¿Confías en mí?

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En cuanto Yelena arranco la motocicleta, dirigiéndose hacia la calle a su derecha, ganándose malas palabras de casi todos los conductores de los autos que hizo frenar de golpe, en cuanto esta arranco, todos los hombres comenzaron a disparar en dirección a ellas, milagrosamente, sin ningún tiro certero.
--¡¿Estas bien?!—Se preocupo la rubia
--¡Creo que si!—Kate se revisaba con la mirada, en busca de sangre
Rápidamente los hombres subieron a las camionetas para seguirlas
--¡Nos alcanzarán! —Kate Volteo a ver hacia atrás, estaban un poco lejos, pero se aproximaban a gran velocidad
--¡¿Alguna idea?!—Yelena preguntó
--¡¿Qué?!—La arquera la Volteo a ver por el retrovisor-- ¡Tu eres la de los planes
--Genial—Yelena hizo un puchero—¿Qué tan cerca están?
--Demasiado cerca—Kate Volteo a verlos
--Deja que se acerquen más—
--¿Qué? Yo estoy atrás, si disparan las balas me darán a mi
--No dejaré que eso pase
--Eso es difícil de creer en esta situación
--¿Confías en mi?—Yelena la Volteo a ver por el retrovisor, Kate hizo lo mismo. En ese momento el tiempo se detuvo, a Kate se le olvidó que estaban arriba de una motocicleta a gran velocidad.
Recordó la conversación que tuvo por teléfono con Clint.
 
“Kate, no confío mucho en ella”
“Yo tampoco Clint, pero no quiero dejarla sola”
 
--Si—Murmuró y señalo con la cabeza, el tiempo volvió a correr
--Entonces agárrate fuerte—Yelena también confirmó con la cabeza
Kate Volteo a ver hacia atrás, ya casi las alcanzaban. Un hombre sacó medio cuerpo por la ventana, después le pasaron una metralleta
--Yelena…-- Kate abrió los ojos como platos
--Aún no—
--No es por presionar, pero… Kate veía como el hombre las tenía en la mira
--Aún no—Yelena se veía decidida. Kate sólo abrazo a la rubia y cerró los ojos con fuerza -- ¡Ahora! – Grito. Seguido de esto, dio una vuelta rotalmente cerrada hacia la izquierda, haciendo que las camionetas no pudieran reaccionar y se impactaron con todo el tráfico que había.
--No puede ser—Kate Volteo a ver el choque—Nadie sobrevive a eso—Sonrió
--Y así es como se escapa con un estilo cool – Yelena bajo la velocidad
--Si, eso fue…-- Kate no pudo acabar la frase. Desde delante de ellas, se escucho un disparo, seco, pero muy aturdidor
--¡Ah! —Yelena quitó la mano izquierda del manubrio
--¿Qué fue eso?
--Evidentemente un disparo—Yelena hablaba con dolor
--¿Yelena?—Kate s dio cuenta de que la rubia había sido herida
--Me dio en el hombro
--¿Pero de don…-- De nuevo Kate no pudo terminar la pregunta? Del la contrario del boulevard, en un carro súper blindado, de forma rara y diseño extraño (como si le hubieran tobado uno de los autos raros a Batman) una persona con un traje parecido al de Iron Man, les apuntaba con un arma.
Yelena alcanzo a reaccionar y con una sola mano logro ocultarse con los autos del tráfico
--¡Tiene que ser una broma! ¿Quién es ese?
--No lo se—El dolor se notaba en el rostro de Yelena
--Tenemos que detenernos, esta herida
--No, mejor hay que usar el plan B
--Tenemos un plan B?
--Busca en mi bolsillo izquierdo, encontrarás algo parecido a un pedazo de metal, un poco largo
Kate se apresuró a buscarlo
--¿Qué hago con esto? ¿Se lo lanzó esperando a que se asuste?
--¡No! – Ahora si la sangre en la ropa de Yelena se dejaba notar – Creo que, si tenemos que detenernos, no creo poder controlar la moto con una sola mano—Busco el callejón más cercano, detuvo la moto. Kate bajo rápidamente.
-- Eso es mucha sangre—Le ayudo a bajar
--Estaré bien, tienes sacar una caja de metal que esta de bajo del asiento—
Kate obedeció
--Aquí esta—Se llevo a la rubia-- ¿Es de primeros auxilios?—La abrió. Se encontró con otras piezas de metal, pero estas eran redondas
--Saca una de ellas—Yelena se veía cansada. Kate sin entender nada tomo una
--¿Qué hago con ella?
--Extiéndela, pero quita las manos de los bordes
Kate siguió las instrucciones, de manera instantánea, uno de los bordes se transformó en un picó y la otro lado en la cola de una flecha.
--No puede ser ¿Me compraste equipo?
--No, me lo debes porque lo debo—Yelena intento bromear
--No estás bien Yelena—Kate se acercó a ella —Necesitas ir  un hospital
--Un hospital no, pero si necesitamos ocultarnos, ahí mismo tiene que haber un botiquín de primeros auxilios, tómalo, tenemos que salir de las calles, creo que me equivoque, creo que si vienen por mi
 
