Dónde Joaquín lucha por ser el único amor de Emilio.
Adaptación Autorizada
Todos los créditos son de la autora original @_imalioness. Gracias por darme el permiso de adaptar tu hermosa fic.
Los créditos de la portada y separador son de mi amiga @EM...
Sus ojos brillan y en su rostro se forma una sonrisa de oreja a oreja.
- Emi ven aquí... - Lo llama Germán, él lo mira y luego me mira a mí.
- Luego hablamos... - Le digo, me giro y camino hacía la puerta del gimnasio, salgo de ahí y camino por los pasillos de la preparatoria, hasta salir al estacionamiento. Le dije que sí.
¡¿Porqué carajos le dije que sí?! ¿Porqué? Joder, soy un idiota.
Subo a mi auto, me pongo el cinturón y enciendo la radio, mi celular vibra. Un mensaje de un número desconocido, lo abro.
"Vé a mi apartamento, llego en 45min, la llave está debajo de una planta junto a la puerta. – Exx"
Lamo mis labios y leo el mensaje unas 2 veces más. Pongo en marcha mi auto, en dirección a su apartamento.
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Abro la puerta y entro, dejo la llave en la mesita de centro y me siento en el sofá. Ugh, me levanto, camino a ver si encuentro la cocina, qué bonita, me acerco al frízer, abro una de las puertas, cojo una coca y cierro la puerta, regreso a la sala y busco el mando de la televisión, la prendo...Tengo ganas de husmear por todo el lugar, pero eso sería mal educado.
¿Pero tener sexo con un hombre que tiene novio ya es mal educado, no?
Me levanto y empiezo a caminar por dónde creo que está su habitación, abro una puerta y es un estudio, uhm, la cierro y camino hasta una puerta al final del pasillo, la abro y sí, es su habitación.
Más negro y blanco. Ugh, ¿es que no le gustan otros colores?
Entro, su cama es gigante, me siento en ella y abro el cajón del buró de al lado, hay unos libros, libretas, goma de mascar y un boli.
¿No debería haber condones y lubricante? Mierda, estoy sentado dónde ha cogido con Germán. Qué asco, joder, me levanto de un salto de la cama y me acerco a una repisa que está llena de fotos, más fotos de su familia, pero ninguna de Germán, hay dibujos y cartitas, que seguro le han hecho sus hermanitas. Tomo una entre mis manos y la abro. "Para nuestro Cholito xx", un dibujo de lo que supongo que es él y 2 niñitas de la mano.
Que ternura. Lo dejo dónde estaba y camino hacía el otro buró al otro lado de la cama, abro el cajón, hay una cargador, libretas, un lápiz y unos audífonos. Camino hasta dónde es su armario y lo abro. Cuántas Vans. Sonrío y niego con la cabeza, un tiempo tuve mi pequeña obsesión por las Converse, pero ahora sólo uso botines.
- Y yo buscándote en la sala... - Oigo su voz, doy un respingo y me giro, lo miro y siento cómo me arden hasta las orejas.
- Lo siento...yo...yo...
- No importa, no hay nada interesante en mi armario, ya salí de ahí hace mucho. – Me dice y se ríe. – Vamos a la sala de star, ¿Ó prefieres estar aquí?
- No, no, vamos. – Susurro, cierro las puertas del armario y camino tras él, me sede el paso y camino delante suyo. Nos sentamos en el sofá y él me mira sonriendo.
- Hablemos... - Le digo, arquea una ceja.
- ¿De qué?
- Me has dicho que quería que habláramos...
- No, tú dijiste, luego hablamos y por eso te mandé el mensaje...
- Si, por eso, ¿de qué quieres hablar?
- Sólo era una excusa para que vengas a mi apartamento, ¿Ó querías que te mande vé a mi departamento y espérame con las piernas abiertas? – Me pregunta y ríe, arqueo una ceja.
- Pues eso sería cómo eres en realidad, ¿no? una persona sin escrúpulos, ni vergüenza.
- ¿Cómo dices?
- Nada, ¿quieres que cojamos en la misma cama dónde de seguro Germán y tú también lo hacen? Sí, estoy loco por aceptar ser tu puta, pero yo no voy a tener relaciones contigo dónde lo has hecho con Germán. – Le digo y me levanto del sofá.
- Hey, ¿vas a escapar de nuevo? – Me dice, cuándo empiezo a caminar.
- No, no voy a escapar, voy por otra soda. – Le gruño y me libero de su agarre.
- ¿Joaquín, qué pasa? ¿Vas a estar arisco conmigo siempre? Pensé que ya se te había pasado el enojo...
- No entiendes, ¿cierto?
- ¿Qué, amor, que no entiendo? – Me pregunta y toma mi cara entre sus manos.
- Yo...yo te quiero. – Le digo y cierro los ojos, siento las lágrimas calientes correr por mis mejillas y luego sus labios limpiándolas.
- También te quiero. – Me dice al oído y mi cuerpo tiembla.
- No lo digas por decir...
- Soy muy sincero en todo lo que digo Joaquín, te quiero, me gustas mucho y estoy muy feliz de que hayas aceptado. – Me dice y une sus labios a los míos en un suave beso.
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