Dejo el plato ya vacío a un lado, en la pequeña butaca que está ubicada a un lado de la bañera en la que estoy. El agua me cubre por completo, hasta llegar a mi mentón, suelto un suspiro y me deslizo un poco más en la bañera hasta que el agua finalmente queda a la altura de mi boca, sin llegar a cubrir mi nariz.
Suelo hacer esto cada vez que voy a algún club de sexo con alguno de los integrantes de Bonten, aunque realmente no sé porque voy a esos lugares; literalmente lo único que hago es sentarme en uno de los sillones, observando a personas extrañas intentando ligar entre sí. No es que me ponga nerviosa, pero si me pone un poco inquieta...
Cierro mis ojos con fuerza y frunzo el ceño, sacudiendo ligeramente la cabeza al notar que estoy pensando de más.
Mhm.. Quizá cenar en la bañera no fue la mejor idea, pero siendo sincera, me importa un carajo.
Pasan varios minutos hasta que escucho como la puerta de mi habitación es abierta, seguido de un par de pequeños pasos adentrándose. Me incorporo un poco en la bañera, soltando un pequeño suspiro, levemente agotada. Miro el pequeño reloj que, por alguna extraña razón, está en la parte superior pared del baño.
17:23 (5:23 P.M.).
Vaya, esta vez llegó temprano...
Decido terminar de darme el baño para no dejar a esa persona sola en mi habitación por tanto tiempo. Viene a verme cada cierto tiempo, sería descortés dejarla sola, o eso supongo yo...
Cuando siento que mi cuerpo está lo suficientemente limpio, hablando del exterior o simplemente del físico, salgo de la bañera, poniéndome una toalla al rededor de mi cuerpo antes de abrir la puerta del baño, sin importarme que las gotas en mi cabello mojen el suelo con cada movimiento brusco que realizo.
Mi mirada recorre la habitación hasta que encuentra a aquella persona, mirando mis rollos de marihuana con curiosidad. Y justo cuando veo que aproxima su mano para tomar uno, decido intervenir.
—¿Qué estás haciendo, mocosa? —hablo frívola, haciendo que dé un pequeño respingo en su lugar.
Ella rápidamente se aleja de la mesita en donde yace la marihuana y me observa con un poco de nerviosismo, vergüenza, y quizá, culpa.
—¡N-no hacía nada! —se excusa, negando con sus manos mientras sus mejillas se teñían de un ligero color carmín.
—Mhm... —tarareo, saliendo por completo del baño antes de cerrar la puerta detrás mío— No debes tomar las cosas que no son tuyas porque nunca sabes cuando tomarás algo que no debes, ¿Tus papis no te lo han enseñado?
—Lo sé, pero... —juega con sus dedos, tal vez un poco nerviosa.
Ella hace una prolongada pausa y mientras espero a que complete su oración camino hacía la mesa y tomo uno de los rollos de marihuana, después tomo el encendedor que se encuentra en el primer cajón de mi cajonera; me acerco al balcón y tomo asiento en la silla que está frente a este, sin importarme que aún estoy en toalla y lo único que llevo bajo esta es una braga roja de encaje. Enciendo la esquina del rollo antes de llevar la otra esquina a mi boca, inhalando por un corto momento antes de soltar el humo de la marihuana que yacía en mis pulmones.
—¿Así que...? —la miro de soslayo con una ceja alzada, dándole otra calada al rollo entre mis dedos.
—A-ah.. Yo... —balbucea— Tengo curiosidad...
—La curiosidad mató al gato, ¿Sabías eso?
En sus mejillas se forma un pequeño puchero y eso me hace sonreír antes de inhalar nuevamente de la marihuana.
—¿Qué te da curiosidad?
—Tú... —murmura, yo giro mi cabeza para verla, alzando una de mis cejas en su dirección.
—¿Yo?
—Sí, tú me das curiosidad. —afirma, acercándose al balcón— ¿Por qué... Consumes eso? —sus ojos viajan a la rollo en mis manos y vuelven nuevamente a mí— Mi papá dice que es malo consumir drogas...