Mientras tanto (en el auto raro) una platica entre el sujeto de la armadura y alguien de tras del intercomunicador
 
--Espero que mi encargo esté listo—Sonaba una voz de mujer, fuerte, empoderada
-- No irá muy lejos, le he disparado y…
--¡¿Qué hiciste que?!
--Le di en el hombro, estará bien, además es una bala especial, contiene un rastreador, ya voy a su encuentro
--Más te vale
--¿Qué hago con la joven que la acompaña?
-- No se quien es, pero no me importa si la matas, solo quiero a Yelena Belova con vida, tengo asuntos pendientes con ella
--Le llamo en un rato—Dicho esto corto la comunicación. Saco una tableta, la cual le daba una ubicación, la de las chicas
 
De nuevo con Yelena y Kate
 
--Aquí—Kate llevaba a Yelena apoyada de sus hombros
--¿Conoces este edificio? – Yelena se veía cada vez más apagada
--No, pero de eso se trata—Dicho esto, comenzó a presionar todos los timbres de los departamentos
--¿Hola?—Se escucho un hombre de tras de la bocina
--Hola, su comida ha llegado—Kate soltó entusiasta
--Casi acabo de colgar con ustedes—El hombre se sorprendió
--Tratamos de darle a nuestros clientes el mejor servicio
--Pase—El hombre les dejo pasar
--Wou, eso fue col
--Lo se, ahora hay que buscar un departamento vacío—Kate busco en los registros de los casilleros—El 57, en la quinta planta, facil—Dio ánimos
--Esta vez escogeremos el elevador, no me siento muy bien—Yelena tenia cada vez menos equilibrio
--Has perdido mucha sangre—Kate la tomo de la cintura, evitando que se cayera. Sus miradas se toparon.
--Tienes ojos muy bonitos Kate Bishop—Este alago tomo por sorpresa a la arquera
--Gracias—Paso saliva, nerviosa—Vamos, tienes que descansar—La encaminó al elevador, bajaron en el quinto piso y con técnicas de ladrón profesional, Kate abrió la puerta del departamento 57 – Aquí, siéntate—Quitó la sabana que cubría el mueble y después le ayudo a la rubia a ponerse cómoda en el sofá.
--¿Sabes como hacer la curación?
--No creo que con una bandita funcione—Kate estaba nerviosa, el ver así a Yelena, no le gustaba para nada
--Tienes que sacar la bala—
-- OK, OK, sencillo—Kate comenzó a caminar en semicírculos—Suena fácil, solo…
--Kate, concéntrate
--Si—Se sentó a un lado de ella
--Ayúdame—Yelena intentaba quitarse la blusa. Tímidamente Kate le ayudo, quedándose solo en sostén. La joven arquera no pudo con la curiosidad, Volteo a ver su cuerpo, en realidad lo tenía marcado y bien definido pero su curiosidad de acabo al ver su hombro, por el cual corría un gran flujo de sangre – Esto no te gustara, tienes que meter el dedo en el orificio de bala para ver hasta donde esta—
--¿Te dolerá?
--Demasiado, pero resistiré o me desmayare, pero solo hazlo
--Si—Kate paso saliva. Tomo aire y se dispuso a hacerlo
--¡Ah!—Yelena grito algo fuerte
--¡La siento! No esta tan adentro – Dicho esto, saco el dedo, ensangrentado
--Entonces esto es lo que vas a hacer—Yelena se recuperaba—Busca algo de metal, un cuchillo tal vez
--Tengo una navaja
--Sirve, en mi bota derecha tengo un encendedor
--En verdad te gusta guardar cosas por todos lados—Kate se sorprendió
-- Deberías hacerlo, puede salvarte la vida
--Lo tengo
--Vas a calentar la hoja de la navaja, hasta que esté a color rojo vivo, pero antes de que se ponga de ese color , sacaras la bala con el dedo, terminaras de calentar la hoja y selladas el orificio de bala
--¿Estas segura?—Kate sentía que era una fantasía
-- Si, confía en mi—De nuevo sus palabras retumbaron en la cabeza de la arquera
--Esta bien—Comenzó calentar la hoja y justo antes de que se pusiera rojo vivo comenzó a sacar la bala
--¡Ah! —Yelena grito de nuevo
--No puedo, te estoy lastimando demasiado—Kate iba a sacar el dedo, pero Yelena la detuvo
--Si puedes, confío en ti, solo sácala—
Kate hizo otro intento, logrando sacar ña bala. En seguida siguió calentando la hoja de la navaja, cuando llegó al punto máximo la coloco sobre el agujero de bala.
--¡Ah!—Yelena estaba sufriendo
--Lo siento, lo siento—Kate cerro los ojos, sin quitar el metal caliente del cuerpo de Yelena, pasaron unos minutos.
--Esta bien—Yelena respiraba rapidamente – Esta bien, ya se acabo, acabas de salvarme la vida—Kate abrió los ojos, vio que ya no salia sangre. Volteo a ver sus manos, las cuales estaban empapadas de sangre.
