Atrapada por el

Lo senti

Pov Lila:
Me despierto algo mareada y cuando me levanto de la cama noto que se cae algo pero no le doy mucha importancia. Me adentro en el baño y me baño. Salgo del baño descalza y en eso recibo un mensaje.

Desconocido:
Te sienta bien esa bata.

Se me cae el celular y empiezo a ver a todos lados <nada> nadie me está mirando pero eso no me deja tranquila así que cierro las cortinas y ventanas.

Cuando me dirijo a mi cama piso algo y siento como si me hubiera encajado una espina. Cuando veo lo que pise me encuentro con una rosa y una que otra espina.

La tomo con cuidado y me dirijo a la cocina para tirarla a la basura. Me regreso a mi cuarto y reviso mi pie para ver si tengo sangre y efectivamente tengo una espina. Me la quito y limpio mi herida.

Me pongo un short corto y una blusa escotada de manga larga negra que deja al descubierto mi abdomen plano. Termino de ponerme unos tenis y me recojo el cabello.

Salgo de mi habitación y voy a la sala. Noto qué hay una rosa arriba del sillón. Volteo hacia todos lados y nada no hay nadie.

—Tranquila de seguro te la dejo Brandon.—me digo para tranquilizarme y voy a la cocina para tirarla pero me doy cuenta que la puerta de mi cocina está abierta.

—¿Hay alguien ahí?—cierro la puerta con seguro y me voy a mi habitación. Le cierro con seguro y llamo a mi amiga Kayle.

—Kayle.....

—Si Lila.

—Te necesito por favor necesito que vengas tengo que contarte algo.

—Voy para ya pero más te vale que sea importante.—me cuelga.

Tiempo después:
Tocan el timbre y por inercia tomo un cuchillo de mi cajón. Abro la puerta y veo a mi amiga que está con su celular en las manos. Escondo el cuchillo detrás de mi y dejo que mi amiga pase.

—¿Y bien que necesitas?—dejo el cuchillo en el cajón y me dirijo a mi sala.

—Siéntate.—mi amiga obedece y se sienta.

—¿Y bien?—respiro con calma para poder decirle.

—El estuvo aquí Kayle.—lo digo directa.

—Y como lo sabes.

—Yo.... yo lo sentí no sé cómo y cuando desperté confirmé que así fue pues tenía una rosa entre mis pechos y la tire.—me paró y me dirijo a la cocina.

—Ven ven acércate.—mi amiga se acerca y yo aprovecho para abrir el bote de basura.—Ahí está la rosa.

Mi amiga se ríe y yo la miro con cara de pocos amigos.

—Pero no hay nada.—se ríe de nuevo.

—Como que no si ahí está.—cuando volteo hacia al bote la rosa ya no se encuentra.—No lo entiendo si ahí estaba.

—Claro lo que tú digas.

Me voy de nuevo a la sala y me acuerdo.

—La rosa la rosa que.....—me voy a mi habitación para ver si no hay algo más.

—El él estuvo aquí lo sentí.—dijo afirmando.—Por eso no estaba en la basura.—afirmó.

—Ok procede.—veo que le echa un vistazo toma su celular para restarle importancia.

—Sii ahora todo tiene sentido.—me agacho y veo un guante negro pero él guantes es grande.

—El entró por aquí ¡él estuvo aquí! Pero ¿porque yo?—estoy demasiado frustrada y eso hace que me quiera doler la cabeza.

—Ok entonces dices que Didnek estuvo aquí??—asiento con la cabeza repetidas veces.—¿Y eso que es?

Señala el guante y luego la busco con la mirada espera ¿como es que ella sabe que se llama Didnek?

—Y tu ¿cómo sabes que se llama así si yo nunca te lo dije?

—Tu me lo dijiste lo otra noche cuando estábamos ebrias.—la noto nerviosa.

—Yo... yo no recuerdo habértelo dicho.—digo confundida mientras trato de recordar si lo dije o no.

—¡Si! si lo hiciste pero ya no te acuerdas porque estabas demasiado ebria.—olvido el tema ya que eso no va a llegar nada.

Me acuesto en mi cama para descansar y tratar de recordar y todo viene como una ola.
El acariciando mi cuerpo repetidas veces con la rosa. Él diciéndome que "me castigara" eso es raro.

—El me tocó.—digo sin poder creérmelo.—El estuvo aquí.

—¿Estas segura?—me dice Kayle.

Trato de recordar y recordar y lo recuerdo él me dijo algo como "Se que me escuchas y quiero que sepas que no descansaré hasta tenerte para mi". "Pronto vendré por ti amor". Empiezo a respirar con dificultad y en eso empiezo a ver todo negro.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Me despierto en una cama bastante cómoda. Me siento en la cama y me rasco los ojos. Cuando miro en donde me en encuentro me percato de que estoy en un cuarto de hospital.
Estoy apunto de levantarme pero en eso escucho como entra mi amiga Kayle y un señor ya grande que parece ser doctor.

—Señorita Lila ¿como se encuentra?—me mira a los ojos.

—Bien eso creo.—me tocó la cabeza y empiezo a masajear mi sienes.—¿Qué hago aquí?

—Su amiga la trajo y me a comentado que ya van varias veces que se desmaya.—empieza a revisar su libreta y hacer unos apuntes en ella.

—Te traje porque te veías muy mal y estabas toda pálida.

—Señorita Lila lo mejor es que se quede el día de hoy aquí en el hospital.—niego con la cabeza repetidas veces.

—No... no no pienso quedarme aquí él puede encontrarme.—trato de levantarme pero me caigo.

Veo que me miran con cara de "que dice esta loca" y luego mi amiga me ayuda a levantarme y me apoyo en ella para sentarme en la cama.

—¿Porque no puedo caminar bien?

—Creo que el efecto de la droga todavía no se le pasa, lo mejor es que la dejemos aquí sola por un rato.—ambos están apunto de salir y yo trato de asimilar todo lo que me está pasando.

—No esperen por favor.—ellos salen muy apresurados y yo me levanto de nuevo en la camilla pero me caigo directo al piso y me arrastro para dirigirme a la puerta.—¿Acaso dijeron droga?

Ellos me drogaron...

—Por favor déjenme salir de aquí se los pido.—me arrastro y trato de darle un puñetazo a la puerta pero esta no cede. Y me siento tan débil, trato de arrastrarme de nuevo a la camilla pero me rindo y empiezo a ver todo negro.