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Transcurrieron los días y una tarde, de la nada llegó un helicóptero al bosque y quedó sobrevolando la casa de Erick, quien ya los estaba esperando junto a su hija, su prometido y sus amigos mágicos; la comandante bajó de éste y de una patada certera abrió la puerta, el señor la miró sorprendido pues no esperaba que hiciera algo así. Era una mujer algo mayor que él (44 años), cabello a la altura de los hombros color platino, ojos azules y usaba su uniforme verde militar, en el cual se mostraba su rango, por todo su entrenamiento tenía una buena figura y fuerza.
̶ ¡¿Por qué tenías que derribar mi puerta?!  ̶ Preguntó Erick enojado, le agradaba verla de nuevo pero ese era el único detalle que no le gustaba de su llegada.
̶ Vaya, esperaba que me recibieras con un “hola amiga, cuánto tiempo”  ̶ dijo ella graciosa y él suspiró.
̶ Pues eso iba a hacer hasta que entraste dramáticamente, ahora tendrás que repararla  ̶ la mujer simplemente rio. Koru se acercó y la saludó de forma militar.
̶ ¡Comandante Jane Lambert, la soldado Koru Kim a sus órdenes!  ̶ expresó la chica y ésta devolvió el saludo.
̶ Cuánto has crecido niña, me alegra mucho verte  ̶ le sonrió ̶  Hay que irnos ya  ̶ dio media vuelta.
̶ ¡Un momento!  ̶ pidió Koru y Jane la miró ̶  Hay una persona que quiero que vaya conmigo…
̶ De acuerdo ¿Quién es?  ̶ Tomó a Han de la mano a lo que éste quedó sorprendido ̶  ¿Tiene experiencia en peleas?
̶ En realidad no, le pido que lo entrene con los reclutas más nuevos durante mi estancia en la academia  ̶ el chico al oírla ya sabía que ese era su plan para tenerlo cerca.
̶ Bueno, no podría decirle que no a la mejor, vamos a admitirlo  ̶ aceptó a lo que Koru abrazó fuertemente a su novio emocionada ̶  Erick, eres libre de elegir si acompañamos, en caso de que quieras, allá te esperamos…  ̶ se despidió y se llevó a Hanoru.

Fue un viaje de un par de horas aproximadamente para llegar; aterrizaron en la base aérea que se encontraba a un costado de la institución, ésta se estaba en medio de otro bosque y con un extenso campo para las actividades, también varios edificios altos los cuales eran los dormitorios de los militares y unos más que eran las oficinas de los mayores rangos, enfermería, comedor y entre otros.
Koru le contó a Han varios anécdotas rápidos y lo llevaba a todas direcciones, pues le daba mucha nostalgia ver ese lugar; estaba ansiosa de observar a su pareja con los demás y ya que era temporal, Jane le explicó rápido sus horarios y le entregó su uniforme, poco después lo llevó con un grupo donde había espacio disponible.
̶ ¡Atención reclutas! Él es Kyun Han Shin y estará con nosotros un corto tiempo para aprender lo básico, ayúdenlo en lo que sea necesario ¿Entendido?  ̶ lo presentó con el resto y estos afirmaron; Han se mezcló con los demás y los dejó con su maestro, sin embargo Koru y Jane se dirigieron a su oficina para comenzar con la investigación del hermano de Gray.
Un rato después, Kyun prestaba atención perfectamente pero por unos segundos, su mirada se clavó en un chico que le parecía familiar… Llegó el descanso y se dispersaron, su novia al notarlo fue hacia él y le brindó una botella de agua, éste le agradeció y mientras la bebía, aquel chico se acercaba pero iba directo a su acompañante.
̶ Justo imaginé que te encontraría aquí pronto…  ̶ habló a ella.
̶ ¿Jong Hyun? Casi no te reconocí por tu cabello corto ¿Qué haces aquí y cómo sabes que yo vendría?  ̶ interrogó curiosa, era una extraña coincidencia.
̶ Vine porque estoy buscando a una vieja amiga y el único modo de hallarla sería metiéndome aquí… Parece que no entrena en esta academia, ya estaba por darme de baja pero creo que valdrá la pena quedarme un poco más  ̶ le sonrió ̶  Además nos contaron que tú eres legendaria así como la comandante Jane…
̶ ¡Ejem ejem!  ̶ carraspeó Han para llamar la atención.
̶ ¡Oh! Kyun Han ¿Tú que haces aquí? ¿Piensas hacer una nota de la academia o algo así?  ̶ cuestionó algo burlón.
̶ ¿Y tú crees que meterte a este sitio contará como servicio militar para Corea? Que cobarde…  ̶ comentó para devolvérsela.
̶ ¡Ten cuidado cómo me hablas, soy mayor que tú!
̶ No estamos en nuestro país, lo siento  ̶ siguió retándolo ̶  Aunque no lo creas, vine para aprender sobre combate  ̶ Lee se rio de esto último algo descarado.
̶ ¿Tú? ¿Peleando?
̶ ¡Han, Lee, ya basta!  ̶ interrumpió Koru su discusión ̶  Jong Hyun, te pido que te lleves bien con él, por favor.
̶ Bien, lo que tú digas linda…  ̶ cedió tranquilo y con una sonrisa.
̶ Confío en tu palabra, nos vemos…  ̶ se despidió y tomó de la mano a su prometido para llevarlo a su habitación, platicaban en el camino ̶  Han, debes controlarte…
̶ ¡No puedo, ese entrometido siempre me saca de quicio… A la próxima voy a reventarle la cabeza!
̶ ¡Oye, hablo en serio! Más adelante hay pruebas donde peleas con tus compañeros o con otros grupos, si te toca con él y no estás bien preparado podría lastimarte gravemente, por lo que veo está un mes más adelante que tú  ̶ el chico suspiró, tenía razón, debía entrenar duro si quería poner en su lugar de una vez por todas a Lee.
̶ Está bien, me relajaré y trabajaré duro para evitar que eso suceda.
̶ Gracias…  ̶ le dio un beso pequeño en los labios y continuaron rumbo al comedor.
Al terminar su receso volvieron al campo, Jane no tenía idea de cuándo tendrían la ubicación de la “Sombra”, así de debía mantener a todos listos por cualquier cosa, pues el hermano de Gray se había enfrentado contra muchas personas y una docena de militares no le podrían hacer frente, menos si llevaba apoyo.

