— No, es que si lo dejamos así vamos a volver a hablar de esto en otro momento, así que bien; supongamos que tienes razón-
— Bueno, “supongamos”.
— Supongamos que me gusta Ame, ¿y luego qué? Me llevó como 5 años nada más ganar su confianza; ella en definitiva no me ve a mí como nada más que un amigo. Conociéndola, quizás se confunda o... se burle, no lo sé.
— No me digas... ¿tienes miedo a que te rechace?
— ¡No! Esto es... una suposición, ¿recuerdas?
— Bien, suponiendo que todo fuera posible... te diría que sólo empieces por invitarla a salir. Digo, ya que su mamá la deja hacerlo.
— ¿A salir como... en una cita?
— Pues sí, ¿de qué otro modo podrías hacer que sepa que te gusta sin comprometerla por completo ni decirlo directamente?
— Bueno, y... suponiendo que quiera invitarla a salir... ¿cómo... debería hacerlo?
— Suponiendo que quieras hacerlo, sólo deberías decírselo. A ella suele gustarle la gente que es directa, así que si le hablas con sinceridad ella aceptará. Por supuesto también tendrías que considerar que no deberías invitarla a salir si no te sientes para ello, pero bueno, todo esto es suponiendo que la invites a salir, pero dices que no vas a hacerlo, ¿no?
— No, no, es sólo... una situación hipotética; no es como que yo realmente... piense en invitarla a una cita, porque eso implicaría admitir que ella me gusta, y eso no va a pasar.
— Ajá...
No estaba seguro de lo que estaba a punto de hacer, pero si iba a hacerlo, entonces debía hacerlo bien.
—...¿Quieres salir en una cita conmigo? No, eso hace que suene como un inseguro. — se habló frente al espejo. — Tú, yo, una cita. No, eso es demasiada confianza. He estado pensando, y creo que eres muy agradable... ¿te gustaría salir a algún lado conmigo? No, eso es muy elaborado. ¿Saldrías conmigo? No, sal conmigo. ¡¿Por qué es tan difícil?! — estaba frustrado, pero no sé le podía culpar por algo como eso. — Lo estoy pensando demasiado, ¿para qué siquiera la quiero invitar a salir...? Es increíble que Inupi haya logrado meterme ideas raras en la cabeza.
ESTÁS LEYENDO
Raindrops - Hajime Kokonoi X OC
Fiksi PenggemarOjos del mismo color del oro. Kokonoi encontró a la chica afuera durante una tormenta. Las gotas de lluvia deslizándose por sus manos y algunos rincones de su cara, además de su impermeable. Dinero era lo que buscaba de ella. Amor genuino fue lo qu...