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Jungwon movía sus piernas inquieto. Por haber expuesto a su amigo se encontraba nervioso.

Jay se encontraba en su cama viendo una revista de moda con Jake recostado en su abdomen jugando algo de pistolitas en su celular.

-Mierda-se quejó el australiano-. Jungwon, ¿quieres ayudarme a pasar el nivel?

El menor no era amante de los videojuegos pero, si le preguntamos por sus secretos, se había terminado la mayoría de juegos de batalla disponibles para celulares.

-Jake, esto está muy fácil.

-Hola-entró Sunghoon nervioso a la habitación-. Les haré un pequeño resumen de lo acaba de suceder...-miró a los 3 para asegurarse de tener su atención-Jay, también te hablo a ti.

-Te escucho con los oídos, no con los ojos.

Sunghoon infló sus mejillas molesto y le tiró una almohada en la cara.

-Ahora que tengo su atención; alguien le contó a Heeseung que estoy en el edificio-Jungwon rascó su nuca-. Él dijo que podía quedarme pero que fuera cuidadoso, no puedo salir en la noche de la habitación ni tampoco andar caminando por los pasillos... Ahora, ¿quién de ustedes fue el chismoso?

Sunghoon no era tonto. Muchos chicos lo habían visto por el edificio pero ninguno conocía su nombre, Heeseung no era tan inteligente como para saber que se trataba de Sunghoon con solo una descripción.

-¿En serio crees que uno de nosotros lo hizo?-habló molesto Jay-En serio no cambiaste nada, Sunghoon.

-Claro que cambié, Jongseong-Jungwon frunció el ceño, ¿quién era Jongseong?-. Y tu actitud me hace sospechar de ti.

-Eres imbécil-se alzó de la cama el mayor.

-¡Basta!-Jake arrastró a Sunghoon con él hacia afuera. Era molesto ver peleas entre sus mejores amigos.

ROOMMATE - JAYWONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora