Capítulo 21

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Hoy era el día en que mi mamá y mi mejor amiga regresarían a casa. Cassi quería que saliéramos a comer helado, era tipo despedida de Ross, no me negué porque quería pasar tiempo con ella. Cabe destacar que mi prima casi se roba a la ingrata de mi mejor amiga, cosa que me hacía sentir celosa y a la vez feliz porque nos llevábamos super bien y no habría motivos para distanciarnos.

El vuelo era en la noche, así que teníamos tiempo de salir y divertirnos. El clima estaba frío puesto que se acercaba el invierno, opté por vestirme con un super abrigo y un super pantalón que según cassie cabían 5 yo, no me importó tal comentario porque me sentía cómoda y no estaba de ánimos como para llevar otro outfit.

Fuimos al centro comercial donde cass y Ross anduvieron el maldito centro de la primera a la 5 planta, juro que si no hubiera sido la despedida de esa ingrata me hubiese quedado en casa, llegamos al último piso, entramos a un establecimiento de comida rápida y nos sentamos en la esquina cerca a una ventana de cristal, ahí nadie podía molestar ya que no quedaba en el medio. El mesero llegó por los apuntes y todas pedimos lo mismo, patatas fritas, hambuguesas triple queso y maltas.
30 minutos después el mesero regresó con nuestro pedido y nos dispusimos a comer.
Al salir del centro comercial nos dirigimos a la mejor heladería del mundo mundial donde preparan los mejores helados.
Ross se para de repente y yo solo la miro con una ceja alzada —espera ese no es tu futuro novio fah?

No se de que mierda hablaba pero cuando giré a donde ella miraba estaba nada más y nada menos que Noah, auch directo al corazón, una chica pelinegra, tes blanca estaba sentada frente a él con su mano tomada, me sentí incómoda, no eran celos ¿o sí? bueno no lo sé porque no me interesa, pero me sentía extraña y molesta.

—no me interesa Ross

Y efectivamente me sentía tan molesta que ni el punto helado me apetecía.

Estaba sentada en la mesa, pero no era yo, solo quería salir de ese lugar, Ross y Cassie ordenaron, como ya sabían mi sabor favorito no hubo necesidad de decirle.
Ellas me hablaban y yo solo asentía, estaba sumida en mis pensamientos.

¿Quien será ella? Su novia, su esposa o qué? Y mierda si que me sentía ardida.

Antes de que mi helado llegara pedí un permiso y me dirigí al baño de chicas.

Noha

Hoy no fui a trabajar ya que habíamos agotado todo el trabajo en las dos semanas anterior y como era sábado lo tomamos libre. Nora me invitó a nuestra heladería favorita acepté porque la tenía medio abandonada y sus reclamos ya me fastidiaban.

Llegamos a la heladería y tomamos nuestra mesa favorita la esquina, el mesero tomó nuestra orden y se fue.

Nora empezó con su interrogatorio a lo que me dispuse a contestarle.
Vi entrar tres chicas sonrientes, pero no podía verlas bien ya que estaba muy lejos y habían muchas personas en el lugar. A medida que se fueron acercando vi como se pararon de repente y como miraban a mi mesa y bingo era Callaghan y las chicas haciendo su entrada triunfal, noté un desdén de fastidio en su rostro, pero ha de ser ideas mías.
Se colocaron en su lugar y el mesero les tomó la orden luego se marchó.
Sus acompañantes hablaban entre sí, pero ella se veía fuera de sí, como si su mente estuviera en otro lugar. Minutos después vi que se levantó y se dirigió al baño, aproveché el momento y le dije a Nora que regresaba enseguida.

Cómo fui en busca de ella me percaté que en el baño no habían personas y entré al baño de chicas, cuando entré se estaba lavando el rostro, me coloqué detrás de ella, cuando miró al espejo un chillido salió de su boca, la había asustado mierda!

Que-que haces aquí?
—Mierda ¿ es que no puedes ser normal? me asustaste! sal de aquí, estás en el baño de chicas ¿es que no ves?

—Sí que estaba molesta!

—Hola Callaghan!
Je permanecía con el ceño fruncido.

—Bien Callaghan se dice ¡hola!

—noha moore sal de aquí o gritaré!

—bien entonces grita!

—Solo quiero hablarte y no gritaras!

¿Cuando me pagarás mi cita?

Ella permanecía en silencio

Puesto a esto me acerqué tanto que la vi temblar.

—no te debo ninguna cita y menos ahora Moore.

—menos ahora, ¿acaso estás celosa?

—celosa yo? Ni porque fuera algo tuyo y permiso debo irme.

Y se fue, dejándome babeando!

Que le pasa a esta chica un día se comporta bien y otro día vota fuego... Mujeres!

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