𝗰𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝗱𝗼𝗰𝗲: 𝖾𝗌𝗉𝖾𝗋𝖺𝗋𝖾̇.

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𝐑𝐚𝐧 𝐇𝐚𝐢𝐭𝐚𝐧𝐢

La tenía entre mis brazos mientras escuchaba su respiración tranquila.

Me siento tan hijo de puta por haber hecho eso, pequeña.

Le acariciaba el cabello mientras sus manos estaban en mi pecho, recargue mi mentón en su cabeza y estar así me hizo sentir algo.

El amor jamás fue lo mío, nunca correspondía a los sentimientos de las chicas, lo único que podía hacer era satisfacerlas sexualmente para después aburrirme; y si alguien me gustaba un trato y un documento las hacía firmar.

Caso que con ella no fue así.

Noviar con alguien menor es mal visto dado a qué soy un hombre que sabe la vida cuando ____ no a vivido ni la mitad que yo.

La trataré cómo se merece y esperaré a que ella crezca un poquito más.

"No me importa si pasa una eternidad hasta que estés lista, yo te esperaré" pensé mientras le daba un beso en la frente.

Cuando menos sentí el brazo se me había dormido, pero ella seguía cómoda, creo se durmió.

Sonreí.

En mi vida me hubiera imaginado algo así.

—RindouuUU — caminaba por mi cocina mientras le llamaba a mi hermano

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—RindouuUU — caminaba por mi cocina mientras le llamaba a mi hermano.

—¿Y a ti qué te pico? — baja de las escaleras me quedo viendo mal.

—Te preparé tú postre favorito justo cuando éramos niños — le servi en un plato, se lo puse en la mesa.

—No gracias me tengo que ir — Rin iba a la salida.

Corrí a abrazarlo — vamos hermanito, hace mucho no estamos juntos, además me tienes que platicar lo de la junta de ayer.

Re volví su cabello y lo lleve a rastras a la cocina.

Me platicó lo que dijeron ayer, nada del otro mundo, pero dude cuando no comentó nada sobre la empresa de los Yahya.  A lo mejor Koko decidió ya no usarla para negocios turbios. Mi hermano se esta comportando raro, o tal vez es mi imaginación. 

Dió la hora para irme con ____, me vestí de camisa negra al igual que el pantalón de vestir. Arremangado mis mangas, baje las escaleras y escogí el Maserati blanco.

Me puse los lentes de sol y conduje a su escuela.

Y ahí estaba la nena que me hacía sentir como adolescente, corría al verme, le ayude a sujetar su mochila, le abrí la puerta, me subí a y pase su mochila para atrás. 

—¿Cómo te fue preciosa? — encendí el auto. 

Me platico de su día, examenes, tareas, proyectos, antes de llegar a la empresa ______ dijo que tenía que ir por unas cosas a su casa. 

𝐃𝐀𝐃𝐃𝐘 𝐈𝐒𝐒𝐔𝐄𝐒 | Ran Haitani | tnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora