Capítulo 36

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Para que sea un final perfecto, no necesariamente debe ser un final feliz

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Para que sea un final perfecto, no necesariamente debe ser un final feliz.

-Entendi -dice Emma

Estamos acostadas en el pasto de mi patio trasero, hace un clima hermoso y el cielo está divino.

-¿Qué entendiste? -pregunto confundida

-Cada segundo que pasa, avanza el tiempo y no vuelve, entonces, ¿por qué desperdiciarlo por personas que no valen la pena? -no deja de mirar el cielo

-Exacto -tiene razón

-Se nos da la oportunidad de vivir y a veces es inevitable estar mal por otras personas y hay que permitirse llorar, pero llega un punto en donde ya es suficiente, en donde ya es hora de pasar de página y seguir, la vida no se detiene por nada ni por nadie -me agarra la mano

-Nada es para siempre -la miro

-Ni las personas, ni el tiempo y mucho menos el sufrimiento -responde

-Somos momentos -no dejo de mirarla

-Los cuales quedan como recuerdos -sonríe

-Me rehuso a que esto no sea para siempre -nunca tuve una amiga como ella

-Tenemos que estar juntas pase lo que pase -responde y me acerco a abrazarla

-¿Y si la vida no lo quiere así? -me puse sensible

-No me interesa lo que la vida o el destino quiera, solo se que te quiero en mi vida hoy, mañana y todos los días siguientes -dice mientras nos seguimos abrazando

-¿Te das cuenta que te conocí cuando más rota estaba? -dejo de abrazarla para mirarla a los ojos

-Si, lo se

-Al conocerme, me entendiste y me dejaste entrar a tu vida sin ningún problema. Nunca me voy a olvidar de eso -ella me ayudo mucho

-Porque sabía que tenía que estar ahí para vos -soñó seguimos acostadas mirándonos

-¿Cómo lo sabías?

-No se, fue raro, porque cuando te vi por primera vez sentí que ya te conocía -es un amor

-Y fue re loco, porque nos entendimos desde el momento uno y supiste aceptarme con mis traumas y todo -nos sentamos

-Supongo que estaba destinado conocernos -se sirve agua

-Nada es casualidad, todo pasa por algo -fiel creyente de eso

Seguimos hablando durante un rato largo y en un momento vemos salir a Thomas de mi casa.

-Hola hermosa -se agacha para saludarme

-Hola amor -le respondo y le doy un beso

-¿Y yo? -pregunta Emma mientras hace un puchero

No te vayas [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora