Let me go. (Raura FanFic)

Capítulo 12

Lentamente levante mi espalda, con dificultad logre abrir los ojos, y me los talle con una mano, un fuerte dolor estallo contra mi cabeza y cuando agache esta, me di cuenta que había un brazo abrazando toda mi cintura, levante un poco la mirada y aquel rubio estaba boca abajo con todo el cuerpo tensado sobre el colchón. No recordaba nada, pero al verme con toda mi ropa puesta largue un gran suspiro de alivio, no había pasado nada de lo pudiera arrepentirme, o al menos eso esperaba.

Puse mi mano sobre su brazo para retirarlo de mí, pero él se apresuró y me tomo con más fuerza para pegarme contra él.

—Ross —Lo llame, pero el solo soltó un pequeño quejido— Ross.. —Dije de nuevo, pero un poco más alto, no obstante, el parecía no inmutarse— ¡Ross! —Esta vez, quite con fuerza su mano de mí y lo hice rodar hasta caer de la cama, ahora si estaba despierto.

—Diablos Laura, ¿Qué pasa contigo? —Preguntó algo irritado, parándose con dificultad del suelo, tomando asiento de nuevo en la cama.

—Siento que la cabeza me va a estallar —Respondí tomando con fuerza la parte superior de esta.

De pronto sentí un sabor agrío en la garganta, y supe lo que se iba a venir, apresuradamente me levante, y gracias al cielo que en el cuarto había un baño, me puse de rodillas en el suelo y empecé a expulsar en el w.c todo lo que supuse, había consumido anoche.

Dos manos se deslizaron por mi espalda, dando suaves caricias sobre ella.

—Creo que eso fue to.. —No alcance a terminar la frase, estaba limpiando mi estómago de nuevo— Bueno, creo que ahora si es todo —Me tome del lavamanos y me impulse para ponerme de pie con la ayuda de Ross que me sostenía.

Afortunadamente, había enjuague bucal ahí, tome sorbos e hice gárgaras con él para luego escupir, haciéndolo unas cinco veces más.

—¿Cómo te sientes? —Bajo su mirada a la mía.

—Ya mejor —Me detuve un segundo a mirarlo, ¿Por qué él se veía tan bien? —¿Por qué no estas con resaca como yo?

El expidió una gran sonrisa.

—Bueno, yo no bebí tanto como tú.

—¿De qué hablas? —Fruncí el ceño— Bebimos lo mismo.

—Bueno, tu creíste que estábamos bebiendo lo mismo.

Como no podía mantenerme de pie más, me senté sobre la cama.

—Explícate. —Pedí, tratando de soportar el dolor de cabeza que tenía.

—Bien, como tú estabas tan ebria, ni te diste cuenta que en vez de tomar mi vaso, yo lo tiraba o simplemente lo devolvía, tome algunos y tambaleaba un poco, mas no me embriague como tú.

—¿Por qué lo hiciste?

—Como tú estabas con miles de tragos encima, no viste que ya centenares de hombres, te estaban casi desnudando con la mirada —Pliso el ceño— Y, tenía que estar cuidándote toda la noche.

—Entonces debes recordar que hicimos anoche. —Aseguré, él se sentó a mi lado.

—Lo recuerdo bastante bien Laura. —Dijo con cierto toque de satisfacción.

—Okey —Asentí— Explícame.

—Te lo voy a resumir —Lo observe atentamente— Bailamos demasiado, intentaste tirarme a la piscina pero en vez de eso, ambos caímos en ella, luego me dijiste que tenías sueño, y te lleve al único cuarto que se encontraba desocupado y luego... —Hizo una gran pausa.

—¿Luego qué? —Pregunte, algo temerosa por la respuesta.

—Te bese. —Toda mi cara se tensó.