Infinite Love - EunHae [+18]

ENTENDER

DongHae se sentía bastante herido debido a toda la situación, no podía decir que estaba sorprendido pues ya se había hecho una idea respecto a la situación con Jessica. Sus amigos le habían advertido lo que se venía, así que desde el primer día fue consciente de todo. Sabía que ella era hija única de un matrimonio que nadaba en dinero, que era caprichosa y siempre obtenía lo que quería y hasta ahí todo parecía ir bien, sino fuera porque ella quería era a HyukJae. Y eso lo estaba carcomiendo internamente, DongHae nunca se había considerado alguien posesivo, pero es que jamás había estado en este tipo de situación, el pelinegro era su primero novio y cuando escucho a esa tipa hablar de un futuro compromiso, quiso arrastrarla de los pelos por todo el patio de instituto y repetirle una y mil veces que quite de una maldita vez, los ojos de su novio. Porque si, HyukJae era suyo y no pensaba soltarlo, iba a luchar cueste lo que cueste, claro que sí.
Se había ido no por temor o por ser cobarde, solo lo había hecho pata tratar de calmarse. Su padre le enseñó desde niño que las palabras más crueles que salen de nuestra boca son mientras estamos enfadados y el no quería lastimar por ningún motivo a HyukJae. Por eso había decidido irse mientras aún podía controlar sus impulsos, leer siempre relajaba su mente y aclaraba sus ideas. Así que había entrado a la biblioteca y agarró el primer libro que cruzo su mente.
Pero nada de esto había sido de mala intención ni mucho menor para hacer sentir mal al pelinegro.
Sabía que lo estaba intentando, que estaba poniendo de su parte, justo ahora mirándolo frente a él, podía sentir el miedo y los nervios del otro y aquello no le gustaba. No quería ser el causante de aquellos sentimientos en HyukJae. El solo quería hacerlo feliz.

—Hyuk—habló en voz baja, pero no obtuvo respuesta alguna—Hey mírame—unió sus manos, entrelazo sus dedos y dejó un beso sobre sus cabellos.

HyukJae mantenía la vista baja, como si la solución a todos sus problemas estuviera en algún punto del piso
Los minutos pasaban y el silencio era cada vez más denso, pero DongHae no pensaba presionarlo a nada, esperaría el tiempo que fuera necesario, hasta que estuviera listo a decir algo. Así que solo se quedó mirándolo fijamente, esperando una pequeña señal.
Una que llegó en pequeños sollozos. DongHae abrió sus ojos como platos y miró desconcertado con HyukJae empezaba a llorar cada vez más fuerte, todo pensamiento abandono su mente y se quedo en blanco
Había esperado muchas cosas, menos esto.

Escuchar el llanto de HyukJae dolía demasiado.

—Hyu......—empezó a hablar, pero fue interrumpido por un HyukJae tembloroso, que lo abrazó muy fuerte, como temiendo que de pronto fuera a desaparecer, un pelinegro que parecía un niño pequeño triste y abandonado, que enterró la cara en su cuello y lloró sin descanso durante casi una hora.

Y DongHae simplemente lo abrazó, lo consoló y no lo soltó ni un solo instante, solo se quedó ahí para el.
No preguntó, no cuestionó, solo escuchó mientras acariciaba lentamente su espalda y dejaba pequeños besos sobre el cabello del pelinegro.

—Lo siento tanto—habló de pronto HyukJae, con voz nasal y ronca—No quería lastimarte, Tú... Tú eres lo mejor que tengo en esta vida y yo solo te estoy haciendo daño, perdóname, no mereces nada de esto.

Un nudo se formó en la garganta de DongHae

—Hey Tranquilo, mírame—susurró—¿Porqué dices que me estás haciendo daño? Eso no es cierto, deja de culparte por cosas que no has hecho.

—RyeoWook dijo que yo te lastimo y que no quería que yo te arrastre a toda mi mierda—sollozo HyukJae—Y quizás tiene razón, pero yo no quiero perderte, yo quiero que estés aquí conmigo, abrazándome y dándome besitos todo el tiempo.

El corazón de DongHae dolió demasiado, ver así a HyukJae tan vulnerable, tan triste, lo ponía demasiado mal. Sin poder evitarlo algunas lágrimas bajaron por sus mejillas y las seco rápidamente.