El pana de los Chinos. «taekook»

«01»

Taehyung.

¿Adivinen quienes tenían clase de  técnicas e intervención a primera hora de la mañana con la profesora más boomer y odiosa que podía existir? Si, los más pendejos, los de la sección 02 dónde desgraciadamente estaba yo.

El problema no era la materia, no, para nada. El problema es que en vez de enseñarnos algo e iluminarnos con su conocimiento, la profesora solo nos tenía exponiendo un tema tras otro...

Hoy había llegado temprano, los de mi sección no se veían por ahí así que saqué mis audifonos con toda la intención de sentarme en el piso y escuchar musiquita mientras esperaba que se hiciera la hora o a que llegara alguien conocido.

Mi paz no duró mucho, por qué escuché ESA voz. 

— ¡HOLAA!— Era Jimin, aka la mortadela de mi arepa, con su franelita blanca y en jean como un estudiante del piu de fisioterapia más, de paso que se había desgraciado el cabello otra vez, estaba irreconocible.  — ¿Tienes rato aquí? — Me preguntó y me tendío la mano para ayudar a levantarme del suelo. — Para habermelo echo yo mismo quedó vergatario verdad? — Me dijo presumiendo el desastre que se había echo en las greñas.

Es que o sea, el fin de semana lo tenía normalito, catirito rubio oxigenao como le gustaba a él y hoy pues lo tenía naranja tirando a rosado, una loquera digna de él claro, pero si se veía vergatario pues.

— Quedaste como un carnaval —Le revolví el cabello con cariño — Pero como a ti te encanta ser el centro de atención, va contigo — Le dije — Y no, acabo de llegar, Vente vamos a ver si nos sentamos en las escaleras o en algún salón, no me gusta estar en el pasillo — Lo jalé de la mano y caminamos toda el área de la entrada hasta encontrar en dónde chismear a gusto.

— ¿Chamo y en esta universidad no había presupuesto para unos banquitos? — Se quejó mi mejor amigo. Para nuestra suerte las escaleras estaban vacías por qué si no bueno.

BUENO... Es que si, en efecto en ésta mondá no había ni una mata e mango en dónde sentarse de bajo a cuestionarte a ti mismo sobre por qué escogiste la carrera que escogiste mientras llorabas, estudiabas o cuestionabas tu existenicia entera todo al mismo tiempo jaja. Entonces, o te sentabas en el piso a mitad de pasillo, en las escaleras impidiendo el paso o te metías en un salón hasta que una sección entera te corriera porqué tenían clases.

Cada día amando más la UNERG sí.

— Ay mi cielo y eso que no has visto como están los baños... — Le dije en medio de un susurro — ¿y la gente de tu sección? — lo miré curioso.

— Andan por ahí comprando algo en los chinos, tú sabes que esos compinches a mí no me gustan. —él hizo una mueca con los labios y procedió a sacar su teléfono para ver la hora.

— Si Luis — dije sarcástico — debe ser que cuando dicen para tomar ron no eres el primero en poner los riales.

— Bueno mi hermano, hay prioridades. — Se encogió de hombros.

Jimin y yo nos conocimos por allá por los años 1600 en un plan vacacional de PDVSA, mi papá y su mamá trabajan ahí y por cosas del destino coincidimos con la misma recreadora y fue ahí que nos hicimos amiguitos por toda esa semana, ya después él iba a mi casa o yo a la suya los fines de semana, nos ayudábamos a estudiar y chismeábamos de bajo de la mata de parchita que tenía su abuela en el patio y así, nos volvimos uña y mugre.

Después de graduarnos del liceo yo me inscribí por aquí y él se fue a estudiar en Caripito porqué en ese entonces andaba embochinchado con una gente ahí que nada que ver, a los meses dejó de tratar con ellos, ser foráneo dejó de ser divertido además de que aumentaron el pasaje y bueno todo mal.  

Aparentemente si le gusta esta vaina porqué para inscribirse dos veces en la misma carrera y de paso, iniciar de cero por el hecho de que no le reconocieron sus notas cuando ya iba más o menos avanzado bueno........

— Buenass — Era Hoseok, venía olorosito el coño e madre, mínimo se había echado medio pote de la colonia, naguebonada.

— Eran — Dijimos Jimin y yo al mismo tiempo.

— Ta bien, sigan sacándome el culo que cuando yo me regrese para mí pueblo no los voy a llevar para playa patilla por pajuos — Nos sacó el dedo grosero y se sentó al lado mío — Mira cabeza e auyama, ya el profesor está en el salón, te vine a buscar.

Yo solté una carcajada. — Coño e la madre, si es JAJAJA. ¿Tienen una discusión hoy no? ¿Estudiaron? — Los dos negaron con la cabeza.

Qué esperanza.

— Mijo eso está pancita, Kike la reseña histórica del baloncesto y las reglas básicas, eso lo vengo viendo desde... — Hizo una pausa dramática — TODO EL LICEO MÁS O MENOS. — Me reviró los ojos y se levantó, Jimin hizo lo mismo y se estiró para sacar las ganas de irse a dormir pa su casa de su cuerpo.

— Yo no sé mi hermano, pero yo voy encomendado a chuito, al koki y al Malandro Ismael, qué sea lo que dios quiera. — Dijo Jimin relajao — No me vayas a dejar, me avisas cuando te vayas a ir para que me des la cola, hoy por ti mañana por mi — Chocó los cinco conmigo y se despidieron.

Al raaato, vinieron goteando como mangos los que estudiaban conmigo, entre esos mi pana querido Wooshik Jesús.  

— Epa — Venía comiéndose una empanada, dios mío yo sé que yo me comí dos canillas con avena esta mañana pero me entró un hambre que no jugaba carrito — ¿Estudiaste?

Olvidenlo, esa pregunta hizo que se me bajara la tensión y se me quitara el hambre.

—¿Qué? — Pregunté confundido — Contexto

— ¿Mijo tu no revisas el grupo de la sección? — Le pegó un mordisco a su empanada con toda la naturalidad del mundo pese a que estaba entrando en pánico porque yo creía que hoy no había nada relevante.

— Ehmm...

— ¿Otra vez silenciaste el grupo Taehyung Alejandro? — Frunció los labios y me dió un lepe en la frente  con sus dedos llenos de aceite, claro que si. 

— Ay, coño e tu madre, hazte así mismo en tu sabes dónde — dije sobándome la frente. — ¿Que había que estudiar o qué? — Pregunté todo paniqueado casi al borde del llanto por la ansiedad.

Dios mío acaso estas son las consecuencias de no haber hecho la catequesis ni la confirmación?

— Dijo que ibamos a conversar del taller ese que nunca nos evaluó porqué no teníamos dónde ver clase, ¿recuerdas?— Se terminó de comer su empanada y me empujó hacia el salón. 

— Ah, la vaina de los reflejos de los carajitos y eso? Nah, así sea cayendole a embuste presento y apruebo.  — Dije confiado pero cagado porque a veces la lengua es castigo del cuerpo... —¿Tienes algo que pueda leer ahí para caerle a embuste con base? Ando sin saldo y como cosa rara el internet de aquí no sirve pero es para nada... 

— Claro vale, pa eso estamos.