Reencarne en Draco Malfoy

Capítulo 4

Pov Draco:

Sentí un líquido bajando de mi boca y con mucho dolor de cuerpo me levanté y fui al baño, entré y cerré la puerta por si alguien entraba y así empecé a vomitar sangre

Por alguna extraña razón hoy estaba vomitando más sangre que otros días, no podía parar de vomitar

Seguía y seguía vomitando y después de un buen rato por fin pude parar de vomitar

Intente levantarme pero me costaba mucho, me dolía mucho el cuerpo, como si hubiera echo 20 horas de ejercicio y me estuviera levantando el día siguiente..

A duras penas consegui levantarme pero lo conseguí

Me lavé la boca y los dientes y fui a mi cama, me senté en ella y vi una nota y unas pastillas encima

Hijo, tu mamá y yo estamos en una reunión importante, llegaremos tarde.
Tómate las pastillas que hay al lado de esta nota.

Al ver las pastillas solamente suspiré enfadado, son las mismas pastillas que me tomaba en mi antigua vida

Enfadado agarre el vaso de agua que estaba tapado y me metí una pastilla para así tratarla con agua

Sabía horrible, es como si vomitaras y te tragaras el vómito

Al terminar de tragarme la pastilla me levanté lentamente y fui hacia la puerta de la habitacion, bajé hacia el piso de abajo y empecé a buscar la cocina

Cuando por fin la encontré, entre y vi que habían muchos elfos..

- A-amito Malfoy, ¿q-que es lo que n-necesita?- El elfo que al parecer se encargaba de la cocina me habló con un poco de temor

- Cocinare algo, con que me indiquéis donde están los ingredientes esta bien- les dijé con un tono tranquilo

- E-estan ahí a-amito, ¿p-pero no es mejor que le c-cocinemos algo?- El elfo señaló el lugar con un poco de temor y sorpresa

- Gracias, pero no hace falta, yo quiero cocinar- les hablaba con un tono tranquilo, aunque por dentro estaba emocionado, ¡podré cocinar yo solo!

Me lave las manos y con una pequeña taza agarré café molido, un bote de azúcar y leche

Puse la leche a calentar y agarre una taza para así ponerle dos cucharadas de café y otras dos de azúcar, cuando la leche se calentó la eché en la taza, aunque me queme un poco la mano por idiota

Un quejido de dolor salió de mi boca y los elfos se pusieron como locos

- ¡¿Amito se encuentra bien?!

- ¡Llamad a un medimago!

Había tantos elfos gritando y intentando llamar a un Medimago que me empecé a estresar

- ¡No llaméis a nadie! Estoy bien, solo ha sido una quemadura y en poco tiempo se irá- Cuando dije eso todos los elfos se callaron

Suspiré y seguí hablando

- Gracias por vuestra preocupación, pero estoy bien- Les sonreí para que así vieran que no miento

Los elfos asistieron y así yo agarre mi taza de café y me fui al salón, me senté con la esperanza de que papá y mamá vengan, en mi antigua vida mis padres tenían miedo de acercarse a mi por si se les pega mi enfermedad, así que nunca los veía, y tengo la esperanza de que mis ahora papas me quieran

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Estuve todo el día esperándolos sentado, pero no aparecieron..

Lágrimas bajaban de mis ojos, todo el día esperándolos sentado sin comer nada y no aparecieron..

Ya sin ninguna esperanza me fui a mi habitación y me acosté en mi cama

- A-amito, debería de comer algo, se puede enfermar si no come nada...- el elfo hablaba con preocupación

- No tengo hambre, ya mañana comeré, y no le digas a mis padres que los estuve esperando- Mi voz sonaba rota por cada palabra que pronunciaba

- E-entendido amito- El elfo pronunció esas dos últimas palabras y desapareció

Cuando el elfo se fue yo me dormí
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Ya han pasado semanas con la misma rutina

Levantarme, leer la carta en la que dice que me tome mis pastillas y que llegarán tarde a casa, vomitar, ducharme, desayunar y irme a dormir todo el día

Aunque ya no me tomaba las pastillas, ¿para que lo haría? Si moriré de todas formas, esas pastillas no me ayudan en nada

Cuando me estaba dirigiendo a mi cama para acostarme empecé a ver borroso

Intente sentarme en la cama pero me desplome en el suelo
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Pov Omniscente:

Lucius y Narcissa por fin terminaron otra de las reuniones con los Mortifagos, y al llegar a su casa esperaron ver la comida servida en la mesa como siempre, pero no, no había ni comida ni nada, lo único que había eran elfos llorando y preocupados

- ¿ Que está pasando aquí?- Lucius pregunto con un tono serio

- E-el A-amito e-esta..- el elfo trataba de hablar pero no podía parar de llorar