Capítulo 1

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𝓙𝓾𝓵𝓲𝓮𝓽

Abrí mis ojos completamente disgustada con el calor de México

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Abrí mis ojos completamente disgustada con el calor de México. Mi cuerpo estaba algo sudado debido a que, la noche anterior, se encontraba bajo la misma temperatura.

Despegarme de las sábanas me había costado muchísimo más de lo normal. Me puse de pie y caminé hacia la ducha en donde, abrí el agua fría para poder terminar de despertarme.

Al salir, busqué en mi cajonera un vestido que fuese apropiado para el clima de hoy, al encontrarlo, me lo coloqué. Luego me dispuse a desayunar mi avena con frutas y yogurt.

Elegí un punto para fijar mi mirada en él, como todas las mañanas. En ese momento, comencé a repasar todas las actividades que tendría que hacer.

—Oye. —protesté al ver que Langostino metía su hocico en el paquete de avena. Decidí darle un poco y guardar la bolsa.

En cuanto vi la hora en el pequeño reloj de pared, me puse de pie y salí del lugar.

Se trataba de una pequeña casita color blanca viejo que quedaba cerca de la playa y, de vez en cuando, podías oír las olas. Eso me agradaba. Yo misma la había elegido el día en que había llegado con mi padre.

Supe que era perfecta al ver lo diminuta que era, sería suficiente para Langostino y para mí.

Constaba de dos habitaciones. Al entrar había un pequeño descanso en donde había colocado una mesita de madera, solía dejar las llaves y mis zapatos allí al llegar; luego seguían la gran sala. Del lado derecho se encontraba la cocina, tenía una nevera con congelador, un horno y una mesada cuyo tamaño era perfecto para cocinar. Frente a todo esto electrodomésticos se encontraba una mesa con cuatro sillas de madera. A la izquierda había un pequeño sofá que daba a un televisor colgado en la pared. El pasillo de las habitaciones era corto, había una puerta del lado izquierdo, la del baño y, a la derecha otras dos. Una era mi habitación y en la otra guardaba mis utensilios de pastelería.

Además, tenía un pequeño jardín trasero en donde había plantado varias flores, disfrutaba cuidándolas, más en verano.

—Mierda. —tomé mis tenis blancos que se encontraban en la entrada y me los puse— Adiós, Langostino. —deposité un beso en su pequeña cabecita, este maulló.

𝒥𝓊𝓁𝒾𝑒𝓉 + 𝒥𝒥 | 𝐎𝐮𝐭𝐞𝐫 𝐁𝐚𝐧𝐤𝐬; 𝐉𝐉 𝐌𝐚𝐲𝐛𝐚𝐧𝐤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora