3-Gatito.

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Recién bajaban de aquel taxi que los dejo cerca a un motel de buen nombre, el azabache comenzaba a sentir los tragos subirsele a la cabeza y el rubio gozaba de lo que podía ganar.

No sé prostituía, de hecho, buscaba algo mejor.

Entraron al cuarto y el hombre, violento azotó al joven contra la cama, Yuri dejo escapar un chillido leve.

- O..oye~ - El hombre abrió más los ojos.

Eso le había gustado al azabache.

Rápidamente desabotono su propia camisa y Yuri lo secundo quitándose elismo su blusa esquelética y la negra que llevaba por debajo, mostrando un cuerpo fino y delgado, una cintura semifemenina y...costillas amoreteadas.

- ¿Uh? - El azabache paro un momento y curioso tocó una - ¿Te duelen? ¿Por qué estás así? - Pregunto, pero el rubio lo ignoro besándole los labios.

- ¿Te concentras en esas minorías? - Los ojos verdes, nuevamente inotizantes del joven lo inducieron a besarlo con más fuerza, marcar sus besos en la piel blanquesina, escuchar sus gemidos y grillos de sorpresa cuando de la nada lo mordía.

- Tienes razón - Después de un rato besandosez el pelinegro noto como su erección crecía y en busca de su propia satisfacción, la froto contra el cuerpo del rubio.

- ¿Ah?~ - Yuri cubrio sus labios y el hombre los detapo para besarlo.

- Yurio - El nombre de el chico en su boca, sabía a chocolate.

- ¿S..i?~ - Respondió el chico con exitacion a flor de piel, le gustaba la sensación que Otabek le brindaba.

- ¿Terminamos esto como debe ser? ¿Paramos? - Pregunto besando el cuello y las clavículas del chico, esas partes de el, y su cintura, loantenian entre la locura y la cordura.

- Aquí soy todo tuyo Beka, tu pide - El hombre vio los ojos de el chico, hipnotizando se otra vez - Que yo cumpliré - Aquellas sonrisa, era una invitación directa al pecado.

(...)

Despertó fastidiado, la luz del sol se colaba por la cortina más acomodada, se sentó fastidiado y vio a su costado.

Abrió los ojos en grande al ver a una chica rubia a su lado.

"¿Que demonios hice?"

Pensó comenzando a entrar en pánico.

"¿Siquiera me cuide? ¿Tan ebrio estaba? ¡¿Con una chica?! A ver, quizás me eccedi con las copas, piensa Altin, ¡PIENSA!"

- Amm - No estaba seguro de como despertar a la chica - O..oye.

"¿Quien es esta? ¿La habré contratado? Dios ¿Que tan urgido estaba como para acostarme con un extraño..una extraña?"

- Umm - Yuri se quejo, dándose la vuelta y abriendo sus verdes ojos - Buenos días - Dijo dándose la vuelta y cubriendo su rostro con la almohada de Otabek - Cinco minutos mas~

Okey, algo bueno para la conciencia de Otabek, al menos había Sido un chico, así que no debía volver a pasar por el "descubrimiento de su ahora probable bisexualidad" seguía siendo un homo a toda regla.

Ahora algo otra vez bueno, no se debía preocupar por un embarazo.

Ahora una nueva preocupación.

"¡¿Quien demonios es este sujeto?! Espera, se ve muy joven... ¡¿Quien demonios es este niño?! Espera ¿Me acosté con un niño? Oh dios"

- Oye - Llamo levemente, quitando con cuidado la almohada y viendo la expresión del joven, tan tranquila y pacífica, hasta que la luz del sol le perturbo el sueño y frunció el entrecejo.

- ¿Si? - Dijo sentándose y callendo su sábana, Otabek sintió vergüenza de ver las marcas en la piel planquesina del chico.

- ¿Quien eres? - Yuri abrió sus ojos y sonrió poniendo su dedo en sus propios labios.

- Bueno...anoche me llamaste Yura varias veces, pero me llamo Yu-ri-o - Deletreo lento para la comprensión del moreno.

- ¿Yurio? - El nombre, le sabía a chocolate en la boca, le gustaba el sabor.

- Si - Yuri sonrió juguetona mente.

- Oye..perdón si Amm te obligue a algo - Se veía incómodo y Yuri quizl aprovecharse un poco de el.

- Tu no me obligaste a nada - Fue sutil y sonrió cálidamente.

- ¿No? - Suspiro - Ah ya veo ¿Entonces como llegamos a esto?

El chico alzó sus hombros en señal de no saber, fingir ignorancia era uno de sus favoritos métodos.

- Creo que también estaba ebrio - Dijo el chico con una sonrisa triste - Aunque anoche digiste que me darías la luna y el cielo si no te dejaba.

Otabek abrió sus ojos sonrojado y desvío la mirada.

- Oh..demonios debería dejar de beber - El chico decidió hacer algo ozado.

Se arrecosto sobre las piernas de Otabek y lo miro desde abajo.

- ¿Mentiste? - Dijo fingiendo ahora tristeza.

- ¿Eh? L..lo siento - Dijo viendo al chico y deseando besar sus labios color durazno.

- Ya veo - El chico se levantó y se dispuso a bajar de la cama.

- Espera ¿Ahora que...se supone que harás? - Pregunto el azabache al ver el rubio sentarse al borde.

- Pues...irme, ya que te incómoda mi presencia, no es algo que en realidad yo busqué - Dijo Yuri, levemente en el fondo de su alma se desepcionaba, nunca logro que el hombre digiera una declaración de algo más que un intercambio de cuerpos por una noche.

- Baby - Yuri abrió sus ojos y volteo a verlo - Tu... - El azabache, en su seriedad desvío la mirada - Te entregaré el cielo y la tierra, el mismo infierno si me lo pides - Lo volvió a ver, fijamente en sus ojos verdes que le recordaban lo que le hizo al joven, y la extraña sensación de abandono que sintió al saber que el rubio se retiraría - Pero, no te vayas...de mi vida, no hoy.

Yuri sonrió y se volvió a arrecostar sobre las piernas de Otabek.

- Yez dady~ - Y así, Yurio lo volvió a besar.

Si, sus labios eran dulces.

"Saben a melocotón"

Siempre obtengo lo que quiero ¿Que les puedo decir? Soy muy Avaricioso.

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- Victor - Llamo aquel chico de cabello negro.

- ¿Dime mi querido Yuuri? - Dijo el peliplata viendo al azabache parado en la pista de hielo.

- La mamá de Yuri llamo - Dijo el japonés - Pregunta si se quedó en tu casa otra vez, pero el no llego anoche - Yuuri parecio preocupado - ¿Le habrá sucedido algo?

- ¿Paso la noche fuera? - Pregunto igualmente preocupado.

- Tal parece - Dijo el japones.

- ¿Dónde se habrá metido el gatito?...

°•SUGAR LOVE•° [Por Que El Gatito Lo Quiere Todo Y El Está Dispuesto A Darselo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora