Cap. 6. Indiferente

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Después de ese día en el que se suponía que el dúo dinámico volvería a estar juntos entrenando y en el que Kageyama no apareció Hinata había estado más insoportable que nunca, buscaba cualquier excusa para pelear con sus compañeros, principalmente con Tsukishima, Sugawara tuvo que intervenir y llamarles la atención a ambos, creyó que al día siguiente cuando estuvieran todos todo volvería a la normalidad, pero se equivocó.

Hinata llego muy temprano al día siguiente, tenía en mente disculparse con Kageyama por todo lo que había sucedido, se lo encontró en la entrada del gimnasio, pero para su sorpresa después de todo su discurso lleno de disculpas lo único que vio fue Indiferencia, eso fue lo único que Hinata pudo percibir en la mirada de Kageyama, como si nada de lo que le ha dicho o ha pasado le importe ya, ya no le importa su amistad, y parecía no importarle si ganaban o perdían los partidos de práctica.

Era notorio que después del campamento nacional Kageyama había pulido bastante su técnica sus colocaciones eran extraordinarias, no tendrían razones para quejarse de no notar que Tobio se veía frio y distante, había tenido muchos avances antes de irse como las celebraciones grupales después de conseguir un punto en una jugada difícil, reunirse con sus compañeros después de un día agotador de entrenamiento tan solo para platicar sus avances o cosas triviales, pero después de ausentarse el primer día de su regreso y aparecer hasta el segundo todos notaron su drástico cambio.

Es como si Kageyama fuera una computadora y lo hubieran reiniciado a su estado base, aquel en el que solo le importaba ganar, en donde no sabía trabajar en equipo en donde los demás no le importaban si no era para lograr sacar un triunfo en un partido.

A diferencia de cuando ingreso al equipo de Karasuno ahora era notorio lo demandante que era su forma de jugar, y no era para menos, estuvo en una concentración con los mejores del país era de esperarse que alguien como el que estaba aprendiendo y formando su estilo de juego hubiera adquirido algunos rasgos de algunos de sus compañeros setters o después de haber tenido a rematadores tan buenos él esperaba lo mismo de sus compañeros, así mismo era notorio que aunque sus compañeros se estaban esforzando y tratando de adquirir nuevas jugadas lo hacían a un ritmo menor por lo cual aún estaban en la fase de prueba y error, mas error que aciertos eran los que él veía durante los entrenamientos, Tobio solo notaba que fallaban más de lo normal, pases y colocaciones que antes eran puntos seguros, esto le molestaba ya que si había fallas quería decir solo dos cosas o ellos estaban errando a propósito, no tomándole la seriedad a esto o él estaba mandando pésimas colocaciones, cualquiera de estas dos opciones eran malas, no habían llegado a donde estaban con este tipo de juego tan mediocre.

Pese a lo que pensaba Kageyama no dijo nada, no se quejó del nivel que estaban presentando sus rematadores, sus compañeros de equipo se daban cuenta que el menor estaba inconforme con el nivel que estaban mostrando pero querían que fuera Kageyama quien lo expresara, necesitaban que sacara sea lo que sea que lo estaba molestando, sabían lo que había pasado con Hinata, no toda la historia pero Daichi al ser muy cercano a Kuroo fue inevitable que se enteraran sobre eso, sabían que tal vez era difícil para Kageyama pero no sabían cómo hacerlo hablar y desahogarse, mucho menos con Hinata presente, sabían que él no se abriría con ellos si el pelinaranja estaba ahí.

Si esta situación seguía de esta manera sabían que el equipo estaba en riesgo, que Kageyama fuera tan directo había ayudado mucho a entenderse como grupo ya que así hablaban de las cosas que no les gustaban y podían exponer sus motivos y llegar a un acuerdo, pero que Kageyama dejara de decirles lo que no le gustaba del juego se había convertido en evitar al rematador que lo hacía mal, haciendo notar su inconformidad en forma de no darles colocaciones a Hinata, Tanaka o Asahi, podía prescindir de ellos haciéndoles notar así que no lo estaban haciendo bien, sin embargo cuando ellos le preguntaban él les decía que no había notado que no les estaba dando colocaciones lo que era claramente una mentira, así paso una semana en la que la tensión en el equipo se hacía más evidente, las únicas ocasiones en las que Kageyma volvía a ser el de antes era cuando su teléfono sonaba anunciando un mensaje al cual siempre respondía casi de forma inmediata.

Mi enano favoritoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora