Nuestro Destino

Capitulo 8

No olviden decir PRESENTE.

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Max

Llego a la casa y él primero que viene a saludarme hasta la entrada es Jafar, se me sube hasta quedar casi a mi altura y me lametea la cara. Le sonrío y lo bajo para poder seguir mi camino y llegar al patio trasero. Llegando al patio, visualizo a mi padre tomando algunas fotos con su Polaroid.

- No sabía que ibas a ir al Festival del Cine. - Me dice, mientras observa la impresión de la foto.

- No sabía que tenía que avisarte. - Meto mis manos en los bolsillos del pantalón.

- Solo preguntaba - se voltea hacia mí. - Sabes que es tradición que vayamos juntos todos, como familia.

- No la han cerrado, podemos ir otro día. - Me encojo de hombros.

- Como quieras - rueda los ojos.

- Max, no sabía que ya habías llegado. - Escucho a mi mamá detrás mío. - Esta vez Jafar no ladro. - Le sonrío y camino hacia ella para darle un beso en la mejilla.

- Le decía a tu hijo sobre el festival.

- Ah si, nos hubieras avisado. - Dice mi madre y me toca el hombro.

- No sabía que tenía que avisarles. - Vuelvo a decir.

- No es eso - suspira mi madre. - Los paparazis andaban cazándote - frunzo el ceño.

- ¿Cómo? - Volteo a ver a mi padre.

- Tiene razón tu madre, hay algunas fotos tuyas en el internet.

- ¿Qué fotos? - Vuelvo a fruncir más el ceño.

A este paso, envejecerás el doble.

Mi madre desbloquea su celular para después mostrarme algunas fotos. La primera foto, salgo yo bajando de la camioneta y, gracias a cualquier ser divino que encuentra en el cielo, no se alcanza a ver la cara de Emma por el parabrisas, la segunda foto salimos avanzando hacia la taquilla. Las últimas dos salimos cuando Emma se está poniendo mi sudadera y cuando estoy hablando muy cerca de ella. Cierro los ojos y suspiro, no sé qué es lo que me estresa más; las fotos o el que le haya dicho a Emma que solo la quiero como amiga.

Ni tú te la crees.

- ¿Es tu novia? - Pregunta mi madre.

- No - volteo a ver a mi padre. - ¿Puedes hacer algo para que las quiten?

- Lo voy a intentar - asiente con la cabeza. - Max, no quiero que nos mientas, ¿es tu novia?

- No, no es mi novia. - Frunzo el ceño. - ¿Por qué tanta insistencia en saberlo?

- Nada más - se encoje de hombros mi padre. - Porque si lo fuera, la podrías invitar a la cena de mañana en la casa de los Ferguson.

- ¿Tenemos cena en la casa de los Ferguson?

- Si, al parecer acaba de regresar su hija. - Contesta mi madre.

Asiento con la cabeza y me acuerdo de que ayer fue cuando la vi y, al parecer, le comento a Emma sobre su regreso.

Entro a la casa para dirigirme a mi cuarto. Cuando llego me aviento directamente a la cama y escondo mi cara en la almohada tratando de ocultar mi frustración. Me volteo y quedo boca arriba y observo mi techo lleno de un collage de fotografías tomadas por mí.