Coristas; una imagen de belleza y delicadeza. Una mujer que cualquier hombre tendría la suerte de llevarse a casa. Alice Black es una mujer completamente diferente cuando se pone el maquillaje y el disfraz, pero es quien es cuando está fuera de luga...
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La mañana siguiente fue muy temprano para mí. Me desperté de la misma manera que cuando me habían drogado, excepto que no estaba tan atontada ni mareada porque no me habían golpeado en la cabeza. De hecho, me sentí... relajada y bien. Sonriendo, me puse unos jeans ajustados negros y un suéter antes de salir a desayunar. La única otra persona allí era Bárbara, una señora gorda que Elsa había traído recientemente de Miami. Excepto que, además de su peso, era bastante joven y bonita.
Jimmy estaba sentado en una silla fuera de la tienda, apilando todas las botellas que había bebido la noche anterior. En poco tiempo, Maggie se acercó a él y comenzaron a hablar. "¿Qué te pasa?" Jimmy habló lo suficientemente alto para que yo lo escuchara mientras se ponía de pie. "Suenas como un viejo maestro de escuela".
"¡Soy la chica que se enamoró de un líder!" Maggie gritó: "¡Un héroe, por el amor de Dios! ¿Dónde está?"
"¡Bueno, sorpresa!" gritó en respuesta. "¡No puedo simplemente tomar mis sentimientos y convertirlos en una bolita y meterlos dentro! ¡No soy el general Patton! ¡Cristo! ¿Es eso lo que quieres? Porque si ese es el caso, ¡entonces lárgate!"
Jimmy caminó bajo el dosel, tomó un trago y se sentó en una mesa cerca de mí. "Eso no es lo que yo dije." Maggie se acercó a él.
"No es lo que dijiste". Jimmy se burló mientras abría la botella de cerveza.
"Necesitas comer algo". Maggie se sentó y dijo: "Escúchame, Jimmy. No hiciste nada malo. Estás asumiendo que podrías haber salvado a tu madre, pero déjate llevar por la idea, bebé".
"No entiendes nada". Jimmy la miró. Maggie le quitó la botella de las manos pero él luchó con ella para recuperarla. "¡Dame!" dijo furioso. "¡No deberías preocuparte con personas como yo! Ve a tener tu hermosa vida con otra persona".
"Muy bien." Maggie comenzó a llorar. "Gracias por la claridad".
Jimmy se quedó quieto por un momento antes de caminar hacia Bárbara. "¿Sigues aquí?" preguntó.
Ella lo miró. "Lo hago".
Observé cómo Jimmy se arrodillaba, abrazaba a Bárbara y empezaba a sollozar. Parecía súper confundida mientras envolvía un brazo alrededor de él. Como me levanté tan temprano, decidí ayudar a preparar el desayuno ya que la pequeña cocina también estaba ubicada debajo del dosel. En mi camino, me incliné al lado de Bárbara rápidamente. "Está muy borracho en este momento". Le dije antes de continuar mi camino.
Aproximadamente media hora más tarde, después de que terminé de cocinar, me quedé junto a la estufa mientras observaba con asombro y disgusto cómo Jimmy le daba de comer a Barbara con una cuchara lo que parecía chocolate derretido. "Nunca he visto a nadie que le guste algo más que tú y la boca llena de comida". Jimmy sonrió mientras se sentaba a centímetros de Barbara. "Quiero volver a verlo".
"Oh, eres demasiado bueno conmigo, Jimmy". Bárbara se rió.
Caminando hacia donde Eve y Paul, que también estaban mirando la horrenda vista, me reí entre dientes. "Trabajo en un espectáculo de monstruos y eso es, con mucho, la cosa más perturbadora que he visto en mi vida".
