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Y así como había susodicho Xie Yong, Dong Hua era una pieza importante en los planes de su Hermano Mayor Wei WuXian, pues sería aquel que con ayuda del Maestro Ye Bai y el Joven Maestro Li Jing que jugaría sus cartas moviendo las a como su Plan se había establecido sin ningún error ni nada, ya que tras Wei WuXian haber pasado largos años en el extranjero ellos le ayudaron a crear grandes e importantes conexiones con otras organizaciones más poderosas que las de su familia o las que él conocía.

— ¿Que es lo que ha sucedido tío pequeño? ¿Quienes fueron los que te trajeron anoche? — un curioso Jin Ling pregunto en cuanto el almuerzo de aquel día finalizó y solo habían quedado los adolescentes alrededor de Meng Yao con la intriga de saber quiénes eran los que llegaron en un lindo auto que se habían ido sin ni siquiera mostrar el rostro.

— Pequeño A-Ling — llamo suavemente Meng Yao con una de sus tiernas sonrisas, aunque ambos no se hubieran relacionado por algunos años, el Mayor siempre había estado al pendiente de lo que le sucedía al menor, el único hijo de su hermano mayor Jin ZiXuan. El cual le debía un enorme favor una vez hacía muchos años antes de que Meng Yao siquiera hubiera conocido a Nie MingJue, Jin ZiXuan lo salvo de una trágica situación en donde ambos pudieron conocerse y crear grandes lazos fraternales sin aún haberse enterado del lazo sanguíneo que los unía — hay algunas cosas que no debes saber aún sin importar que ya estés en este sucio mundo cruel — sobando delicadamente la cabeza de Jin Ling su tío Meng Yao le sonrió en el momento en que había fruncido el ceño igual que alguna vez había visto al arrogante de su padre hacerlo cuando las cosas no iban como él quería — además creo que tú y usted señorita Jiang, deberían estar entrenando con Madam Yu y el Maestro Cao — determinó el mayor de los presentes logrando hacer que ambos menos rodarán sus ojos al cielo.

— ¿Por qué RuSong no entrena igual, aquí con nosotros? — se quejó Jiang GuXiang de brazos cruzados queriendo tomarse un día de descanso sin tener que escuchar o ver al maestro que la entrenaba o inclusive a la más exigente de su abuela.

— No necesito estar estos días en YiLing, así que tengo un pequeño descanso por estos momentos hasta que vuelva — pronunció con alergia Meng RuSong logrando que su madre Meng Yao sonriera burlón, ya que lo último que su hijo iba hacer era tomarse un descanso cuando estuviera en la Mansión Jiang, pues Meng Yao estaba más que seguro que Madam Yu no iba a permitir que su hijo anduviera de vago bajo su vigilancia.

— No es justo — interfirió Jin Ling, quien llevaba varios días entrenando no solo con la familia Jiang sino también con la familia Jin, quienes le exigían un mejor entrenamiento al ser el siguiente Líder, algo que a Meng Yao no le importó pues realmente él no quería tener ninguna relación con los Jin más de la que ya tenía con su sobrino, la única persona que creía le importaba y era importante en su vida además de su hermano menor Mo XuanYu de resto nadie más, ya que todo era para ayudar a Wei WuXian con su plan.

— ¿Descansó? — la imponente voz de la Matriarca de la mansión Jiang se escuchó asustando levemente a Meng RuSong, quien era la primera vez que se relacionaba con la mujer mayor y no estaba acostumbrado al aura terrorífica que ella emanaba en cada aparición espontánea — ¿Eso es lo que le has enseñado a tu hijo, Meng Yao? — pregunto Madam Yu cruzada de brazos al recién mencionado viéndolo desconcertadamente mientras negaba — déjame decirte algo RuSong, cuando estés aquí no pienses ni un segundo en que vas andar de vago sin hacer nada — demandó la mujer mayor sin mirar al padre del joven que estaba reprendiendo por su palabras y pensamientos — así que los quiero a los tres en el campo de entrenamiento ¡Ahora mismo! — dándose medio vuelta, Madam Yu salió por donde había entrado dejando a Meng RuSong sorprendido por lo que había pasado, pues su madre no se había impuesto en lo que la mujer había dicho ni nada.

Regresando Por Tu AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora