.

Estuvo varios minutos o tal vez una hora sentado en el suelo hasta que logró calmarse, aunque quisiera no podía estar mucho tiempo ahí encerrado sabía que en cualquier momento llegaría el castaño y debía preparar el almuerzo, él siempre llegaba a casa con hambre.