Me enamore de una asesina

Me enamoré de una asesina

Un tiempo mas tarde, después de terminar de almorzar…

--Gracias, por el almuerzo, creo que es el mejor que he tenido—Kate le dedico una tierna sonrisa
--Es solo pizza—Yelena trato de restarle importancia
--Pues nunca había visto la pizza como hoy—Kate se acercó a la rubia, buscando sus labios. Le dio un cálido beso, pero por parte de Yelena se sintió un poco frío --¿Pasa algo—Kate se extraño
--¿De que?—Yelena pregunto seria
--No lo se, te siento un poco…--Entre cerro los ojos—Rara
--¿Qué? – Yelena exagero una expresión de sorpresa—Para nada, todo está perfecto
--Ok, cuando te esfuerzas en mentir eres realmente mala haciéndolo—Alzó las ceja y se cruzo de brazos --¿Qué pasa?
Yelena sintió la intensa mirada de Kate sobre ella.
--¿Qué me podría pasar? – Soltó Yelena con un tono más serio
Kate paso saliva y bajo la mirada
--Puede…-- Suspiro—Que te arrepientas de lo de ayer
Un silencio inundó el lugar. A Kate le daba miedo voltear a ver a Yelena y que le confirmara lo que más temía, que todo solo hubiera sido cosa de un momento.
Y por parte de Yelena, no quería que Kate la viera a los ojos, no podría con el ver el dolor que le causaría.
--Lo siento—Yelena quería utilizar las palabras adecuadas para cumplir el trato hecho con Vanessa, y alejar a Kate para siempre, pero sin lastimarla tanto—Kate yo…-- Quiso seguir pero fue interrumpida por el sonido de una fuerte explosión, haciéndolas dar un pequeño salto.
Kate se asomo por la ventana. La estación donde se encontraba el guardia estaba en llamas. Cinco camionetas negras, blindadas y el auto raro del tipo con armadura, entraban al campus.
--Nos encontraron—Kate comenzó a buscar sus cosas
--Tienes que irte—Soltó Yelena sin expresión—Eres libre
--¿Qué?
--Ya eres libre, tienes que largarte de aquí, escapar y no volver, vive tu vida como tu quieras
--¿De que estas hablando? ¿ Tu…-- Kate no creí lo que escuchaba-- ¿Tu sabias que venían? ¿Les dijiste donde estábamos?
--Hice un trato con Vanessa, te dejara fuera de esto…
--¿Qué tipo de trato?
--Uno en el que tu quedas libre
--¿Y tu?
--Yo no soy como tu Kate, las personas como yo no tenemos un final feliz en la historia
--No me voy a ir sin ti
--No lo hagas más difícil—Yelena se le plato enfrente
Kate comenzó a sentir impotencia.
--No, tu no lo hagas difícil, no te repetiré de nuevo que no te dejaré sola—Kate busco tomar el rostro de Yelena, pero esta le detuvo las manos
--No, Kate, no
--Yelena, no me alejes—Casi suplico la arquera
--El trato con Vanessa está hecho, se acabó
--No digas eso
--Fuiste el cebo, acabaste tu trabajo, es tiempo de que te vallas
--¿Solo fui el cebo?
--Así es—Yelena parecía firme. Kate se derrumbaba con cada palabra
-- Pero…
--Entiéndelo Kate, tu y yo nunca vamos a estar juntas
--Eso no fue lo que dijiste ayer -- Los ojos de Kate se humedecían
--Estábamos borrachas, te mentí -- Yelena mantenía la cabeza abajo
--¡Si es así dímelo a la cara! -- Kate dio unos pasos furiosos hacia la rubia -- Porque no creo que la conexión que tuvimos ayer fuera mentira -- Su voz se entre corto
--Perdón Kate -- Yelena la vio directo a los ojos -- Pero esto no es mutuo, yo no siento nada por ti, solo te use para llegar aquí -- Su voz fue firme, sin titubeos ni temblor. Se quedaron viéndose unos segundos a los ojos.  Kate ya no pudo más, tomo con rapidez su arco y flechas y salió de la habitación lo más rápido que pudo, llevaba los ojos inundados de lágrimas y el corazón roto.
En cuanto Kate cerró la puerta, Yelena soltó en silencio el llanto más doloroso que había sentido, lanzo golpes al aire llenos de impotencia, cada palabra que le dijo le dolió hasta el alma hacerlo, pero ya no había vuelta atrás, era lo mejor para Kate, no había duda de que ahora si la había perdido para siempre.

Con Kate…

Iba a paso apresurado por los pasillos, se limpiaba las lágrimas con la mano. Justo cuando iba a abrir la puerta principal se detuvo de golpe ¿A dónde iría?, se preguntó ¿Qué haría ahora? El mundo se le había venido abajo hace unos segundos.
Se puso a pensar un instante, se quedó inmóvil completamente, sin saber que hacer.
--No puedo dejarla—Soltó. Dio unos pasos hacia atrás, pero volvió a detenerse – Pero ya no puedo—Se le volvió entre cortar la voz—No puedo hacer las cosas por las dos, no puedo—Agacho la cabeza, cerrando los ojos
--Kate, cuando comenzaras a ver por ti y no por los demás—La voz de su madre se escucho al fondo del pasillo
--¿Por eso me intentas matar? – Esta se volteo—A tu propia hija
--No he intentado matarte, quiero abrirte los ojos, que veas el mundo como yo lo veo
--¿Con odio y rencor?
--El mundo nos ha quitado demasiado ¿Por qué no quitarle algo para nosotros?
--¿Qué te quito?
--A tu padre, principalmente—Eleonor Soltó sería. Al escuchar esa frase, Kate se estremeció, era una herida que nunca dejaría de doler—Claro, pero a veces también da—Eleonor alzó la mano, esperando a que alguien la tomara. De la nada se dejó ver Kingpin, le tomó la mano y le dio un beso en la boca.
--Que asco—Kate reprocho
--Tal vez el amor te da asco porque nunca te has enamorado—Respondió su madre con una sonrisa enorme
Kate bajo la mirada. Si su madre supiera.
--Mi rey llego a alegrarme el mundo, me abrió los ojos
--¿Y Jack?—Preguntó Kate
--El solo fue una tapadera, mientras nosotros reinábamos el mundo—Confesó Kingpin
--Claro, ¿Por qué no?—Kate se sentía sin tantas ganas de pelear. Se sentía cansada, tanto física como mentalmente
--Volviendo a otro asunto—Eleonor se acercó a Kate—Ya no quiero que tu y yo estemos peleados, eres mi hija y me duele—Un tono maternal salió de la boca de Eleonor—Quiero que arreglemos nuestras diferencias, quiero que volcamos a ser madre e hija de nuevo—Le tomo la mejilla a Kate
--Yo…-- Kate no pudo evitar que unas lágrimas volvieran a salir. La tomó en un momento muy sensible.
--¿Qué te pasa?—Eleonor le limpio las lagrimas—Kate, dile a mamá lo que te pasa
--Yo…-- De nuevo Kate no pudo decir alguna frase, solo abrazo a su madre, si tiendo calidez y tranquilidad.
--¿Qué te puso así hija?
Kate dejo un momento antes de contestar.
--Me enamore, me enamore de una asesina—Soltó en llanto.