—Vaya, ¿Así que tu papi ya te habla de las drogas? —sonrío ligeramente con el rollo entre mis labios, ella asiente lentamente con la cabeza.
Sonrío aún más.
Mierda, sabía que ese idiota sería un gran padre...
—Tu papá tiene razón, esto es malo y, por lo general, no debe consumirse. —comento, mirando el rollo entre mis dedos con desinterés— Sin embargo... Aquí estoy, fumando marihuana... Y quién sabe que otras porquerías más han entrado en mi cuerpo.
—... ¿Por qué consumes eso?
—Porque... —hago una pausa, subiendo mi mano hasta uno de los colgantes en mis orejas. Su rostro cruza por mi cabeza y es inevitable para mí no sentir un sabor amargo en mi boca y una presión en mi pecho.
Le doy otra calada al rollo, siendo esta más extensa. Subo una de mis piernas a la silla y apoyo el brazo que sostiene la marihuana en la rodilla, dejo caer mi cabeza ligeramente hacía atrás.
—Porque... —cierro un poco mis ojos— Tengo que estar drogada para sacarlo de mi cabeza...
—¿Uh?
—Oye, mocosa.
—¡No soy una mocosa! —reprocha, cruzando sus brazos con un puchero— ¡Mi nombre es Emma!
Río un poco por su actitud. Se parece un poco a su madre en ese aspecto...
—Muy bien, Emma. —me corrijo, mirándola con una pequeña sonrisa— Te contaré mi historia y responderé a tus preguntas, pero sólo si prometes no tocar algún rollo, pastilla, líquido o cualquier otra sustancia de dudosa procedencia que halles en mi habitación.
—¡De acuerdo! ¡Lo prometo! —exclama rápidamente, tomando asiento en la silla frente a mí.
Su postura es recta, denotando atención en mis palabras, sin embargo, aunque quiera aparentar ser madura aún es sólo una niña.
—Bien, déjame contarte un poco sobre... Mi rey y yo.
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¿Historia de Izana? Joder, claro que sí.
Antes que nada, quiero aclarar algunas cosas:
-Historia inspirada en la canción: "Habits (Stay High) - Tove Lo".
-Contendrá escenas explícitas, lenguaje inapropiado, mención de drogas y alcoholismo, dependencia emocional, etc. (Si eres sensible a este tipo de temas se recomienda discreción o que, por favor, dejes de leer la historia para evitar comentarios innecesarios u ofensivos).
-Historia ambientada en el futuro de "Bonten".
-episodios cortos o largos, dependiendo de mi imaginación y tiempo.
-y por último, la historia será de pocos capítulos (cálculo unos 7 o 8).
Sólo eso, nos vemos en el primer capítulo de esta nueva historia.
<3
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→ ❝ 𝑆𝑡𝑎𝑦 𝐻𝑖𝑔𝒉... ❞ | кυяσкαωα ιzαηα χ ℓє¢тσяα.
Fanfiction𝑬𝒔 𝒖𝒏 𝒉𝒆𝒄𝒉𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝒑𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏𝒂𝒔 𝒄𝒂𝒎𝒃𝒊𝒂𝒏 𝒑𝒐𝒓 𝒄𝒐𝒔𝒂𝒔 𝒊𝒏𝒔𝒊𝒈𝒏𝒊𝒇𝒊𝒄𝒂𝒏𝒕𝒆𝒔. 𝑨𝒍𝒈𝒖𝒏𝒂𝒔 𝒄𝒂𝒎𝒃𝒊𝒂𝒏 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒃𝒊𝒆𝒏 𝒚 𝒐𝒕𝒓𝒂𝒔 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒎𝒂𝒍, 𝒂𝒖𝒏𝒒𝒖𝒆 𝒆𝒔𝒐 𝒅𝒆𝒑𝒆𝒏𝒅𝒆 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒑𝒆𝒓𝒔...