El Susurro Azul (Completa) ✔️

CAPITULO 110: DESEO

Changyi durmió durante mucho tiempo. Después de despertar, miró el fuego del zorro negro frente a él y se dio cuenta de lo que había sucedido.

Miró a Ji Yunhe.

Había estado despierta toda la noche y sus ojos estaban rojos.

Se miraron el uno al otro en silencio. No explicó por qué de repente se desmayó. Este pez de cola grande no era capaz de decir mentiras, y Ji Yunhe tampoco quería forzarlo.

Finalmente sonrió y rompió el silencio, "Ya casi amanece". Ella fingió estar tranquila y relajada. "Pez de cola grande, el tiempo que paso contigo siempre pasa tan rápido".

Changyi miró hacia abajo, sus largas pestañas cubriendo sus ojos. Suavemente tomó a Ji Yunhe en sus brazos sin decir nada.

Se acurrucaron juntos bajo la luna menguante.

Hasta que el sol apareció en el horizonte, devolviéndolos a la realidad.

Ji Yunhe dejó sus brazos y giró un mechón de su cabello plateado alrededor de su dedo. "Es hora de que regreses a la ciudad", dijo mientras le soltaba el cabello.

Changyi asintió y se levantó. "Regresaré y discutiré con Kongming y los demás sobre la situación aquí en la frontera. Deberíamos poder encontrar algunas soluciones en unos pocos días". Hizo una pausa y luego agregó: "Mantente a salvo".

Llamó a Qu Xiaoxing, pero Ji Yunhe lo llamó: "Changyi".

Changyi se dio la vuelta, su cabello plateado que reflejaba el sol naciente lo hacía lucir tan hermoso como un dios celestial.

Ji Yunhe lo admiró por un momento y luego sonrió. "Cuando esto termine, casémonos".

Los ojos azules se abrieron un poco.

Qu Xiaoxing, que estaba corriendo, se detuvo abruptamente después de escuchar sus palabras. Sus ojos iban y venían entre Ji Yunhe y Changyi.

La brisa primaveral sopló junto a ellos.

"Yo..." Changyi vaciló un poco y luego dijo, "todavía no puedo casarme contigo". Bajó los ojos.

Esta respuesta fue un poco inesperada. Qu Xiaoxing se mordió el pulgar con nerviosismo y miró a Ji Yunhe. Pero se veía tan tranquila como siempre sin signos de alguien que acababa de ser rechazado.

"Me diste tu marca. De acuerdo con las reglas de jiaoren, ya cuenta como matrimonio".

Qu Xiaoxing volvió a mirar a Changyi.

Changyi ahora parecía que él era el que había sido rechazado. Miró al suelo con el ceño fruncido durante mucho tiempo, reflexionando y sumido en sus pensamientos. "No cuenta de acuerdo con las reglas de los humanos".

"Ya no soy un humano".

"Tú tampoco eres un jiaoren".

"Pero eres un jiaoren, debes cumplir con las reglas de tu gente".

Las respuestas de Ji Yunhe fueron rápidas y las cejas de Changyi se tensaron aún más mientras continuaba pensando mucho, aparentemente sin tener un buen argumento contra ella.

Q Xiaoxing sintió un poco de simpatía por el jiaoren.

Sabía muy bien que una batalla verbal contra Ji Yunhe era más o menos inútil. Su cerebro era demasiado rápido y su boca demasiado inteligente, tratar con un pez simple y directo no era nada para ella.

"Yo... todavía no puedo casarme contigo".

Finalmente, el jiaoren ya no se molestaron en dar razones y simplemente se negaron rotundamente.