¿Are we still Friends? (Jacob black)

4 | Jacob

Olivia Spencer

Caminaba tranquilamente por la playa, me gusta estar despejada y tranquila por ahora.

Disfrutaba de la arena en mis pies, y me estoy muriendo de frío, pero bueno —¡Olivia! —veo quién me llama, y es Damián me sonríe mientras está apoyado en su moto.

Le devuelvo la sonrisa, me acerco hasta donde está —Vives cerca de aquí.

—Algo así, ya estaba de camino a mi casa, y bella —cuando pregunto por ella, él rueda sus ojos con fastidio.

—Con un tipo, medio raro y todo pálido —ambos reímos por lo que dice.

Pasa su mano por su cabello —A mi tío no le termina de caer bien él tipo, y ni a mí.

Observó su cara, y me fijo en su mandíbula —Esta buena la vista —
Me sonrojó por el comentario, y miro para otro lado.

—Lo siento —suelta una risa nasal.

—Ya está oscureciendo, te llevo me sentiría culpable si te pasa algo, porque te quite tiempo —observo como sube a la moto, me hace señas y dudo por un momento, pero al final termine subiendo.

—Toma —me pasa el casco, me lo pongo y arranca la moto, haciendo que me aferré a su torso.

—Esta bien que me dejes aquí —le digo en su oído.

—Gracias por traerme —le digo mientras bajo de su moto, él me mira con una sonrisa coqueta. Le pasó su casco.

—No es nada, ha se me olvida —lo miró confundida, y me entrega un papel —Es mi número de teléfono, adiós livi.

—Adiós Damián —se va, y me doy la vuelta para caminar hasta mi casa, mientras una pequeña sonrisa se empieza a formar por mi rostro.

—Olivia —escucho la voz de Jake, hace que me dé la vuelta aterrorizada y salga de mi momento de película.

—Hola —le doy una sonrisa algo nerviosa, no puedo disimular los nervios.

Me mira con la cejas fruncidas —¿Quién era él?

Río nerviosa mientras solo me dedico a a agarrar mi abrigo —De quién hablás —intento haceme la loca.

Se cruza de brazos y su expresión se vuelve molesta —Él de la Moto.

Me mira esperando una respuesta, está respirando más fuerte —Un amigo me tengo que ir, nos vemos mañana.

Me voy corriendo con una sonrisa, al pensar en Damián, cuando llego a la casa entró con una sonrisa —Hola a todos, sé que llegue tarde pero me distraje con algo.

Todos me miran confundidos, me voy hasta las escaleras dónde veo a Sam —Buenas noches Sam.

Subo las escaleras tarareando una canción, entró a mi cuarto y me hago la rutina que siempre hago antes de dormir, pero ahora es diferente porque estoy feliz.

Me despierto temprano, y me doy una ducha caliente salgo envuelta en mi toalla y busco que ponerme, quiero cambiar un poco los colores que me pongo, me busco una manga larga celeste y unos pantalones negros, cuando me veo en el espejo veo lo bien que me queda y me busco unos botines negros. Uy la verdad si me quedo lindo.

Tomo una chamarra de cuero, y mi mochila cuando estoy por salir decido soltarme el cabello y agarró un brillo de labios y lo guardo en unos de mis bolsillos.

Bajo las escaleras y para mí suerte está toda la manada, Paul y Jared me miran sorprendidos, —Te ves muy linda liv —me dice emily.

—Gracias —le agradezco con una sonrisa, y como mi desayuno tranquila. Sam llega y me ve con una mirada sospechosa —Sam, quería pedirte permiso para salir hoy.

—Esta bien, te doy permiso ¿con quién irás? —le sonrió algo nerviosa.

—Con él sobrino de Charlie —asiente, le gusta la idea porque él dice que debo de ser un poco más sociable.

Se acerca a mi con una sonrisa —Me gusta verte feliz —sonrío y me parece un tierno momento para recordar.

Embry y Quil, me miran con una sonrisa —Te ves muy bonita, como siempre.

Embry le da un codazo a Quil —Sí, Embry tiene razón te ves hermosa.

Jacob se acerca con una mirada sería y con un rostro de claro disgusto —Te cambiaste solo por qué ahora sales con ese tipo.

Ruedo los ojos con fastidio, Jacob puede ser muy idiota cuando se lo propone —Lo hice porque yo quiero, quiero verme bonita para mí misma. No para un hombre.

Me voy dejándolo sólo, a veces suele ser algo intenso con lo que dice. Las clases pasan rápido y ya estoy afuera.

—¿No va a venir Sam? —me preguntan los tres al mismo tiempo.

—No.

Me alejo un poco y llamo a Damián, —¿Hola?

—Hola, Damián te preguntaba si querías venir a la push conmigo—escucho su risa.

—Eres un maldito angel, justo el tipo pálido me invitó a mi y a bella a su casa.

—¿Puedes venir a recogerme?, Estoy en el colegio de la reserva.

—Claro, ya voy.

Vuelvo dónde los chicos —Me van a recojer.

Se quedan conmigo y unos minutos después aparece Damián —Bueno chicos, gracias por esperar conmigo.

Le doy un beso en la mejilla a cada uno, Jacob se mantiene serio. Voy hasta Damián me pasa el casco y me subo en la moto. Damián tiene una sonrisa triunfadora, arranca la moto y mientras estamos en la carretera lo notó algo callado —¿Qué pasa? si te preocupa bella podemos ir.

—No te molestaría.

Sonrió un poco —No, vamos.

Ahora vamos a la casa del ¿novio? De Bella.