Mi visión hacia tí. (Bruno xT/N)

Capitulo 9 El mismo aire

Junio.

— Señora Alma gracias por resivirnos — Tu madre sonrió al entrar a la gran casa Madrigal

— Señora _____ pase — Alma los dirigió al comedor

Toda la familia se encontraba ahí a excepción de Bruno.

— Queremos pedirles su ayuda para la organización de la boda de nuestra T/N y Hernesto — Tu padre los miro orgulloso

— Por supuesto, Pepa y Félix se encargarán de que el día sea hermoso y soleado, Julieta y Agustín se encargarán del banquete, Dolores y Mariano por esta ocasión no podrán ayudar porque mi nieta se tiene que cuidar por su embarazo, Isabela y Mirabel se encargarán de los adornos además del vestido, Luisa les ayudará a colocar las cosas en su lugar, por último
Camilo y Antonio ayudarán a lo que haga falta — Alma sonreía

— Muchas gracias señora Alma

— No se preocupen la boda será perfecta

A todos les incomodaba la actitud de la abuela puesto que sabían que la razón por la que ofreció ayudar fue porque le urgía que se casarán para que su hijo entendiera que te tenía que olvidar.

— Serán nuestros invitados de honor — La mamá de Hernesto sonrió

— Muchas gracias, casita puedes traer a Bruno

La familia junto contigo y Hernesto se inquietaron ante las palabras de
la abuela. Bruno se encontraba sentado justo a lado de la puerta cuando está fue abierta, pronto las lozetas le hicieron señas de que saliera, el lo hizo y la casa lo guío hasta el comedor.

— Señor Bruno buenas tardes — Tu madre lo miro feliz

Bruno quedó helado al verte ahí a lado de Hernesto.

—¿Que sucede?

— Hijo T/N y Hernesto están próximos a casarse me gustaría que el día de su boda tuvieras una visión para que se las regales y vean el hermoso futuro que yo sé que les espera — Alma tomo su mano

— Por supuesto lo haré con gusto, por cierto felicidades a ustedes 2 se que su boda será hermosa y disfrutarán de formar su familia — los miro con amargura

Ustedes no dijeron ni una palabra. Rato después se retiraron.

— ¿Por qué hiciste eso mamá? — Julieta la miro furiosa

— Para que nuestro Brunito entienda que no hay futuro con ella

Pepa echo rayos y se retiró del comedor.

— Casita regresa a Bruno a su cuarto

La casa obedeció a Alma.

— Fuiste muy cruel mamá — Julieta estaba muy molesta

Todos se retiraron sin más dejando sola a la abuela.

— ¿Estoy haciendo lo correcto verdad Pedro? — Alma miró el gran árbol
familiar

Bruno se tiró a la cama a ahogarse una vez más en lágrimas pues el echo de verlos juntos le dolió más de lo que estaba dispuesto a admitir.

Julio.

— Sonríe mi amor, el vestido está precioso

— ¿De verdad tengo que hacer esto? — Dijiste con amargura

— No empieces, no frente a la señorita Mirabel

— No se preocupe ¿Me podría dejar a solas con T/N? Quiero hablarle sobre algunas ideas de bordados pero quiero que sean sorpresa para todos— Mirabel mintió a tu madre para poder hablar contigo ya que
ella era la gran encargada de tu vestido