La reconciliación

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Me despierto a dolorida y con mucho frío. Me doy cuenta de que sigo en el mismo lugar y atada solo que en este caso la puerta está abierta, aprovecho eso para ir gateando hacia ella y veo qué hay una persona recargada en la puerta.

—Mierda.—muevo mi cabeza hacia arriba y veo a Asher con una sonrisa sexi y vestido de negro.

—¿Intentando escapar?—pregunta bromeando.

—Me siento mal.— trato de pararme pero me caigo.—Ayúdame por favor.

Me siento enferma y tengo mucho frío empiezo a temblar. Asher se agacha hasta quedar a mi altura y me toma del mentón.

—¿Aprendiste la lección amor?— lo odio de verdad lo odio. ¿Como se atreve a preguntarme eso ahorita?

—Te necesito.—le digo mientras trato de acercar nuestros labios.—Perdóname no debí patearte.

<Estupida> todo lo que tienes que hacer para persuadirlo.
Lo beso de manera lenta.
Asher me toma de la cintura y me carga. Enredo mis piernas alrededor de su cuerpo y pongo mis brazos alrededor de su cuello. Asher empieza a besarme con desesperación y trato de seguirle el beso de la misma manera. Me asusto cuando siento sus manos en mis glúteos y los empieza a apretar. Mi espalda choca con la pared pero a él no parece importarle.

—Ash.... Asher.—trato de alejarlo para poder respirar pero él no me deja. Le muerdo el labio para ver si se aleja pero pasa todo lo contrario.

—Eres una chica traviesa amor.—en el momento que separa nuestros labios empiezo a respirar mejor.

Cuando veo que tiene la intención de seguirme besando lo tomo de los bíceps. Y hago mi cabeza hacia tras para tomar aire.

—Por favor no me siento del todo bien.—Asher me suelta de golpe como si hubiera recapacitado.

—Vale.—me dice y luego me carga como si nada.

Nos dirigimos a una puerta que parece ser un baño. Cuando entramos Asher cierra la puerta y me pone enfrente del lavabo. Veo un espejo enfrente y veo que estoy toda sucia miro mi cara y me arrepiento.

<Estoy horrible>

Empiezo a sentir pena pero luego recuerdo que Asher es mi acosador y es el chico que me secuestró. Asher se pone atrás de mi y empieza acariciar mi abdomen para luego subir mi blusa de forma lenta. Asher pasa mi blusa por mis pechos para quitármela y en eso mis tetas rebotan. Volteo hacia el espejo y veo que Asher las ve. Se acerca demasiado haciendo que su bulto esté en mi espalda baja. Hago mi cabeza hacia atrás y la recargo en sus pectorales, Asher toma una de mis tetas con una mano y luego toma la otra de la misma manera.

—¿Son reales?—me pregunta de manera seria.

Asiento y luego tomo su cara para acariciarlo, en un movimiento rápido siento que ya no tengo mi sujetador y cuando veo al espejo aparece Asher tomando mis tetas con sus grandes manos.

Mis tetas quedaron desnudas y Asher no dudo en tomarlas y empezar apretarlas. Empieza a besarme el cuello de manera lenta y luego siento como un dolor u cuando miro el reflejo veo a Ash haciéndome un chupeton.

—Eres preciosa cariño.—me dice mientras estruja mis tetas.

Levanto mi tracero y eso parece excitar a Asher porque mueve su pene y lo pega completamente a mi culo.

—No aguantó más.—me dice y luego me baja el short junto con mis bragas.

Quedó totalmente desnuda ante él y lo miro perpleja por el espejo. Asher me voltea y me carga para que quede arriba del lavabo. Me besa con mucha pasión y luego empieza a tocar mis piernas y muslos con desesperación. Veo como Asher se quita la camisa dejando al descubiertos sus increíbles abdominales. Empiezo acariciar sus pectorales los cuales están fuertes y abdominales mientras él me acaricia mis pezones. Gimo por lo bien que se sienten sus caricias.

—Amo tus gemidos.—me susurra y se acerca a mi para besarme pero yo retrocedo y pego mi espalda al espejo.

—Ash tenemos que ducharnos.—le digo en una súplica.

Escucho como Asher maldice y aprovecho eso para bajarme del lavabo y justo cuando voy a llegar a la ducha Asher me toma de las caderas y las junta a su pene.

—No me esperaste amor.—me dice y yo solo me meto en la regadera y empiezo a ducharme junto a él.

—Te castigaré por esto cariño.—me volteo y enredos mis piernas alrededor de él. El toma mis glúteos y me carga.

Nos pegamos a la pared y nos besamos de manera fuerte. Lo tomo de la cara con <cariño> un momento ¿acaso lo estoy agarrando con cariño? Me doy cuenta de que si.

—Te deseó.—le digo en un gemido cuando siento su pene cercas de mi intimidad.

—Yo también amor.—me dice y mete uno de sus dedos en mi cavidad.

Me dice en la cara y luego se vuelve a fundir en mi. Seguimos en la ducha y a los dos nos empieza a caer agua lo cual es increíble ya que nunca había echo algo así con alguien.

—¿Si me porto bien prometes dejarme seguir con mi vida?—le digo en un gemido. El me toma de la cintura y me besa con mucha pasión, le sigo el ritmo poniendo mis brazos alrededor de su cuello.

—Mientras que yo esté en ella si.—me contesta para luego tomar mi culo.—Amo todo de ti.

Bien entonces ya se lo que tengo que hacer.

Atrapada por elDonde viven las historias. Descúbrelo ahora