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Han y Erick buscaron a Koru preocupados, no alcanzaron a ver por dónde se había metido; el primero recordó un sitio al que le gustaba ir sola, así que se dirigió allá. Al llegar pudo oírla sollozando, estaba sentada en un tronco, se acercó y colocó una de sus manos en su hombro.
̶ Koru…  ̶ ella dio un sobresalto, la había asustado un poco pero reconoció su voz; él se puso en cuclillas enfrente y abrazó.
̶ Han, vete… no podemos estar juntos…  ̶ susurró muy triste.
̶ No te dejaré, nunca voy a hacerlo… hallaremos una forma de solucionarlo  ̶ ésta suspiró y aceptó su abrazo ̶  Ya me acostumbré a amarte tanto y no pienso soltarte…
̶ De verdad, como te amo…  ̶ expresó volviendo a soltar unas cuantas lágrimas, el coreano besó su mejilla varias veces y terminó en sus labios, concluyendo segundos después; la chica ya estaba más tranquila.
̶ Calma, ya no llores…  ̶ le sonrió mientras le limpiaba las gotas, a lo que ella también ̶  Si aquí no podemos estar a gusto, entonces vayamos a mi casa, seguro que a mi madre no le molestará.
̶ De acuerdo  ̶ cedió sin dudarlo.
Tomó su mano y se dirigieron al hogar de Han; durante el camino, él le informó al padre de la chica lo que habían hablado, éste aceptó que su hija se distanciara unos días para calmarse, era lo mejor. Cuando llegaron se encontraron a Soo Jae en la sala.
̶ ¡Han, Koru, me alegra tanto verlos! Pero me sorprende que vinieran cuando ya está oscuro  ̶ expresó la señora en tanto los jóvenes se sentaban.
̶ Ya te extrañábamos  ̶ dijo su hijo ̶  además, quiero saber si… Koru puede quedarse un tiempo aquí.
̶ ¡Claro que sí! Eres bienvenida a esta casa, Koru  ̶ aceptó.
̶ ¡Gracias señora!  ̶ agradeció la chica contenta.
̶ Aunque me parece extraño ¿Cuál es el motivo?  ̶ preguntó Jae.
̶ Pues… Koru deseaba venir a la cuidad un rato  ̶ inventó él.
̶ Eso está bien. Llegaron a tiempo, estaba por hacer la cena  ̶ dijo su madre.
̶ ¡Perfecto! La acompañamos  ̶ sugirió Koru y ésta no se negó.

Transcurrió la hora de la cena y llegó la de dormir.
̶ No les incomodaría dormir juntos ¿Verdad? Ya que sólo está mi habitación y la de Han  ̶ informó la mayor serena.
̶ Ah, n-no hay problema…  ̶ accedió la francesa nerviosa.
̶ Muy bien ¡Que descansen!  ̶ terminó Jae y fue a su dormitorio.
̶ Bueno ¿Dónde está tu…?  ̶ no pudo terminar, pues el chico la tomó de la mano y le llevó por las escaleras hasta su cuarto. Al entrar, notó que parecía una habitación de cualquier chico de su edad, pero también se encontraban cosas relacionadas a los gustos de Han, incluso un par de instrumentos musicales.
̶ ¿Qué? ¿Creíste que sería como un laboratorio con un súper computador de alta tecnología?  ̶ cuestionó gracioso.
̶ En realidad sí, pensé que sería muy “nerd”  ̶ contestó y rio un poco.
̶ Pues no es para tanto  ̶ sonrió ̶  Hay que dormir ya…
̶ Ok…  ̶ ella se acostó horizontalmente en la cama y respiró hondo, él a su lado ̶  ¿Ahora qué haremos?
̶ No lo sé… pero me preocupa un poco lo que diga mi mamá, parece que sospecha algo…
̶ También me da miedo, de que cuando lo sepa… no quiera volver a verme…  ̶ comentó desanimada.
̶ Dudo que eso suceda, ojalá lo entienda y no le moleste, ella es muy buena.
̶ Aún me da algo de terror… ¿Me abrazas?  ̶ le pidió y éste no lo pensó ̶  Jamás me dejarás ¿cierto?
̶ Ya lo he dicho, y lo vuelvo a asegurar...
Pasaron los minutos y Koru había quedado profundamente dormida en sus brazos, Han la acostó bien para lograr descansar finalmente; miraba su rostro, de verdad no iba a apartarse de su lado. De repente una llamada entró en su celular, salió sigilosamente para contestar y no despertarla.
̶ ¿Hola?...
̶ ¿Kyun Han Shin?
̶ Sí, soy yo…
̶ ¿Qué tal? Soy el sr. Manuel González, os llamo desde España para informarle que ha sido seleccionado para realizar un trabajo acá.
̶ Espere ¿lo dice en serio?  ̶ preguntó el joven impactado.
̶ ¡Claro! Será en tres días, el viaje tendrá duración de dos meses aproximadamente, os aseguro que os pagaré bien  ̶ Han no se la creía, le agradaba la oferta, pero pensó en que no podía abandonar a Koru.
̶ ¿Puedo ir acompañado?
̶ Lamentablemente no, es estrictamente de negocios.
̶ Entiendo…  ̶ estaba desalentado.
̶ Aunque si tiene motivos que os impiden venir, decidme y puedo ofrecerle el trabajo alguien más…
̶ Bueno, deme tiempo pensarlo, por favor…
̶ Vale, os llamaré mañana en el transcurso del día, espero para entonces tenga lista vuestra elección, buena noche  ̶ finalizó el señor y colgó.
Kyun se revolvió el cabello, era una excelente sugerencia pero de verdad no quería dejar sola a su novia por dos meses; después de digerirlo unos minutos volvió adentro y se acostó a lado de ella, nuevamente observando su rostro, se quedó en su cabeza la preocupación del viaje hasta que quedó dormido.