--Yo…-- Kate entro en shock—Hay mucha sangre—Sin decir más, se levantó y fue al baño. Abrió la llave del lavavo y comenzó a lavarse las manos, tallandose cada vez con más fuerza, algo desesperada. Se Volteo a ver al espejo y comenzó a llorar, tirándose al suelo.
Yelena intento limpiarse la sangre, tomo una sabana que cubría otro mueble, se la puso como capa y se dirigió al baño.
Cuando abrió la puerta, se encontró con Kate en el suelo, con la cabeza oculta entre las rodillas. Con esfuerzo y dolor, se sentó a un lado de ella, no dijo nada, solo se quedó callada. Kate la Volteo a ver, la rubia le dedico una sonrisa.
--Esta bien, estoy bien
--Casi mueres
--Pero no lo hice, digo, no estoy al cien, pero se que voy a vivir, gracias a ti
--Toda esa sangre yo…-- Kate se veía un poco derrotada
--Oye… --Llamo su atención—Kate Bishop es fuerte, ha visto como te comportas en situaciones difíciles, no dejes que esto te derrumbe, puedes con esto y más, eres una mujer fantastica—Le dio un voto de confianza. La arquera se quedó pensativa.
--¿Sabes?, Ya van varias veces que…-- Se limpio las lagrimas—Que solo me llamas Kate—Sonrió
--No es cierto—Yelena se hizo la inocente
--Claro que si, cuando me detonó la bomba, cuando nos iban a disparar y hace rato, en mi crisis de nervios—Río
--Espera, ¿Me estas diciendo que no estabas desmayada? ¿Me hiciste cargarte solo porque si?—Yelena también bromeo
--Puede ser—Kate entrecerro los ojos. Las dos rieron. Yelena se quejo un poco de dolor – Tienes que descansar—
--Si, eso es buena idea—Kate la ayudo a levantarse. Se dirigieron a la habitación, pero a Kate le llamó la atención una luz azul, parpadeante que estaba a un lado del sillón.
--Espera…-- Se dirigió hacia ella—Es la bala, tenía un rastreador
--Sabe donde estamos—Yelena paso saliva
--Tenemos que alejarlo de aquí—
--El pedazo de metal que sacaste de mi bolsa izquierda
--Aquí esta—Kate lo mostro-- ¿De que nos servirá?
-- Ponlo en la palma de tu mano, apriétalo y da un fuerte golpe hacia abajo
Kate obedeció y al dar el golpe, de aquella pequeña cosa de metal, salió un arco
--Wou—Kate estaba sorprendida—Clint tiene uno de estos—Dio unos pequeños saltos de emoción
--Si, lo reconozco, es lo único col que tiene ese hombre
--Oye—Kate la Volteo a ver
--¿Qué? Su personalidad no le ayuda mucho—Yelena bromeo—Pero dejemos eso para otro momento. Coloca la bala en una de las flechas y lánzala lo más lejos que puedas, esperemos que no sea demasiado tarde.
Kate se dio prisa, tomo la bala, la fijo en el picó de la flecha con algo de cinta que encontró en uno de los cajones polvorientos de la cocina. Abrió la ventana y estiro la cuerda del arco. Se tomó un momento para fijar el punto y disparo.
--Listo, tiene buena tensión la cuerda así que puede que caiga unas cuantas calles lejos de aquí
--OK, ahora a esperar que no halla sido demasiado tarde
--Ti descansa, yo haré guardia, lo necesitas más que yo
--Por esta vez te tomaré la palabra—Yelena se dirigió al cuarto.
Kate miro por la ventana, ya comenzaba a oscurecer, las luces de los edificios comenzaban a notarse cada vez más
--Por favor que no halla sido demasiado tarde—Murmuró
 
De vuelta con el Iron Man falso
 
De un golpe destrozo la puerta del edificio, alarmando al portero, el cual intento correr, peri lo detuvo tomándolo del cuello.
--Te dejare vivir si me dices ¿Dónde esta ella? – Le mostró una foto de Yelena
--No lo se, jamás la había visto—El hombre hablaba con dificultad
--No lo preguntare una tercera vez, se que esta en este edificio, ¿Dónde esta?
-- Le juro que jamás la he visto, por favor, no me mate—Suplico llorando el hombre
--No me sirves—Lo libero
--¿Dónde está la canina de cámaras?
El hombre señaló una puerta al fondo. El de la armadura se dirigió hacia ella. Comenzó a buscar en las cámaras, cuadro por cuadro. Después de tiempo buscando, se dio cuenta de que no estaban ahí, que lo habían engañado.
--¡Demonios! —Grito derrumbando las pantallas –Te encontrare—Murmuró

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HOLA.!
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Me enamore de una asesinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora