día 6: gime para mí. (!)

4.9K 418 177
                                    

Cuando Chan entró a su celda, sus ojos fueron unos segundos a Felix antes de desviar la mirada rápidamente y sentarse en su futón

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cuando Chan entró a su celda, sus ojos fueron unos segundos a Felix antes de desviar la mirada rápidamente y sentarse en su futón. Él estaba golpeado, su rostro tenía algunos moretones junto a un rasguño en el puente de su nariz y otro debajo de su labio inferior. Como castigo por armar una pelea en el recreo que les daban, lo habían encerrado en una celda más pequeña que la suya y antes de llevarlo a su lugar le dieron una ducha de agua helada en pleno otoño, sabiendo que estaban a días de comenzar el invierno, luego lo habían golpeado y habían intentado hacer un tipo de tortura de la cual Bang se había burlado todo el tiempo. Eso que ellos habían hecho, no era nada. Había aguantado muchas torturas e interrogaciones y la que siempre más recordaría iba a ser la vez que los rusos lo estuvieron torturando durante cinco días seguidos para sacarle información acerca de un ex jefe que Bang tenía. Él no se doblegaba y los oficiales nuevos pronto encontrarían su propia suela de zapato.

Felix preocupado se acercó a él e intentó tocarlo, pero Bang sacó su mano con un pequeño golpe. El menor lo miró confundido y sus ojos algo desorbitados, no podía entender bien qué sucedía y por qué Bang había llegado a la celda de esa forma.

-Estoy bien-Murmuró bajo, pero la mueca de dolor en sus labios le hicieron saber a Felix que no era tan así-. Esos hijos de puta creo que me rompieron una costilla-Soltó una risa sin gracia-. ¿Alguien te molestó?

-No, Jisung y Hyunjin estuvieron un rato por acá cuando te llevaron. ¿Seguro estás bien? ¿No sería bueno que fueras a la enfermería? ¿Tienen enfermería acá?

-No-Dijo negando con su cabeza. Su cabello largo y cayendo en ondas moviéndose cada vez que movía su cabeza-. La última enfermera renunció cuando un idiota quiso pasarse de listo con ella. Sé que están buscando a alguien nuevo, pero no sé si lo encontrarán. No muchos quieren trabajar en lugares como estos, menos aún sabiendo la clase de basuras que somos-Encogió sus hombros aunque eso le causaba dolor. Hacía frío y la ducha que le habían dado gratuitamente le había causado dolor en el cuerpo entero.

- ¿En verdad estás bien?-Preguntó. La preocupación se desbordaba de su tono de voz mientras lo miraba. Bang lo comparó con un pequeño cachorro asustado y perdido en un lugar no conocía para nada.

-Ayúdame-Le dijo, haciéndole una seña con su mano. No podía sacar la parte de arriba del uniforme por sí solo porque cada mínimo movimiento que hacía le dolía.

Felix se acercó lento y suave, desabrochó los primeros botones y siguió con los últimos, sus ojos se cruzaron en el momento que colocó sus manos en el cuello de la camisa y la comenzó a sacar despacio. Felix sabía que la oscuridad que consumía los orbes de Bang era por algo y el nombre que había soltado la tarde anterior había dejado una gran incertidumbre sin saber muy bien cómo responderla. Jisung le había dicho que no le prestara mucha atención y que tampoco pusiera presión en Chan porque él no era de responder nada ni contar de su vida, ni siquiera a él que lo conocía de hace tiempo.

60 días preso › chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora