Habían pasado ocho días desde que se rompió su vínculo. Jim apenas había estado despierto durante los tres primeros y había abandonado la cama al sexto, deambulando por la casa como un fantasma. Spock ya casi no estaba en casa, Sarek había decidido que sería mejor que estuvieran separados durante un tiempo. Por primera vez en su vida, Jim se sintió realmente agradecido hacia Sarek.
No creía que pudiera mirar a Spock ahora mismo.
O nunca más.
Le seguía doliendo la cabeza y se empeoraba cada vez que pensaba en que Spock se uniría oficialmente a T'Pring dentro de exactamente dos días. Apenas podía comer y cada vez que conseguía algo más que unas cuantas frutas Kray, se despertaba por la noche para ir a rastras al baño y vomitarlo todo de nuevo. Jim vivía prácticamente a base de hipos nutricionales.
Las ojeras bajo sus ojos se volvían más oscuras cada hora y cada maldita vez que cerraba los ojos veía el paisaje mental vacío, sentía los hilos putrefactos colgando de su esternón, envenenándolo de adentro hacia afuera.
"Spock, me mantienes despierto y vivo".
"Perdón, no estaba escuchando, ¿Qué has dicho, Jim?"
"Ah, no importa, estaba siendo tonto".
Jim deseaba poder acurrucarse en algún lugar y dormir sin soñar con hilos de oro y cielos ardientes.
En ese momento estaba enroscado debajo de la cama, con los ojos cerrados, rogando que el dolor se fuera.
Estaba temblando, las lágrimas le punzaban detrás de los párpados y abrió la boca para soltar el sollozo que se le había acumulado en la garganta en los últimos minutos. Realmente necesitaba controlarse, Amanda ya estaba bastante preocupada.
Bones vendría pronto a visitarlo. Amanda dijo que tenía que empezar a socializar de nuevo. Por lo visto, encerrarse en casa por culpa del desamor no era aceptable en este hogar. Jim se rió débilmente. Tal vez lo sería, si Amanda supiera que él estaba haciendo todo esto por un corazón roto... y un dolor de cabeza punzante que no se iba.
Jim se paró desde su escondite, temblando mientras se ponía de pie y se dirigía al baño.
Se preguntó si Spock se sentía así. Como si le hubieran abierto, vaciado y llenado de nuevo con agujas y arena. Se cuestionó si Spock sentía la misma frialdad insoportable en su esternón o si olía su propia carne descomponerse y volverse negra donde los hilos se habían marchitado y pegado a la piel de arriba.
Se sentía morir.
Una mirada al espejo le confirmó que se veía tan mal como se sentía. Tal vez peor.
Estaba pálido, sus débiles pecas destacaban enfermizamente sobre su palidez. Tenía la boca seca y agrietada, el pelo lacio y sin brillo. Le temblaban las manos y de vez en cuando le recorría un fuerte escalofrío que le recordaba la frialdad que le había invadido poco después de despertar de su inconsciencia. Jim esbozó una sonrisa torcida ante su reflejo, intentando que sus ojos tuvieran algo de vida, pero fue en vano.
Seguían muertos y rotos.
Era patético.
Jim abrió la llave del lavamanos y se lavó rápidamente las huellas de las lágrimas. No había necesidad de darle a Amanda más de qué preocuparse.
"¡Jim! ¡Tu amigo está aquí!"
Jim suspiró. "¡Ya voy!"
Se dirigió hacia abajo, sujetándose con cuidado a la barandilla. No quería que se repitieran los acontecimientos de ayer. Jim había decidido caminar en medio de la noche y se había caído rápidamente por las escaleras, despertando tanto a Sarek como a Amanda. Al final, Sarek tuvo que llevarlo de vuelta a la cama, ya que era incapaz de levantarse siquiera, porque su cabeza había considerado lógico invitar a una batería y a unos cuantos mazos a golpear su cráneo.
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En Tus Ojos (Spirk) // (Spock x Kirk)
RomantikSpock y Jim se criaron juntos desde pequeños en el planeta Vulcano, desde que Jim fue rescatado de una nave traficante de esclavos. Ya de adultos, Spock comienza a tener sintomas del Pon Farr y debe vincularse con T'Pring lo mas pronto posible. ¿...