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Desde aquel día, todo en mi vida ha sido muy diferente, me he sentido asustada y a veces quiero renunciar, me había acostumbrado tanto a la rutina que tenía, que el mudarme junto a siete chicos, que, aunque uno de ellos sea mi hermano, me intimidaba mucho.
La verdad es que solo puedo he logrado entablar una amistad con Jin, aunque la historia es algo chistosa, lamentable y, sobre todo, muy humillante, pero lo contare después. Y no es que los demás chicos sean malos conmigo, de hecho, la que tiende a alejarse soy yo, ya que gracias a la rutina que había llegado a tomar, se podría decir que aquella "luz" que me caracterizaba de más niña se había apagado notablemente, aunque me esforzaba mucho para que mi hermano no se diera cuenta.
Tae me repite mucho que debo de dejar la pena y que ellos enserio quieren unir sus lazos conmigo, incluso Jungkook que por lo que me ha dicho Jin es bastante penoso con las chicas, pero realmente es muy difícil y... no lo sé, ser idol es mi sueño, pero las probabilidades de que salga bien bajo las circunstancias en la que nos encontramos son casi que nulas, y no me gustaría arrastrar a los chicos y a mi hermano, por mi culpa.
...
Le he estado ocultado algo la persona a quien más quiero, mi hermano, y es que antes tenía la ventaja de que vivía sola y al tener el trabajo de medio tiempo podía ocultar muy bien todo, pero ahora compartiendo mi tiempo todo momento con todos ellos, no sé qué pueda pasar, sé que me va a apoyar y que está mal guardarse las cosas, especialmente algo como lo que pasa, pero tengo miedo de decepcionarlo de alguna manera y sé que es bobo pensar así, pero si se entera de todo lo que me ha pasado, no sé cómo podría cambiar su imagen de mí, y eso me asusta.
Todo había empezado los primeros días que llegue a la escuela en Seúl, había logrado hacerme un par de amigas: Kang Sohee y Park Soyeon. Todos en el salón de clases parecían enserio ser buenas personas, pero tiendo a ser ingenua, y por eso decidí ignorar los rumores y advertencias, en forma de chismes, que rondaban los pasillos "El salón A es un infierno", algo bastante comprometedor, a decir verdad, pero pensé que solo era lo típico para asustar a la nueva y hacer bromas estúpidas sin sentido. Vaya error.
El viernes de la primera semana salí algo tarde, no quedaban muchas personas, más que el conserje y unos cuantos pares de estudiantes yendo a sus lujosos carros, tenía algo que prisa porque tenía que llegar temprano al trabajo y luego ir a la empresa a unas clases, por eso mismo le había dicho a TaeHyung que no hacía falta que fuera a mi apartamento a visitarme, ya que estaría muy ocupada.
Tanta fue la prisa que ignore por completo una mancha, de lo que parecía aceite, y resbale cayendo cual saco de papas al suelo doblándome un tobillo ¿Qué había pasado? Al levantar mi vista al frente vi a algunos de mis compañeros reírse, y ahí entendí a la perfección lo que paso.
Esa tarde tuve que pedir permiso en el trabajo, tenía un insoportable dolor en el tobillo y casi no podía caminar bien y afortunadamente las clases que tenía en la empresa eran de vocalización, así que no tenía que hacer mucho esfuerzo. En ese entonces supuse que solo fue una broma de mal gusto por ser la nueva, así como los rumores, pero no fue así, las bromas fueron aumentando, siendo más recurrentes y pesadas e incluso llego un momento en el que ya no se molestaban en hacerlo de forma discreta.
