Capitulo 18:'' Dos cuerpos, un infierno.''

292 14 3
                                    

Capítulos 18: '' Dos cuerpos, un infierno''

Contenido +18. 

Eris Sherwood

Desde pequeña mi vida ha sido perfecta en el sentido de que he tratado de ser perfecta para mi padre y mi hermano que aparenta perfección.

He tratado de ser perfectas.

Peinado perfecto.

Cuerpo perfecto.

Calificaciones perfectas.

Niña religiosa perfecta.

Virgen perfecta.

Hasta que llegue a esta ciudad.

Todo este misterio.

Ni todas las plegarias de mi padre servirían.

Todas las personas, hasta las que iban a la iglesia son dañinas.

Su vibras.

Las muertes.

Las sonrisas vacías.

Todo lo de esta ciudad.

Pero algo si me llamo de toda la ciudad.

El, Dante.

Me hizo sumergirme en un oscuro aprendizaje.

Que no me arrepiento, sino que me fascina más.

Cada vez más.

Mi cuerpo arde al tenerlo cerca.

Mi cuerpo se siente como un infierno cuando me besa.

Cuando me toca.

Cuando soy su juguete.

Sonrío viéndolo, sus ojos no se despegan de la calle, oscuros, profundos y escalofriantes, sus manos aprietan el volante, su mandíbula se tensa, lo miro traga, sabe que lo miro, siente mi mirada, pero aun así no la aparto.

Siempre me ha gustado ver los ojos de los demás, pero nunca me ha gustado que vean los míos, hasta que llego él. A veces soy muy callada, pero a través de los ojos comprendo mucho a las personas, puedo ver su felicidad, su temor, su dolor.

Cuando las personas me ven de frente y ven mis ojos, su cara cambia, no ven mis sentimientos, sino la extraña condición que padezco, cada uno de diferente color.

El me miro y no se sorprendió, no se alejó.

Solo se acercó a mí.

Me miro a los ojos y no temieron.

Quiso que fuera suya desde el primer momento.

Desde pequeña no he pecado hasta que lo conocí.

Con el conocí el peligro.

Y como disfrutar de este.

—¿Qué piensas? — me saca de mi burbuja con su voz.

—¿Qué?

— Estas idas— Afirma y da una pequeña risa—¿Te arrepentiste, niña?

— No, neandertal. — Ruedo los ojos.

—¿Qué piensas? — Vuelve a repetir.

— En la ciudad.

—¿Qué?

— Desde que llegue esta ciudad. — Suspiro mientras miro las nubes.

— Está llena de personas retorcida y no todo lo que pasa soy yo. — Dice serio.

10 segundos ©.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora