🥀Pétalos De Amor Y Dolor🥀 ×RusGer×✅

6 Dolor

Los meses pasaban como el agua en una lluvia, cuando menos lo pensaron ya era primavera de nuevo.
Parecía que Alemania estaba lidiando con el problema, ya salía de su cama, comía un poco más.
Eso mantenía un poco más tranquilo al japonés, pero el plan del alemán era otro.

Por otro lado, Rusia había logrado gustar del alemán, alguien por ahí aceptó hablarle del teutón y con todo y eso Rusia poco a poco se iba dando cuenta de lo genial que era Alemania, y que la había cagado al romper el corazón del tricolor.

Ahora solo planeaba como encontrar o llegar a Alemania para decirle todo pero sabía que no era fácil. Él mismo comenzó a espiar al germano, sabía a qué hora estaba afuera, con quién estaba y todo.
Rusia igual tenía su lado acosador.

ㅡSeguro que quieres que te deje a solas para bañarte? No confío aún mucho en ti.

Mencionó el japonés, Alemania ya había intentado suicidarse de varias formas, pero siempre hacia creer a Japón que eran errores o casualidades.

ㅡClaro, confía en mí.

Habló seguro mientras su boca formaba una falsa pero convincente sonrisa.

ㅡEsta bien, si me necesitas estaré limpiando el cuarto de al lado.

Habló Japón mientras cerraba la puerta del baño y dejaba solo al alemán.

Alemania se desvistió y entró a la tina, ya no tenía ni ánimos para intentar algo, mientras pasaba el jabón por su cuerpo lloraba en silencio y de una forma tan discreta que ni él se dió cuenta de cuando comenzaron sus lágrimas.

Últimamente estaba llorando mucho y eso le molestaba, nunca le gustó ser tan sensible, se odiaba por eso.
Se terminó de bañar salió de la ducha y cuando entró al cuarto encontró aún a Japón limpiando cosas.

ㅡOh, si saliste, estaba a punto de ir por ti cuando dejé de escuchar ruido.

Habló Japón de forma tranquila.

ㅡSi, no tuve ganas de hacer nada.

Comentó Alemania mientras se sentaba en su cama y secaba su cabello.

Japón lo vió y recordó que tenía que ir a hacer la comida así que bajó al comedor.

Por su lado, Alemania estaba relativamente "bien" hasta que comenzó a toser de nuevo, está vez ya sentía demasiado bloqueada su garganta y el toser le hacía más difícil respirar.

Se inclinó al suelo y trató de ponerse de cierta forma para que le fuera más fácil sacar los pétalos o una flor, quién sabe.
Pero lo que el alemán no sabía era que dentro de sus pulmones ya estaban creciendo raíces, a comparación de su tos, estás habían tardado más en salir y más después de entrar en depresión.

Pronto tuvo dificultades para respirar ya que sus vías estaban bloqueadas, su garganta no lograba recibir aire y su nariz aunque jalara aire, este no lograba pasar.

Como pudo se paró de dónde estaba mientras intentaba regresar o sacar los pétalos pero era inútil.
Logró llegar hasta la mitad de las escaleras y ahí fue cuando Japón lo vió.

El japonés tiró lo que traía en las manos y fue por su amigo, en aquel momento solo fue un milagro quizás ya que Japón pudo cargar a Alemania y llevarlo afuera para que vomitara ahí.

ㅡNo sé que hacer ahora!

Gritó con pánico el pequeño asiático mientras veía como su amigo se ponía de colores pálidos.

El japonés pronto se desesperó y comenzó a llorar, trataba de calmarse pero no lo conseguía hasta que una idea pasó por su cabeza.
Fue hacia la cocina, se puso guantes y de pasó sacó unas pequeñas pinzas.