Nuestro hijo - Supercorp.

Charla con la suegra ¿o era una amenaza?

Habían desayunado juntos. Lena intento pedir a domicilio, pero Sam y James insistieron en cocinar.

Las Danvers le echaban miradas asesinas al Olsen de vez en cuando, debido a su cercanía y la facilidad con la que hacía reír a Lena y Sam, incluso a Ruby.

Ahora Lena cargaba a su hijo, lo que hacía que Kara no se perdiera ni uno solo de sus movimientos. La chica tenía al bebé en brazos, con su pequeña cabecita recostada sobre el hombro de su madre, mientras esta lo sostenía con cariño.

Hoy usaba ropa casual, un jeans azul y una blusa del mismo color, acompañado de botines de cuero negros. El cabello suelto perfectamente peinado. Maquillaje ligero.

La miraba de forma intensa, recorría cada centímetro de su cuerpo con la mirada una y otra vez.

Lena sintió la mirada, cómo no, si parecía que quisiera atravesarle el alma, sus mejillas se calentaron cuando la miró de reojo y la vio morderse el labio.

"¿Cómo hace eso? Tengo un bebé, podría dejarlo caer de la impresión" se quejó en su mente "¿y si James tiene razón y hay esperanzas con Kara?"

Kara miró al piso cuando sintió su cuerpo caliente.

"¿Hace calor?" Se preguntó "Ah, que tonta, si no siento los cambios de temperatura. ¿Entonces porqué siento tanta calor?"

¿Por mirar a Lena? Nahhh, Lena es solo su amiga. ¿Cierto? ¡¡¿cierto?!!

Su pelea mental fue interrumpida cuando su teléfono sonó. Lo tomó frunciendo el ceño al ver el número desconocido.

- ¿Hola? - abrió la llamada.

- ¿Kara Danvers? - preguntó la otra persona.

- Sí, soy yo - contestó.

Lena la miró confundida al verla alejarse para hablar. Habló unos segundos con la persona del otro lado del teléfono y luego colgó. Soltó un suspiró y regreso.

- ¿Todo bien? - preguntó. Kara asintió mientas tomaba su abrigo y su bolso.

- Sí, solo recordé que tengo cosas que hacer. Debo irme.

- Kara, no puedes irte - se quejó Sam - Vamos a elegir las cosas de la boda.

- Lo siento, debo irme ahora.

- ¿Pasa algo malo? - preguntó Alex.

- No, no. Esta todo bien, debo ir a... - se lo penso - Vendré en unas horas y ayudaré, si aún falta algo.

- Déjala irse, Sam - le dijo James - Kara tiene cosas que hacer y podemos elegir nosotros las flores y esas cosas ¿cierto, Lena? - paso su brazo por los hombros de la nombrada.

- Sí, supongo. Igual esta boda es falsa, no es importante - James le metió un discreto peñizcon - ¡Ay! - lo miró.

El moreno sonrió.

- Te ves muy bonita ¿Cómo le haces? - preguntó coqueto.

- Me baño diario - Lena se burló.

- Sí, bueno, me voy - Kara los interrumpió.

- Iré contigo, debo regresar al trabajo - le dijo su hermana. Kara asintió y después de despedirse ambas Danvers se fueron.

- Luego no se quejen de la fiesta - les gritó Sam antes de que salieran.

---

- ¿Qué necesita de mi, señora? - preguntó en cuanto la tuvo enfrente.

- Quiero que renuncies a mi nieto - soltó Lilian muy segura.

- ¿Qué? No.

- Hazlo o no respondo de mi.

- No le tengo miedo, señora. Liam es mi hijo también y tengo todo el derecho y la obligación de ser parte de su vida y haré lo que tenga que hacer por él.

- Por favor, sabemos que no querías mezclar tus genes con los de mi familia. Es más fácil si finges que él no existe y ya.

- Eso no pasará, señora. Nunca, escúcheme bien, nunca me va a alejar de mi hijo ¿entendió? Es mejor que lo entienda ahora que ya somos familia - le sonrió - Ahora, tengo cosas más importantes que hacer que hablar con usted. Con permiso.

- Si lastimas a mi hija, te mataré, si le rompes el corazón de nuevo, te mataré, si rompes la promesa que me estás haciendo de cuidar de ese niño, te mataré ¿entendiste?

La miró. Al final, Lilian solo era una madre preocupada por su nieto e hija.

- Entendí. Escuché, señora. Lena es mi mejor amiga y jamás la lastimaria a propósito y ahora compartimos un hijo, así que su lugar en mi vida y mi corazón es mucho más grande que antes. Los voy a cuidar y a proteger, lo prometo. Buenas tardes.

Lilian la miró irse y sonrió.

---

《¿Podemos vernos?》

Había leído tantas veces ese mensaje que casi lo tenía tatuado ya.

No podía dejar de pensar en ella, lo admitía. 

Samantha era una mujer increíble y le fue imposible enamorarse de ella cuando la conoció. Al principio creyo que solo buscaba un reemplazo para Maggie, pero no. Sam no era para nada Maggie. Ella se había ganado un espacio en su corazón a pulso y lo peor, es que ni siquiera lo había intentado.

Cuando le confesó sus sentimientos, Sam le correspondió enseguida y pasaron una gran noche juntas, pero unos días después, ella se fue. Se despidió y se fue. Eso le rompio el corazón.

Y ahora que volvió, no sabía que pensar al respecto. La quería, sí, pero tenía tanto miedo de que le rompiera el corazón de nuevo.

¿Sam y Alex? Obvio.
¿Lilian una buena madre? Sí.
JQJSJSJS
Veremos cómo avanzan esas dos.

XOXO 💞