Capítulo 3

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Desperté con otra pesadilla y llorando a mares. Bajé a la cocina y me tomé un vaso de leche, moría de hambre.
Eran las 8:00am y ya la señora estaba ahí.
—Hola mi niña como amaneciste?

—Muy bien señora.

—No me digas señora, dime maría.

—Disculpe maría! Y mi tía?

—Se fue al trabajo, dijo que venía temprano porque su esposo llega de viaje hoy y quiere que cenen todos juntos ya que la niña cassie llega hoy también.

—Ahhhh ok.

—Que quieres desayunar pequeña?

Ufff otra más diciéndome pequeña, detesto que me digan así, me siento frágil e inútil. Sé que no tengo la gran estatura, pero tampco soy tan bajita.

—Lo que sea María.

Me sirvió panquecas fresas y jugo de naranja, y como soy alérgica a la fresa tuvo que cambiar mi desayuno por tostada y mermelada de cereza.
Luego del desayuno subí a mi cuarto a desempacar y a quitar el desorden que tenia en mi cama.
Mas tarde me quedé dormida y unos gritos me despertaron, Dios aquí no se puede dormir en paz? Y como siempre mi adorada tía lucy acababa de llegar y como había cena esta noche estaba paranoica.

Bajé a la cocina y tomé una manzana, cuando me dirigía a mi cuarto tía me dijo que la cena era a las 7:00pm y que me pusiera linda, pero como no quería cenar no bajaría y solo usaría pijama.
— Tía no bajaré.
—como que no farah? Tu tío y tu prima estarán aquí hoy, sé amable y baja a conocerlos y compartir con ellos.

—Ok!

No quiero discutir, así que acepté.
Más tarde ya era hora de la cena, me puse un vestido negro por mis tobillos de tirantes y unas converse del mismo color, pelo recogido y cero maquillaje solo labial natural.
Me veía bien por lo menos. Tenía mucho que no me veía al espejo y hoy me vi, mis ojos hoy eran avellana (sí, mis ojos cambian de color) no se veían tan apagados y mi piel menos seca.
Al bajar vi a un señor supongo que es mi tío y una chica muy hermosa debe ser cassie mi prima, tez blanca, pelo castaño como el mío y un poquito más alta que yo, parece modelo muy parecida a tía lucy.
Y yo solo quería subir a mi cuarto otra vez.
—Farah cariño ven aquí!

Terminé de bajar yyy —hola!

—Farah el es Eduard mi esposo y tú prima cassie.

—Ho- hola
Cassie se acercó y me abrazó, hola prima! Se que nos llevaremos muy bien. Uff se ve que es empalagosa la cassie.

—Sobrina es un gusto conocerte, sabes que cuentas conmigo para lo que sea.

—Gracias tío Eduard.

La cena fue tranquila yo solo me dedique a jugar con mi comida y tía a observarme, los demás no notaron mis ganas de sobrevivir y eso me alegra. Otro día en el mismo escalón!

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