Varias horas de trabajo duro más tarde, ya oscurecía por lo que los ejercicios de ese día habían finalizado, Kyun estaba muy agotado pues era su primer día, su novia lo acompañó hasta su dormitorio y al llegar justo antes de entrar, se percataron que Lee se quedaba en la habitación de enfrente, vaya suerte para Han. Cuando ingresó a la suya notó que no era muy grande, sólo tenía lo necesario, una cama, un buró, un ropero, una mesa pequeña con un par de sillas y su baño con ducha, de los colores simplemente era beige con un piso oscuro y una ventana que daba al bosque exterior.
̶ Los cuartos no son lo más cómodo del mundo pero es suficiente, supongo que es así lo hacen para mantener la disciplina  ̶ mencionó ella.
̶ ¿De verdad?, no lo había notado...  ̶ expresó él sarcástico.
̶ Por cierto, te ves muy cansado, deberías darte un baño…
̶ No creo que pueda, me duele todo…  ̶ se recostó boca abajo y con cuidado en la cama.
̶ ¿Quieres que te dé un masaje rápido?  ̶ sugirió ella.
̶ ¿De verdad lo harías? Porque en serio lo necesito…
̶ Claro que sí  ̶ afirmó y con sus manos inició por los hombros de su prometido. Diez minutos más tarde concluyó al seguir por toda su espalda, él se sentía mejor.
̶ Gracias cariño…  ̶ su expresión hizo que ella se ruborizara y sonrió ̶  ¿En serio pasaste por esto?
̶ Así es, tranquilo, fue hace mucho y tú ya te acostumbrarás.
̶ Vaya explotación...  ̶ comentó gracioso a lo que ésta rio, Han siempre buscaba la forma de hacerla sonreír ̶  Por cierto ¿Ya te dijeron dónde te quedarás?
̶ No, ya no pude hablar con la comandante, se veía algo tensa…
̶ Entonces puedes quedarte conmigo, no creo que lo note  ̶ su novia lo analizó unos segundos y tenía razón, estaba muy ocupada que no se acordaría de ese detalle.
̶ Sólo esta noche…  ̶ aceptó, él se dio la vuelta contento y la abrazó.

Apenas se aclaraba el cielo cuando los despertó el sonido de una alarma por medio de varios megáfonos repartidos por la academia, Koru despertó a Han, le costó levantarse pues no estaba acostumbrado a despertar a las 6am… Su horario era este:

• Después de despertar tenían hasta las 7am para arreglarse y desayunar, si se atrasaban un segundo más había castigo.
• Realizaban sus actividades y su primera comida era de las 11 de la mañana a 12 de la tarde, ni más ni menos.
• Los entrenamientos finalizaban a las 17 horas, a excepción de que sucedieran emergencias y les daban descanso a las 16 hrs para alargar su horario y terminar a las 19hrs.
• Tenían tiempo libre hasta las 10 de la noche, era lo más tarde que se podría tolerar.
A todos estos cambios tuvo que ajustarse el coreano mientras pasaban los días y claro, convivir con su rival quien siempre aprovechaba el momento correcto para acercarse a Koru y fastidiarlo a él.
Semanas más adelante, llegó la prueba de luchar contra un recluta de otro grupo al azar, su pareja le dio consejos a la hora del combate y éste estaba nervioso, se había fortalecido en ese tiempo pero al observar como Lee acababa con sus oponentes muy fácil lo hacía bajar su confianza, pero podía ver sus movimientos y se dio cuenta que siempre usaba una misma técnica, si le tocaba con él ya sabría dónde conectar los golpes.
Sólo los más fuertes iban quedando y como si lo hubieran escuchado, Kyun tuvo de rival final a Jong Hyun, por fin podría desquitar la ira que tanto le tenía y de verdad lo iba a disfrutar…

Así es, ya no tengo más datos curiosos, probablemente saque alguno más adelante.

Hasta la próxima aventura...

"Secretos del Bosque: (Re)encuentros"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora