Fred Weasley

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Fred Weasley era encantador. No había dudas que era un chico con una gran sonrisa, inteligente y bromista. Como parecía ser una tradición en su hogar fue sorteado en Gryffindor, pero Fred siempre tuvo una espina respecto a eso. Algunas noches se imaginaba cual otra casa podría haber sido la suya.

Hufflepuff, eran leales, honestos y no temen el trabajo pesado; él era leal y honesto, pero no entendía aquello del trabajo pesado, además no le gustaba el color amarillo. Revenclaw, creativos, curiosos y siempre buscan la respuesta, él tenía todo eso, se vanagloriaba de ser creativo, para crear bromas tan increíbles como las que había debía ser creativo y curioso, aún así siempre pensó que esa era una descripción más apta para su hermano George. Por último Slytherin, ambiciosos, astutos y en busca de poder, él cumplía con todo, era astuto como ninguno, era ambicioso y quería poder, quizás no de la manera en la que los demás veían esas cosas pero esa descripción siempre le parecía acertada para sí mismo, y vamos, se veía bien de verde. Pero sentía que sólo pensar en eso estaba traicionando a su familia y es que era feliz en Gryffindor pero sentía que alguna otra casa le pudo ayudar a desarrollar otras habilidades. Incluso había determinado cual otra casa pudo ser la de sus hermanos, pero en esos momentos voltea a a todas partes esperando ver a su madre lista para regañarlo por tales blasfemias porque "todos los Weasley van a Gryffindor". Quizás era por el cabello, pensaba el joven Fred.

Fred amaba a su familia, a veces no los entendía y los molestaba, pero los amaba de ello no tenía dudas. Admiraba cosas en ellos y otras tanto las aborrecia. Él mismo tenía cosas que le enorgullecian y otras que deseaba cambiar. Pero esas cosas eran las que hacían a cada persona ser ellas mismas.

Por otro lado estaba feliz de estar en Gryffindor, estaba junto a su hermano y estaba en la casa de los Moreoadores. Ellos, Fred y George, continuarían con su legado. Eso lo animaba cada que la espinita llegaba a moverse dentro de sí. Además, que sería de los gemelos si hubieran ido a Casas distintas, siempre habían sido los dos. Quizá había algo raro ya que siempre estaban juntos. Si estaba uno estaría en otro. Había pocas ocasiones en las que no estaban juntos. Eran un paquete, decía su familia y ahí volvía otra de sus espinitas y es que se preguntaba si deberían ser un paquete o ser dos personas independientes.

Amaba a su hermano, eso era indiscutible, ambos eran distintos, eran dos personas diferentes, pero al ser tantos hermanos muchas veces sus padres les llamaban a ambos como si fueran uno. Pero ello le hacía sentir que eran uno y no dos. Se preocupaba al pensar en el futuro, en sí en algún momento se separaban ¿qué podría pasarle a su hermano? Recordaba una ocasión antes de Hogwarts que estuvieron lejos y George cayó en las escaleras de la casa.

Aún así había momentos en los que se separaban. Fred se iba, caminaba por ahí, buscando posibles escapes del castillo. Disfrutaba de la naturaleza, el viento, la hierba en sus pies descalzos, el aroma de las flores.

Cada uno iba por su lado, unidos, juntos pero cada uno en su camino

Amores de una vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora