11: Meta no cumplida

277 35 4
                                    

Antes de que Kyojuro y yo empezáramos nuestra relación me propuse una meta. Ser cargado nuevamente por él.

Desde la vez que hizo eso para evitar que peleara con el chico jabalí, hizo que quisiera volver a sentir sus fuertes brazos al rededor mío, lo ansiaba y lo necesitaba para poder seguir viviendo. Pero claro, no era tan fácil. Puede que sea muy desvergonzado y no me de pena pedir las cosas sin ningún tipo de filtro, sin embargo lo que quería pedirle a Kyojuro me daba mucha vergüenza.

No quería llegar con él y decirle "Hey Kyo, necesito que me cargues para seguir viviendo, ¿lo harías aunque tuviera una erección?", claramente no iba a decir eso, terminaría asustado. Por eso he ideado un plan.

Simular que me voy a pelear con los tres mocosos.

Esos tres que son extrañamente famoso, resaltan por ser personas muy llamativas. Digo uno utiliza una máscara de jabalí.

El plan es el siguiente: Estaré cerca de ellos, en un momento donde Kyojuro pueda ver la situación, le meteré el pie a cualquiera de los tres y simularé querer pelear con ellos, así que Kyojuro vendrá y me alejará cargando y listo. Mi meta estaría cumplida.

Me puse en posición, recargado en un árbol del patio, vi a los tres acercarse, estaban platicando distraídos a su alrededor y por si fuera obra del destino, ellos estaban pasando muy cerca de mí. Atravesé mi pie en el chico de pelo amarillo, el cual terminó por caer en el suelo.

-Oye, mira por donde caminas.- me acerqué al chico quien comenzó a llorar al verme acercándome a él.

-¡Voy a morir y no pude pedirle matrimonio  a Nezuco-chan!- sollozó más al verme.

-¡Oh!- gritó el de puntas azules en su cabello- ¡Te reto a pelear conmigo!

-¡Zenitsu!- Tanjiro se agachó, ya no le presté más atención al de cabello amarillo por ver al otro.

-Está bien.- me encogí de hombros posicionándome en modo de pelea.

Mi contrincante solo me miró con una sonrisa extasiada posicionándose también en modo de ataque. Comencé acercarme a él sin dudarlo y justo en ese momento sentí a alguien rodear mi cintura cargándome. Por un momento creí que chispas de emoción saldrían de mis ojos al creer que Kyojuro me estaba cargando.

- No tan rápido pequeñín.

Espera. ¿Qué?

Voltee al instante al escuchar una voz desconocida topándome con uno de los amigos de Kyojuro. Tenía el cabello de color blanco el cual estaba sujeto en una coleta, me miraba con una sonrisa y me llamó la atención unas pequeñas perlas pegadas en una línea en los párpados de sus ojos fucsias.

Que extravagante.

-Uzui-san, que bueno que llega, el bandido e Inozuke estaban apunto de pelear.- Tanjiro se nos acercó preocupado, yo solo bufé mirando hacia otro lado.

-Y el próximo serás tú.- murmullé entre dientes.

-¡Pero mira esas agallas, genial!- exclamó.

-Ya bájalo Tengen.- creí escuchar la voz con la que te recibían en el cielo, voltee hacia el sonido y confirmé que fue Kyojuro el que habló.

-¡Kyojuro!- extendí mis brazos hacia él de manera emocionada, él solo me miró serio antes de volver hablarle al tal Uzui.

-Te estás tardando. 

-Vaya. Es la primera vez que me vez de esa manera, fantástico.- por fin me bajó de sus brazos y por sorpresa Kyojuro me jaló hacia él comenzando a caminar a una dirección diferente. Llegamos al lugar donde regularmente nos vemos en el receso, me sentó en la banca y suspiró antes de verme.

-¿Por qué no le pediste que te bajara?

-¿Eh? ¿A qué te refieres?- torció los ojos y se cruzó de brazos.

-Te veíamos muy cómodo y alegre para ser otro hombre el que te cargaba.- murmulló con un pequeño puchero, supe al instante a qué se refería.

-No le prestes atención, mi objetivo no era que él me cargara, yo quería que fueras tú el que lo hiciera.- abrí los ojos sorprendido al caer en cuenta de mis palabras, Kyojuro estaba igual que yo.

-¿Querías que yo fuera el que te cargara?- estaba sonrojado, por Dios quiero tomarle una foto.

-B-bueno, es lo que buscaba.- nos callamos avergonzados y fue hasta que Kyojuro se acercó para abrazarme.

-¿Con esto estás bien?- recargó mi cabeza en su pecho y no pude agradecerlo más.

Sin duda soy el hijo favorito de Dios.

-Más que bien.- me restregué sin vergüenza en su pecho duro, él soltó un chillido avergonzado antes de tirarme un zape.

Reí feliz. No pude cumplir mi misión de ser cargado por Kyojuro, pero el abrazo que estoy recibiendo es mejor que sentir sus brazos cargándome.


Please, Look at Me!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora