Babysitting

ꜱᴇᴠᴇɴᴛᴇᴇɴ

ー¡Pero Aizawa-sense!ー 

Protestó Uraraka al ponerse de pie del sillón donde había sido sentada, Todoroki aunque quiso hacer lo mismo decidió quedarse sentado, después de todo Uraraka ya lo había hecho por ambos. 

ーAunque entiendo la situación no puedo hacer nadaー 

ー¡Lo golpean! Por favor Aizawa-senseー 

Aizawa suspiró dejando los papeles que leía sobre la mesa, entendía la frustración de la chica, pero tampoco podía hacer mucho, ya se los había explicado. 

ーAunque fuera así, él no está a su cargo, no tenemos pruebas de que lo hagan, solo tenemos secuelas de un chico que fue afectado por un quirk de retroceso, además tampoco podemos estar completamente seguro que cosas que le pasaron al usuario no se reflejaron en esta versión de Bakugo ー 

ーBakugo me dijo que a él lo criaron con violencia ー 

Interrumpió la conversación al alzar su mano, Aizawa tiró la cabeza atrás y apretó los ojos con cansancio. 

ーPuede que si,  pero a ti también y tampoco podemos hacer algo que ocurrió en el pasado ー 

Todoroki alzó las cejas y se quedó callado, entendió de pronto a qué se refería su profesor. 

ーEsto es injusto ー Reclamó Uraraka volviéndose a sentar con fuerza sobre el pobre asiento que crujió bajo su actuar. 

ーSiento la misma frustración que tú Uraraka, pero una cosa es violencia y otra golpes, el cuerpo de Bakugo no tiene secuelas, y aunque las tuviera no podemos asegurar que no se las hiciera jugando. Midoriya ha expuesto que desde que tiene memoria Bakugo es temerario, y que le gusta ir de aventuras, más de una vez se ha caído y es posible que eso se vea reflejado si le hacemos un estudio sin saber qué encontrar ー

ー¿De verdad no se puede hacer nada?ー 

ーPodemos tener a Bakugo con nosotros, cuidarlo y protegerlo ー 

ーTampoco pensaba dejarlo ir ー Uraraka cruzó una pierna sobre la otra. 

ー¿Tan normal es esto?ー Preguntó Midoriya asombrado con la naturalidad con la que actuaba Aizawa con eso, porque al parecer estaba acostumbrado. 

ーMás de lo que me gustaría aceptar, las escuelas de elite reúnen a ese tipo de personas, que por propio impulso o impulso de alguien más son arrastrados al borde de la vida para poder llegar a donde están ahora. No creo que exista alguien aquí que no haya pasado por una situación parecida ー

Uraraka infló una mejilla con frustración, estaba tan molesta que estaba dispuesta a ir donde esa señora que se había llamar madre y gritarle un par de cosas, porque a pesar que Bakugo tenía un carácter bastante fuerte y difícil de tratar no era motivo para hacer lo que fuera que hiciera para tenerlo así de traumado. 

Está segura que ella no será ese tipo de madre, porque aunque le saque de quicio jamás le gritaría a un niño, menos a alguien que estaba recién viviendo en ese mundo. 

ーProfesorー 

Habló Todoroki llamando su atención. 

ーMe gustaría impedir, mientras tanto, que Bakugo se vea o sepa algo de su familia, también que hayan más personas que lo cuiden, si solo somos nosotros Bakugo pensará que nosotros somos los extraños que le tratan bien, pero si hay un numero mayor es posible que entienda que la extraña es su madre y ahora estará a salvo con cualquiera de nosotros. No sé si esto afecte a el Bakugo normal, pero si eso ayuda a que Bakugo esté bien creo que es una opción que debemos plantear ー 

Aizawa alzó un poco las cejas con sorpresa, esperaba esa opción pero no viniendo de él, quizás de Midoriya o de Uraraka, hasta de Yaoyorozu la esperaba, pero no de Todoroki.

Pronto entendió que Todoroki se estaba reflejando en el niño.

Era mejor separarlos. 

ーLo pensaré, por ahora retírense, Mic se quedará a cargo de Bakugo por unos días ー 

Los tres asintieron antes de salir de la oficina.

Aizawa volvió a poner atención en los papeles que tenía sobre su escritorio, esos perfiles psicológicos debían ser estudiados para poder concentrarse en encontrar a más cuidadores, porque por lo que veía eso se venía para largo, y como había dicho Todoroki, quizás si le enseñaban desde pequeño en confiar, el Bakugo que tenía a su cargo podría cambiar, podría ser un mejor héroe, porque ya era suficiente, pero ese suficiente llegó con demasiado dolor como equipaje.