Lauren
- Ca.... Camila - gemí al sentir como chupaba mi miembro, si yo no me cansaba haciéndolo ella era peor, pero a quién miento, me encantaba que fuera así
- Sshhh - me dijo haciéndome reír
- ¿No estás cansada? Anoche lo hicimos por horas y ¡Aaahh! - Dios, está mujer me estaba matando - no pares Camila, por favor
- ¿Te gusta?
- Me encanta
Fue subiendo hasta llegar a mis labios y besarlos como a mí me encanta
- Toda tu eres delicioso - me dijo y besé la punta de su nariz
- Pues tú no te quedas atrás mi reina - mis manos acariciaban su piel - hoy te tengo una sorpresa
- ¿A mi? - me preguntó y asentí
Los padres de Camila por fin llegaban hoy al medio día, estoy tan nerviosa, al fin conoceré a las personas que crearon a esta hermosura de mujer
- Lauren
- ¿Eh?
- Te quedaste pensativa ¿estás bien? ¿te duele algo?
- Estoy bien cariño, es solo que estaba pensando en la sorpresa que tendrás hoy
- ¿Me puedes decir que es? - negué ante su puchero y me apretó la nariz provocando que riera
- Eres una agresiva - bromeé haciéndole lo mismo
- No me quieres decir - se quejó pegándome el brazo
- No puedes saberlo - le pegue suavemente el brazo
- Dime - me pegó suavemente la mejilla
- No - alcé la mano para golpearla y reí al verla cerrar los ojos
- Que pasa - preguntó al abrir los ojos
- Jamás te golpearía Camz - acaricie su mejilla y me besó
- Estábamos jugando lolo
- Si, pero yo tengo más fuerza que tú - besé su frente - y no te lastimaría Camz
- Tienes razón - se acostó en mi pecho quedándose dormida al instante
Sonreí al verla dormir tan plácidamente, besé su nariz y la arrope para después levantarme al ver que ya pronto serían a las once del día
Al terminar de ducharme sonreí al ver que Camz aún dormía, deje un beso más en su mejilla y uno más en su vientre, mis pequeños cada día iban creciendo un poco más y aquello me emocionaba, ya quería conocerlos
Bajé las escaleras y me encontré con mi madre hablando por teléfono, me despedí de ella con un beso en la mejilla pero me detuvo
- A dónde vas sin desayunar
- Mamá, los padres de Camila llegarán en media hora, no puedo, te encargó mucho a Camz
- Oh, tienes razón Lauren
- Nos vemos luego mamá - asintió, le di un beso y salí
Debía calmarme, no podía dejar que los padres de Camz me conocieran así de nerviosa, pero como, como no sentir nervios, eran los padres de Camila eran mis suegros y mi cuñada por Dios
Al llegar Lucy y vero estaban esperándome en la entrada del aeropuerto
- ¿Estás nerviosa? - rió verónica y caminamos
- Siento que me dará algo, no se, es algo que nunca me había pasado pero no es cualquier cosa chicas, son los padres de la mujer que amo, son mis suegros