¡Hola! Les quiero contar una anécdota que me pasó. Para que se rían un poco de la torpeza de su escritora e.e
Yo escribo mis historias en mi laptop, como escribo 4 al mismo tiempo, chateo, uso Twitter & Facebook, pues es notorio que tecleo demasiado. Así que le dije a mi papá que si me podía comprar un teclado, para que no se me llegue a joder el de mi laptop. Me compró un teclado que se conecta mediante un puerto USB. Como el teclado es diferente, al principio se me dificultó escribir sin mirar el teclado, escribía puras idioteces e.e, pero bueno, la practica hace al maestro. Así que comencé a practicar con mi nuevo teclado. Ahora ya me acostumbré y no se me dificulta tanto.
Una noche escuché un ruido en la cocina. Como me daba tanta flojera bajar decidí ignorarlo. El sonido no volvió a escucharse, sin embargo o ya no podía dormir. Eran las 4 de la mañana, así que en lugar de perder el tiempo viendo el techo oscuro de mi cuarto, decidí escribir un poco, porque me dio un gran ataque de inspiración que no podía dejar pasar, conociendo a mi cerebro lo más probable es que lo olvidara por la mañana. Así que comencé a teclear con los ojos cerrados.
He allí otra curiosidad mía, cuando escribo siempre lo hago con los ojos cerrados, porque me visualizo todo en mi mente, ya después corrijo mis errores ortográficos que no son tantos.
El punto es que estuve un buen rato tecleando, sentí que mis dedos ya gritaban ayuda e imploraban piedad. Así que abrí los ojos y lo primero que vi fue la hora, eran las 6 de la mañana, es decir, estuve 2 horas tecleando con los ojos cerrados, casi creo que dormida y que todo era un sueño. Me sentí bien y mal, mal porque me faltarían horas de sueño ; y bien, porque al fin le había avanzado bastante tiempo a mi historia Soy una Chica 2.
Después de dejar de pensar eso miré lo que tenía escrito en Word, al principio miré la pantalla frunciendo el seño, se me hacia raro que no apareciera nada de lo que ya había escrito, de hecho el archivo estaba tal cual como yo lo había abierto. Me asuste mucho y el coraje me invadió, pero trate de controlarme. Decidí revisar bien y lo hice… tal como me lo temía… había tecleado en vano, porque nada de lo que escribía estaba en mi hoja de Word. A mi mente se le vino la razón que tal vez estaba todo más abajo o que había escrito en otra parte. En lugar de usar el espacio táctil que funciona como mouse en mi laptop, decidí bajar con las flechas de mi teclado… allí es donde descubrí cuál fue el maldito problema…
Si, había tecleado todo, no fue un sueño, claro que no, de verdad estaba despierta escribiendo cosas graciosas de nuestro amor platónico Harry. Desvié mi mirada al puerto USB de mi teclado… ¡NO ESTABA CONECTADO! Si antes ya estaba encabronada ahora lo estaba y muchísimo más. Había escrito y lastimado a mis pobres dedos en vano. Como estaba tan furiosa decidí cerrar la laptop de golpe y acostarme un rato antes de despertarme para ir a la universidad (estoy en clases en la tarde, es decir, entro a la 1 del mediodía, pero mis padres no me dejan que siga dormida hasta las 10). Sabía que si me disponía de escribir todo de nuevo no me saldría bien, porque estaba de mal humor y seguramente escribiría varios capítulos en los que Taylor mata a Tim o a Joseph de una manera sádica y explicita. Por lo tanto, fui a la universidad y regresé, esta vez a estaba de humor, así que volví a escribir todo con una de mis canciones favoritas (He could be the one – Miley Cyrus/ Hannah Montana) esta vez me cercioré de estar viendo la pantalla de vez en cuando y que el teclado estuviera conectado.
Cuando terminé de escribir me di cuenta que había teclado más de 100 hojas… así es, luego me sentí mal… bueno, más bien con coraje, eso quería decir que en la madrugada había escrito 100 hojas en vano, 100 hojas que fueron perdidas.
Eso me hizo recordar algo que me pasó en vacaciones mientras escribía esta misma historia. Pasó que se descargó mi laptop y se apagó, cuando la prendí me di cuenta que no me guardo el archivo, lo cual se me hizo raro, porque casi siempre me lo guarda en ese tipo de situaciones como un “Autoguardado” resulto que perdí alrededor de 60 y tantas hojas, ya se imaginaran el coraje que me dio, y eso no es todo, también había perdido unas correcciones que tenia. Tuve que corregir y volver a escribir de nuevo. Eso me llenó de coraje, detesto que estas cosas me pasen, más porque me gustaría que al menos pasara cuando escribo unas 20 hojas, pero al parecer mi mala suerte es muy poderosa -.-
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Soy una Chica 2
HumorEsta es la segunda parte de “Soy una Chica” esta vez ya son las vacaciones y al fin, Taylor podrá asistir al Campamento Policíaco, esperando tener sus vacaciones soñadas, llenas de acción y emoción. Se siente mal porque Harry no estaría con ella, pe...