Llegó otro día, Hanoru despertó muy felices de estar juntos y fueron a desayunar, estaban solos pues la madre del coreano había ido a su trabajo mucho más temprano.
̶ Y… ¿Cuándo se lo diremos?
̶ No tarda en venir, sale temprano del trabajo…  ̶ contestó él, así que tuvieron que esperar un par de horas. Transcurrió el tiempo y oyeron la puerta.
̶ ¡Hola, estoy en casa!  ̶ exclamó Jae entrando con algunas bolsas y los chicos la ayudaron con ellas ̶  Hace mucho que nadie me ayudaba a carga las compras… con eso de que Kyun Han ahora vive con Sang…  ̶ comentó graciosa.
̶ Lo siento mamá, pero ya estaré presente  ̶ dijo Han.
̶ Está bien hijo, no te preocupes...  ̶ le sonrió.
̶ Pero hablo en serio….
̶ Yo también  ̶ rio un poco.
̶ ¡Igualmente estaré para ayudarla de ahora en adelante!  ̶ mencionó Koru.
̶ ¿De ahora en adelante? No es que me moleste querida ¿Pero cuánto vas a quedarte?  ̶ estaba confundida la señora.
̶ Ah, bueno…  ̶ era el momento para confesarlo, él tomó valor para hacerlo de una vez.
̶ Desde hace poco… Koru y yo estamos en una relación, y mi tía no quiere que estemos juntos a pesar de que es adoptada por Erick  ̶ reveló, su madre estaba impresionada por la noticia.
̶ Bueno… No sé qué decir…
̶ No está de acuerdo ¿verdad? Como ellos…  ̶ imaginó la francesa cabizbaja.
̶ No es eso… A decir verdad, siempre los vi muy unidos y cuando mi hijo dejó de verte, lo sentía deprimido; fue cuando sospeché que pudo suceder algo más entre ustedes  ̶ contó ̶  No sé porque Sang lo toma a mal aún después de lo que pasó con Erick, no aprendió nada.
̶ Señora, usted ha sido una gran persona conmigo, créame que se lo agradezco; pero si nuestro noviazgo le molesta… estoy dispuesta a dejarlo con tal de no hacer más daño…  ̶ opinó triste.
̶ ¡Koru!  ̶ la nombró Han sorprendido por lo que dijo.
̶ No tienes que hacerlo, tú eres linda y fantástica, el saber que están enamorados es una de las mejores noticias que me han dado, ambos son perfectos el uno para el otro, por eso acepto que estén juntos  ̶ explicó Jae. La joven levantó la mirada.
̶ ¿De verdad?  ̶ Ella no lo creía.
̶ ¡Por supuesto! Y si desean, puedo hacer que mi hermana cambie de opinión.
̶ ¡Eso sería estupendo, gracias!
̶ No es nada, será difícil, pero al final lo conseguiré.
̶ Muchas gracias mamá…  ̶ expresó el chico y la abrazó.
̶ Koru, si quieres puedes llamarme “ommoni”  ̶ le sugirió, ya que salía con su hijo, ésta sonrió y también la abrazó, segundos después se separaron ̶  Bien chicos, saldré con una amiga, vuelvo en un rato.
̶ De acuerdo, ve con cuidado…  ̶ le pidió Kyun, la mayor asintió y salió de la casa.
Lo que no sabían era que en realidad se dirigía con Sang, no iba a permitir que actuara de esa forma con los chicos… y si no cedía lo iba a pagar.

Datos del bosque:
El nombre del señor español esta basado en uno de mis Youtubers favoritos, lo agregué en su honor :3 (No sé mucho de castellano, hice lo que pude).

Hasta la próxima aventura...

"Secretos del Bosque: (Re)encuentros"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora