Amores de una vida

Accidentes Y Besos Bajo La Luna

Ese año todavía no se habían visto en persona. Pero la comunicación era constante y casi todo el día. Antes de terminar el curso pasado, Fred le había dado un cuaderno encantado para poder comunicarse más fácilmente. Pero Draco quería ver a Fred. Desde aquel primer beso no hubo más y Draco se preguntó qué había sido todo aquello. Aún con su curiosidad y una revolución emocional en él, no le preguntó nada a Fred. La relación entre ellos seguía igual, aunque podía sentir que había más cariño y demostraciones entre ellos.

Draco estaba aburrido. No había nada que hacer en la enfermería, siguió lanzando pequeñas esferas de luz a las que explotaba para fingir que eran pequeños fuegos artificiales.

- Hasta pareces tierno haciendo eso.

- Pensé que ya te habías olvidado de mí.

- ¿Cómo iba a olvidarme de mi rey del drama? ¿Cómo te encuentras?

- Gregy y Vince son unos idiotas. Y yo más por no fijarme antes. Con esos amigos, es obvio que en algún punto terminaría mal.

- ¿Contra quién vas a dirigir tu enojo? No me digas, no me digas. Quiero adivinar ¿Qué me das si adivino a la primera? - antes que Draco pudiera contestar Fred continuó con su discurso, Draco lo miraba divertido, de repente hacía algunos gestos pero siempre sonriendole- ¡lo que quiera! ¿Lo que quieras? ¿Seguro? Perfecto. Supongo entonces.. No, estoy seguro que tu enojo irá en contra de Potter y compañía ¿cierto?

- Eres un genio ¿verdad?

- Nunca irías contra tus amigos, menos contra Gregy, al parecer ¿también debería ponerme celeso de él?

- Idiota

- Ven conmigo - Fred le tendió la mano - Quiero mostraré algo

- Estoy convaleciente ¿estas ciego o qué?

- Dijiste que me darías lo que quisiera si adivinaba, anda, vamos. No seas dramático

- Yo no dije nada. Cargarme y voy contigo a donde sea - Fred no lo pensó dos veces y lo cargo fuera de la enfermería - ¡Fred bajame!

- Shh, no hagas tanto ruido, nos pueden atrapar

- Fred te aseguro que... - Draco guardó silencio sin saber que decirle. Le agradaba ser llevado así por Fred.

Además estaba aprovechando su estado moribundo. Después de algún tiempo de recorrido Fred lo bajó con cuidado.

- Vamos algo lejos y...

- Y el caballero de brillante armadura no es tan fuerte y capaz de llevarme todo el camino en brazos ¿cierto? No te apures no soy tan frágil. Vamos. Guíame.

Ambos se pusieron en camino a una de las tantas torres del castillo. Draco se estaba lamentando haber aceptado seguirlo. Subieron miles de escalones, Draco ya estaba planeando como tirar a su acompañante por la torre y que pareciera un accidente.

- Ven es por aquí

- Es una vista impresionante - se maravillo Draco al ver por una ventana de la torre.

- Lo es, pero lo que te mostraré será mejor. Vamos - subieron por una pequeña trampilla. Fred ayudó a Draco a subir. - ¿Impresionado? - Malfoy olvidó su enojo, olvidó todo. La vista era increíble. Estar impresionado era poco.

- Es decente

- Lo sé, ven aquí - Fred acerco a Draco a su pecho para abrazarlo. Un deja vu llegó a ambos. Un beso. Draco se sonrojo. - Draco, siento no haber ido a verte inmediatamente al inicio del ciclo. Y por tardar en verte hoy. Pero estuve pensando, - Fred se separó un poco para poder ver a Draco a los ojos - estuve pensando en esto y en lo que quería decirte. Lo que te he dicho durante todo este tiempo lo sostengo. Quiero estar a tu lado, me gusta, me gustas. Quiero cuidarte, aunque no lo necesites, quiero ayudarte, quiero seguir compartiendo mi tiempo y mi corazón contigo, Draco.

Draco estaba sorprendido. No tenía palabras para lo que le dijo Fred. Había pensado en Fred todas las vacaciones. Ese primer beso nunca dejó su mente, lo revivía en cada sueño. Soñaba con las miradas dulces, las sonrisas coquetas, los abrazos cálidos. Soñaba con Fred.

- Fred. Yo... - Draco lo abrazo con su brazo sano. Quería decirle sí a todo, pero tenía dudas. Le abrumaba la seguridad en las palabras de Fred, en su mirada, en su toque. - Sí - susurro - pensé en ti. Soñé contigo, con este momento. Quiero todo esto a tu lado. Tengo miedo, pero quiero seguir con esto. No sé qué habrá mañana pero quiero verte sonreír.

- Lo vamos a intentar y lo vamos a lograr

Draco se acercó a besarlo. Fue suave, ligero, tembloroso. Fred no lo dejó alejarse y le devolvió el beso de forma mas íntima. Era dulce, ya no era solo un roce de labios, pero no dejó de ser suave.