LOVE LETTER (Aizawa x T/n)

CAPÍTULO 32 ¿Todo bien?

Te habías encerrado en tu cuarto recargando tu cuerpo contra la puerta intentando calmar tu corazón, tus latidos eran tan fuertes que pareciera que se te saldría del pecho en cualquier instante, ligeras lagrimas comenzaron a salir de tus ojos, no eran lagrimas de tristeza si no mas bien por todo lo que sentías como si tus sentimientos brotaran de golpe, ya no había vuelta atrás, aquel beso solo había despertado en ti un incendio que para nada se apagaría y eso sin duda era un gran problema, intentabas respirar calmadamente cuando de repente escuchaste su voz al otro lado de la puerta.

- ¿Podemos hablar?- hablaba en un tono bajo y a pesar de que tenías demasiadas cosas que preguntarle y decirle no querías verlo en ese momento, si lo veías ahora no podrías controlar las inmensas ganas que tenias de volver a sentir sus labios

- Creo que lo mejor por ahora es que usted se vaya- limpiaste con tus manos tus mejillas mojadas

- Tu voz se escucha entrecortada, no quiero dejarte en ese estado- tomaste una larga respiración antes de contestar

- Estaré bien, mañana tal vez podamos hablar ahora solo por favor... déjeme sola- escuchaste un notorio suspiro para después oír unos pasos alejarse dejándote caer en el piso

Estabas acostada en tu cama intentando asimilar todo lo que había pasado, obviamente sentías una alegría en tu interior pero a la vez se había manifestado todas las preocupaciones que habías cargado, tu mente rápidamente se llenó de dudas pero principalmente resonaba en tu cabeza si aquello había sido intencional o algo que simplemente había sucedido por el calor del momento, tomaste tu almohada en tu brazos anhelando olvidar todo solo por un instante, deseando que todo regresara a como están antes pero cada que cerrabas tus ojos el recuerdo de sus labios sobre los suyos te invadía, tu sonrojo en tus mejillas delataba lo bien que te habías sentido provocando que por un instante todo lo que tanto te había preocupado se hubiera esfumado, tan solo estaban ustedes dejando que sus emociones fluyeran mandando al diablo lo que los demás seguramente pensarían.

A la mañana siguiente te encontrabas realmente cansada debido a que solo habías logrado dormir un par de horas, apenas y comenzaste a escuchar movimiento afuera de tu habitación saliste directo a la habitación de Mina la cual aún se encontraba dormida.

- Mina- dijiste mientras cerrabas su puerta para después acercarte a ella- Despierta- moviste su brazo recibiendo como respuesta solo un quejido- Mina necesito que despiertes ya- tomaste su hombro moviendo con un poco de brusquedad

- Déjame dormir- balbuceo quitando tu mano

- Aizawa me beso- te acercaste a su oído con la intención de que aun dormida pudiera escucharte y pudiste ver que funciono cuando sus ojos se abriendo de golpe

- ¡¿Qué?! Estas de broma ¿Verdad?- preguntó sorprendida la chica mientras se incorporaba en su cama pero rápidamente se abalanzó sobre ti cuando negaste con la cabeza- ¡¿Cómo?! Literal solo me dormí y paso esto- te sentaste a su lado para así poderle explicar todo lo que había sucedido la noche anterior esperando que ella pudiera aclarar tu mente- Y bueno ¿Ahora cómo te sientes?- recargaste tu cabeza en su hombro

- No lo sé, claro que estoy feliz y dios... en verdad se sintieron tan bien sus labios pero ¿Y si solo fue por el momento? Y en verdad no siente algo por mi, además... que tal si después de lo de anoche ve que en realidad esto esta súper incorrecto y se aleja de mi- sentiste la mano de la chica rosada acariciándote el hombro

- Tranquila, solo hay una forma de averiguarlo y calmar tus pensamientos- lentamente se quitó de tu lado para pararse frente a ti- Tienes que preguntarle, habla con el finalmente- soltaste un quejido dejándote caer de espaldas