Sᴇɴᴛᴇɴᴄᴇ [ℂ𝕙𝕚𝕤𝕙𝕚𝕪𝕒 𝕊𝕙𝕦𝕟𝕥𝕒𝕣𝕠] (PAUSADA)

7 - Y atacó

— ¡¡Madison!! —Exclamo al acercarse en el estanque.

Puso ambas manos en su cabeza al ver la inmensa sangre que salía y no llegaba ver nada.
Su muerte traería muchos problemas en especial con los militares... además no quería muerta a esa chica.

Cerro los ojos bajando la cabeza para intentar calmarse... pensando en algo.

— ¡Ayudame idiota!

Abrió los ojos de pronto y miro al frente, encontrándose con esa azabache intentando salir llena de sangre. Ya ni fuerzas tenia en sus piernas y brazos como para salir de ahí.
No dudo en acercarse para ayudarla y notar que los tiburones yacían muertos en el agua.

— Justo cuando caí ellos comenzaron a explotar por dentro... pero uno llegó a morderme el antebrazo. —Explico cansada— joder... no puedo moverme.

Literalmente su cuerpo temblaba y Chishiya no tuvo más opción que cargarla en su espalda (ella no pudo negarse aunque soltó quejas) por suerte no pesaba mucho.
La desgracia es que lo mancho un poco de sangre, gracias al estanque lleno de ello.

Podía escuchar la respiración entrecortada de esta, pero poco a poco fue calmandose hasta cerrar lo ojos y dejarse llevar. Cayo dormida en su espalda sin notar lo aliviado que estaba él por su bienestar.

<Last Boss no me matará ahora>

Suspiro aliviado por ambas buenas noticias.

No imagino que a penas llegara y ya estaría el pelón esperando. Se alarmó cuando corrió hacia ellos y empujó a Arisu (pues éste intentaba calmarlo y ni le dejó abrir la boca) espero un puñetazo pero solo sintió como le quitaba el peso de su espalda.

Observo al mayor cargar a su compañera y llevársela rápidamente a sanar sin decir nada. Tal vez luego pedirá alguna explicación, por el momento Madison necesita atención y descanso.

Sonrio al ver a Arisu en el suelo, pues gracias a ese empujón cayó como bolsa de papas doblandose en una pose graciosa. Se notaba mucho lo débil que era. Usagi lo ayudaba a levantarse.

— ¿Qué le sucedió? —Preguntó una voz conocida.

— Es una larga historia, Kuina, pero conociéndote tendré que contarte. Por ahora iré a darle la carta al sombrerero.

Se despidió de la más alta y siguió su camino.

.

.

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— Bueno Chishiya, con lo que me has contado de igual forma ten cuidado con Last Boss. —Advirtió el sombrerero con una sonrisa mientras se echaba hacia atrás.

Éste arqueo una ceja confundido.

— ¿A qué se refiere? No hice nada malo y prácticamente la salve al traerla.

— Bueno... un pajarito me dijo que no le caes del todo bien a Maddie.

— Y ese "Pajarito" tiene piercing y cara de idiota, ¿verdad?

— Como sea, no me des imágenes feas. Lo que quiero decir que la pequeña Maddie fácilmente puede aprovechar la situación y cambiar su versión de la historia haciéndote quedar mal. ¿Entiendes a lo que voy?

Las piezas de juntaban entre sí y hasta comenzó a dudarlo.

Ella no se atrevería ¿verdad? Hizo lo posible para salvarla. Aunque claro que él mismo eligió entrar a ese juego cuando ella en realidad prefería ir a otro con más personas por las dudas.

— .... —Miro al mayor sin saber que decir— no creo que lo haga.

— Tranquilo, tienes permitido esconderte a otras habitaciones o salir unos dos días de la playa si es necesario.

Vaya Consuelo, eso solo lo alarmó más.

A penas abrió sus ojos y lo primero que vio fue el brazo vendado incluyendo las piernas gracias al esfuerzo en ello.
Se reincorporó para mirar mejor, ya estaba en su habitación y suspiro, el susto que se pegó cuando cayó al estanque.

Un sonido hizo que se alerte, de la puerta encontró esa persona importante en su vida ahora. Se acercó con rapidez para dejar la katana a un lado y examinarla.

— ¿Estás bien?

Dolores en ambos brazos y piernas, una mordida de tiburón en el antebrazo y dolor de espalda gracias a la fuerte caída en el estanque (ya que no era tan profundo) sumando el asco de la sangre con entrañas que le cayó.

— De puta madre, ¿Cómo lo ves?.

Claramente fue sarcasmo y éste obvio lo noto dado que no suele hablar así, al menos a él. Cerro los ojos con paciencia y asintió levantando la mano en señal de que Sí fue estupido preguntar.

— Bien, ahora necesito que me digas que sucedió. ¿Cuál es tu versión de la historia? Qué hizo Chishiya.

Oh...

OH~

Una sonrisa de malicia se formó a sus adentros. Todo eso le sucedió por su culpa y le advirtió que si algo salía muy mal se vengaria.
Tenia el destino del albino en sus frías manos.

Pero lo pensó... Chishiya a lo último la cargo en su espalda y hasta pudo ver lo preocupado que se veía en el juego. Tal vez sólo por ello perdonará su estupidez.

— El me salvo... se esforzó para ganar y que no cayera hacia los tiburones. Además se tomó la molestia de cargarme hasta aquí, ¿verdad? Supongo que hizo bien. Y gracias por preocuparte Samura...

Sonrio haciendo que el nombrado desvíe la mirada, no quería mostrarse vulnerable a nada. Pero asintió.

Y dejó descansar a la azabache por ahora, se lo gano incluyendo al otro idiota de sonrisa gatuna.