Llego a mi casa después de planearlo todo con Catalina. Cómo siempre, mi "madre" no está. La verdad es que ese debe ser uno de los motivos por el cual mis "padres" están teniendo problemas maritales. Ella llega todos los días casi de madrugada y se va muy temprano a su trabajo. Ese es un punto a mi favor ya que Carlos debe de estar renegado sexualmente hablando.
No sé porqué me adoptaron de verdad.. Ella es súper fría conmigo y a él una vez lo escuché reclamándole el porqué de adoptar a una niña tan grande. Eso sucedió a la semana que llegué. La verdad es que no me importa, mi vida en ese orfanato antes de llegar aquí era una pesadilla. No es que él me tratara mal, pero nunca ví "amor de padre" en sus ojos. Ojo, nunca me ha faltado nada para poder vivir cómodamente. Pero supongo que es por eso que tengo todas mis fantasías con él como protagonista.
Subí rápidamente las escaleras directo a mi habitación. De seguro él debe estar en su oficina.
Me tomo una ducha, no sin su respectiva masturbación. Obviamente pensando en mi querido "padre".
Ahhhhh Carloss... Ahhh ...Eso estuvo bueno....
Me visto con un short diminuto y un polo de tiras. Voy hacia la cocina por algo de cenar. También le prepararé la cena a él. Empezaré por ahí. Dándole placer a su estómago jaja.
Él no ha salido de su oficina aún. Pero estoy segura que está ahí, la luz que se asoma por la puerta me lo confirma. Voy para allá.
Le tocó la puerta. Y escucho un "pase". Uff que voz tan varonil y sexi.
Entro y veo que se me queda viendo. Lo dejo hacer mientras me fijo en sus rasgos faciales. Castaño de ojos verdes, con una pequeña barba. Me encantaría sentir esa barbita en mis muslos.
-. Papá, la cena está servida. ¿Vamos a comer?.- Se lo digo con una sonrisa un tanto sexi.
Veo que traga grueso y asiente con la cabeza.
-. Claro Mía, gracias.- No me quita la mirada de encima y yo no quiero que lo haga. Me fascina cómo me mira.
-. No tienes nada que agradecer PAPÁ. Me gusta consentirte. Además, tengo mucha hambre. Y ni modo de preparar solo para una persona no?!.
-. Jaja claro.. Yo no te he criado egoísta.
-. Exacto.- Se lo digo un tanto coqueta.
Camino con él detrás de mi y puedo sentir su mirada sobre mi. Apuesto que si volteo, observaré sus ojos puestos en mi trasero.
-. Sientate porfavor, voy a servirte.
Me muevo con destreza por la cocina. Y puedo ver de reojo como él sigue mis movimientos.
Jaja ya veo que yo no le doy indiferente.
Eso me ayudará más para lo que estoy planeando hacer...
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Directo al infierno
RomanceCarlos y Mia, un amor prohibido. Al principio es solo un juego que comienza cuando ella seduce a su padre adoptivo pero que terminará en tragedia cuando una bomba les explote en la cara.